El nuevo titular de Cañas Paraguayas S.A., José Ocampos, destacó la importancia histórica de la industria cañera paraguaya, pero lamentó que la institución haya sido muy maltratada por la clase política en los últimos años. En ese sentido, aseguró que Capasa es un gigante maltratado por la clase política y lo calificó como “un Ferrari golpeado, maltratado”.

Durante una entrevista concedida a 800 am señaló que Capasa es una industria que tiene todo para salir adelante, para elevar al podio que le corresponde a la gran industria cañera. Indicó que han encontrado la institución con pérdidas de casi 50.000 millones de guaraníes.

Aseguró que existen las condiciones para sacar adelante a la industria cañera que mantiene a importantes zonas del país, así como departamentos completos como Guairá, Caazapá, que son netamente productores de caña dulce. Recordó que hoy en día es una empresa de modalidad privada, pero donde el mayor accionista es el Estado Paraguayo.

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Lamentablemente, la situación actual de la caña paraguaya, la Aristócrata, ha desaparecido prácticamente de las góndolas de los grandes supermercados o de los Dutty Free, indicó. “Hay prácticamente una modesta distribución y hemos encontrado a Capasa con terribles pérdidas, de unos 50.000 millones de guaraníes, por deudas con la Subsecretaría de Estado de Tributación, deudas con entes financieros y otras empresas. Nuestro deber no es solamente levantar este gigante maltratado, tenemos que limpiar sus heridas, bañarlo, darle cariño y cuidarlo. Capasa sigue siendo un Ferrari que ha sido maltratado por la clase política”, comentó.

Indicó que hoy en día se hace la ruta de la caña, pero al interior del país. Sin embargo, eso mismo se puede potenciar en la sede ubicada en el microcentro de Asunción, teniendo en cuenta que toda la industria cañera está ubicada en más de una hectárea, en pleno microcentro de Asunción, con unas piezas de museos de mucho valor y en un edificio que el año que viene cumplirá 120 años.

“Vamos a habilitar el turismo de la ruta de la caña aquí en Asunción y relanzar nuestros productos al mercado. En la línea popular se tiene la marca Parapití, y en la línea señorial, que es nuestro whisky, está Aristócrata, Etiqueta Negra. Pero también hay productos más añejados como la Etiqueta Azul y Etiqueta Roja, que son de 10 y 12 años”, remarcó.

En ese sentido, remarcó que la industria cañera de Capasa no es deficitaria porque su marca o sus productos sean malos o porque no sean viables, sino “por el maltrato de la clase política, por toda la corrupción que ha pasado por ahí”, aseguró.

“Señalo solo un número: 35.000 millones de guaraníes al año, produce estando maltratada esta empresa y su nivel de producción es noble, está bien conceptuado en el país, en la región y en el mundo. Hay demanda extraordinaria y un personal técnico extraordinario que trabaja. Estoy seguro de que con una buena administración y con cariño, vamos a levantar a esa empresa a mediano plazo, dejando un camino a largo plazo para seguir creciendo”, concluyó.

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