Desde febrero pasado que el exministro del interior, Arnaldo Giuzzio, destituido por aparentes vínculos con el narcotráfico, se encuentra en el ojo de la tormenta aunque, aparentemente, hay algunos que hacen “la vista gorda”. Lejos de pensar que las investigaciones, tres meses después de haber saltado tantas denuncias, estarían en instancias avanzadas, hasta la fecha no existe un solo progreso dentro del marco investigativo.
Hay que recordar que uno de los primeros hechos llamativos que ya empezaron a asociar a Giuzzio con narcotraficantes y empresas de dudoso origen fue cuando el propio exministro admitió que usó un vehículo de la empresa Ombu SA para vacacionar en Brasil a finales de diciembre del 2021. Esta empresa pertenece al presunto narco Marcus Vinicius y se encarga de importar vehículos de alta gama, los blinda y luego los vende.
Marcus Vinicius Espíndola Marqués de Padua es considerado uno de los hombres más buscados en Brasil por lavado de dinero, tráfico de drogas y tráfico de activos. Giuzzio reconoció que alquiló el vehículo de la empresa del supuesto narco capturado en Brasil en el marco de la operación Turf; desmintió a la ministra de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), Zully Rolón, quien dijo que Marcus Vinicius era el objetivo principal del operativo y enfatizó que desconocía sus antecedentes; esto, a pesar de que el mismo era investigado hace meses en la institución que él mismo encabezó.
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Otra camioneta narco
El 1 de marzo pasado, el exministro Giuzzio asistió a la sede del Ministerio Público para prestar declaración respecto a su denuncia contra el expresidente Horacio Cartes; sin embargo, valiéndose de chicanas se abstuvo de declarar y recusó a los fiscales Osmar Legal y Liliana Alcaraz.
A esa audiencia Arnaldo Giuzzio llegó a bordo de una camioneta Chevrolet S10 color blanco con chapa CGA 016, que la Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados y Comisados (Senabico) había incautado en un operativo antidroga y luego, como cooperación interinstitucional, cedió al Ministerio del Interior.
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Giuzzio no tenía forma de justificar el uso de ese móvil, ya que ni siquiera se desempeñaba más como titular de ese ministerio y, pese a eso, estaba haciendo uso de un bien del Estado. El móvil aparecía a nombre del supuesto narcotraficante brasileño Celso Eni Mendes dos Santos, detenido el 6 de julio del 2021 en Pedro Juan Caballero, en el operativo Reflexo del Ministerio Público y de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
En un operativo en julio del 2021, en el que Mendes dos Santos fue detenido, se incautaron de varios bienes, entre ellos, la camioneta de color blanco. Dicho rodado pasó a ser administrado por la Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados o Comisados (Senabico), que a su vez entregó al Ministerio del Interior para su uso provisional, según indicó el asesor jurídico de la institución.
Solicitaron informes
Esta situación motivó a los diputados a aprobar un pedido de informe a la Secretaría Nacional de Bienes Decomisados (Senabico) sobre bienes incautados, cuentas bancarias, convenios de cooperación interinstitucional referentes al uso provisional de bienes, entrega de vehículos a organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, mecanismos de control del buen uso de estos bienes, y las denuncias realizadas por la institución sobre destrucción, daño, inutilización o sustracción de los mismos.
Por su parte, el director Jurídico de la Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados y Comisados (Senabico), Gonzalo García también había anunciado que se solicitaron informes al Ministerio del Interior tras tomar conocimiento de la situación del exministro Arnaldo Giuzzio y la utilización irregular de una camioneta.
Desde la secretaría general de Senabico manifestaron que, a la par de ese pedido de informes al Ministerio del Interior, también hubo una petición de devolución inmediata de la camioneta, hecho que sí se materializó al instante y el móvil se encuentra en el depósito de la institución.