En las condiciones especiales del contrato se establece el plazo de un día hábil al proveedor para rectificar o reemplazar los bienes rechazados. En este caso las camas compradas a precio de oro, como las mascarillas y los trajes de bioseguridad que rebotaron por baja calidad.
Ayer, el Ministerio de Salud rechazó una primera partida de 15 camas hospitalarias, de las 50 que debe recibir, por no cumplir con las especificaciones técnicas.
Cabe remarcar que esta licitación es de G. 85.220 millones y las firmas adjudicadas son Eurotec SA e Insumos Médicos SA, firmas representadas por los hermanos Patricia Ferreira y Marcelo Ferreira.
En el acta de rechazo del ministerio constan los ítems del pliego de bases y condiciones que el proveedor no cumplió, por ejemplo, que las camas deben tener 3 funciones mínimas. El documento también evidencia que ni el forro del colchón ni la altura de la cama cumplen con el requerimiento.
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La firma proveedora de las camas es Insumos Médicos SA, representada por Patricia Ferreira Pascottini, adjudicada con un contrato por valor de G. 47.952 millones en el marco de la emergencia sanitaria por el COVID-19.
Según el contrato con Salud, Insumos Médicos SA debe entregar unas 50 camas hospitalarias que ofertó cada una a G. 4.250.000, totalizando la suma de G. 212.500.000.
Un despacho de importación a nombre de la empresa en cuestión muestra que cada cama tuvo un precio promedio de G. 670.571. En el detalle de importación aparecen 400 camas hospitalarias por un valor imponible de G. 268.228.731.
Es así que resulta que la cartera de Salud compró a G. 3.579.429 más caro cada cama, un precio que multiplicado por las 50 unidades da una utilidad total de G. 178.971.450 al proveedor.
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En las condiciones especiales del acuerdo también se fija un porcentaje del 1% como valor de las multas por cada día de atraso en la entrega de los bienes.
El viceministro de Salud, Julio Rolón, dijo que, si el proveedor no subsana el inconveniente, empieza un proceso que podría derivar en la rescisión de contrato.
“Si eso no se corrige, se solicita a través de nota que se entreguen esos insumos y, a partir de ahí empieza a correr una multa y, si no entregan, viene un proceso de rescisión de contrato. Al mismo tiempo ya se comunica a la empresa aseguradora (…)”, expresó a radio Universo 970 y recordó que en el contrato se estipuló 20% de adelanto para la contratista, con una póliza de caución del 100% de ese monto.
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Tabla de salvación
El viceministro Rolón informó además que ayer terminaron de analizar ofertas y empezaron el proceso de adjudicación del llamado N° 39, en el que se contempla la compra de 20 millones de mascarillas y otros equipos de bioseguridad.
Con esta nueva licitación quieren resolver la falta de insumos a causa de la tremenda falla en la provisión por parte de Insumos Médicos SA, proveedor que vendió las camas de oro, los barbijos, etc.
“En esta semana vamos a tener el llamado totalmente adjudicado y, hay empresas que ya tienen los bienes para adelantarnos y, obviamente si cumplen las especificaciones serán aceptados”, indicó al ser consultado sobre el reclamo de los funcionarios de salud por la falta de insumos médicos.