Con el ingreso del frente frío a nivel país empezaron a circular varias infecciones respiratorias graves o agudas vinculadas al virus sincitial respiratorio (VSR), que puede afectar tanto a adultos como a los niños, siendo estos últimos los más afectados pudiendo ingresar a terapia, incluso llegar al fallecimiento.

Según la doctora María Esther Gómez, en esta temporada no solo circula el COVID-19, y teniendo en cuenta que este año el frío ingresó de manera más prematura son más los casos de menores contagiados con el VSR, pero el Ministerio de Salud e IPS ofrecen palivizumab para evitar contagios en prematuros.

“Este virus afecta más a menores de 2 años y hay un mayor porcentaje. Pero la población más vulnerable es la de los prematuros pequeños, los lactantes con displasia broncopulmonar y cardiopatías congénitas hemodinámicamente significativas”, dijo en contacto con La Nación.

Indicó que las infecciones por VRS se producen en forma de brotes anuales y en nuestro país, el período estacional comienza en otoño, alcanza su máximo en invierno y se extiende hasta la primavera. “Pueden existir diferencias en el momento de inicio y fin de la estación según las diferentes regiones. Esta variación generaría un desfasaje en el período de protección de inicio y fin de la temporada”, aclaró.

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En otro momento destacó que este año los casos de virus respiratorio y especialmente de VSR aumentaron notoriamente, teniendo en cuenta que el año pasado con el ingreso del COVID-19 y la cuarentena en la que los niños no podían salir fueron muy bajo los contagios.

“El año pasado con la cuarentena bajó el número de casos de virus sincitial respiratorio porque no tuvieron contacto con otros niños, estuvieron en sus casas todo el invierno. Pero este año al levantarse la cuarentena los niños empezaron a convivir, ir a las escuelas, entonces esperamos a reportar más casos”, refirió.

Aclaró que las infecciones de las vías respiratorias, causadas por virus o bacterias, son la principal causa de enfermedad y mortalidad en los niños. Entre ellas se pueden encontrar la gripe, neumonía, influenza, virus sincitial respiratorio (VSR), bronquitis, bronquiolitis y otras más. Estas afecciones comprometen las vías nasales, los bronquios y los pulmones, principalmente.

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Muchos de los primeros síntomas de la infección por el virus respiratorio sincitial son similares a los del resfriado común. Los bebés y niños pequeños pueden presentar fiebre, congestión nasal, moqueo y, a veces, tos persistente, dificultad respiratoria (se marcan las costillas y el abdomen sube y baja de manera exagerada al respirar y se ensanchan las fosas nasales).

Agregó que la respiración se hace más rápida que lo normal, en algunos casos se torna ruidosa, con sibilancias (sonido parecido al de un silbido o pito al respirar). “Algunos niños pueden tener dificultad para alimentarse y a veces pueden presentar algún vómito o atragantamiento. Todo esto ocurre porque sus bronquiolos están obstruidos por la inflamación”, afirmó la profesional.

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La doctora dijo que a nivel país se cuenta con un tratamiento que es mediante el palivizumab, cuyo costo es de 12.000.000 de guaraníes cada ampolla, pero que no se trata de una vacuna. “No es una vacuna el palivizumab, se utiliza como profilaxis, para prevenir los cuadros graves producido por VSR”, aseguró.

Explicó que se trata de un anticuerpo monoclonal humanizado contra el virus respiratorio sincicial, que se aplica durante la estación invernal. “Este año el Ministerio de Salud se portó increíblemente y pudimos comenzar con el tratamiento puntualmente en marzo, ya que se requiere de al menos 3 dosis para que sea efectiva, pero lo ideal es la aplicación de cinco”, sentenció.

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Manifestó que las dosis son administradas en forma intramuscular y que a nivel país ya se cuenta con la lista de los pacientes que requieren de esta medicación. “Este año comenzamos puntualmente en marzo y este mes los pacientes ya reciben las tres primeras dosis del esquema, pero los que aún no aceptaron están a tiempo de aplicar a sus pequeños”, puntualizó.

Las campañas de inmunización pasiva a los grupos de riesgo se llevan a cabo anualmente en los hospitales dependientes del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, tales como el Hospital Materno Infantil San Pablo, el Hospital Nacional de Itauguá, el Hospital Pediátrico Acosta Ñu, el Hospital General Barrio Obrero y en el Instituto de Previsión Social (IPS).

“La profilaxis del VRS con palivizumab en prematuros menores de 32 semanas de EG o menor de 1.500 gramos con DBP y cardiopatías congénitas hemodinámicamente significativas”, confirmó. Señaló desde abril a setiembre, tiempo de circulación de VSR, se recomienda indicar a la población de riesgo una dosis mensual de 15 mg/kg de palivizumab por vía intramuscular.

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-Promover la lactancia materna.

-Importancia de la higiene de manos, personal y de la casa, como así también evitar la contaminación ambiental con humo (tabaco, sahumerios, braseros, etc.).

-Realizar los controles pediátricos de rutina para evaluar el estado nutricional y mantener actualizadas las vacunas, sobre todo aplicar la vacuna antigripal.

-Evitar la asistencia a jardines maternales, lugares públicos cerrados en época de riesgo y el hacinamiento, dentro de las posibilidades habitacionales de cada familia.

-Promover la educación familiar de pacientes de riesgo y estimular la consulta precoz ante los primeros síntomas de la enfermedad.

-Priorizar la atención de este grupo de pacientes en la demanda espontánea (para disminuir el contacto con otros niños que pueden estar atravesando enfermedades respiratorias).

Así también, instó a toda la población a vacunarse contra la influenza y contra el COVID-19, cuando sea posible según la franja etaria. “De esta manera estaremos colaborando con la disminución de cuadros e infecciones graves”, finalizó.