Si bien aún falta un poco más de un año para que llegue la fecha de la renegociación del Tratado de Itaipú, que llevarán a cabo Paraguay y Brasil en agosto del 2023, el tema ya está instalado en los debates a nivel país.

De acuerdo a las miradas de los técnicos y entendidos en la materia, son varias opciones que podrían darse durante esa negociación, algunas beneficiosas para el Paraguay y otras para el Brasil, aunque muchos coinciden en que nuestro país hasta el momento mostró una tibia reacción a las intenciones claras del Brasil, que sería disminuir el precio de la energía una vez que la deuda de la entidad binacional sea finiquitada.

Ante esto, desde el lunes La Nación presenta a sus lectores una serie de artículos que describen la visión técnica, política y diplomática a través de entrevistas a los entendidos en la materia y que en su momento fueron parte del sector energético o cuyos cargos o puestos estuvieron vinculados a ese sector.

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Lea el primer material: Las claves de Itaipú: soberanía y trato justo para Paraguay están en juego

En esta tercera presentación, nuestro medio ofrece una entrevista exclusiva con el ingeniero Fabián Cáceres, exgerente técnico de la Administración Nacional de Electricidad (Ande), quien relata su postura y opinión con relación a los avances actuales y los posibles escenarios que podrían darse al transcurrir los meses.

En ese sentido, Cáceres manifestó que con miras al 2023 Brasil y Paraguay deberían plantear la revisión completa del Tratado de la Itaipú Binacional y no limitarse solo a la renegociación del Anexo C.

Respecto al análisis en detalle de lo que implica el Anexo C desde una mirada técnica, política y diplomática, Cáceres mencionó que es necesario que ambos países, principalmente Paraguay, avancen de una manera “agresiva” para lograr un trato justo durante el proceso de las negociaciones.

“Si se entra en la revisión del Anexo C, creo que se debe entrar a revisar el tratado completo, el Anexo A, la parte administrativa, ya que se debe tener en cuenta que hasta hoy en día ciertas direcciones estratégicas la administra Itaipú, el Anexo B, debido a que existe una obra que nunca nos pusimos de acuerdo, la cual es referente a la esclusa de navegación”, sugirió.

Lea el segundo material: Mantener la tarifa es muy buena idea, pero el Gobierno tomó real interés muy tarde

Otro punto crucial, la libre comercialización de energía

Al respecto, el ingeniero agregó que otro punto crucial dentro del Tratado de la Itaipú es que se permita al Paraguay la libre comercialización de su energía con el mercado “que nosotros queramos”, ya que en este momento el Brasil hace uso de la energía que el Paraguay no utiliza, o en todo caso avanzar ya de una forma agresiva y que esa energía que nos corresponde la utilicemos en nuestro mercado de alguna u otra forma.

Expresó que para el cumplimiento de su planteamiento el gobierno paraguayo necesitará un “apoyo fuerte” por parte de la ciudadanía, así como del Parlamento, teniendo en cuenta que será necesaria la creación, la aprobación y la adecuación de varias leyes para agilizar la comercialización y que la Administración Nacional de Electricidad (Ande) pueda vender dicha energía dentro del mercado paraguayo de manera rápida y transparente.

“Sobre todo que pueda beneficiar al Paraguay con ingresos importantes, teniendo en cuenta que nuestro horizonte de disponibilidad de esa energía a lo sumo no será más de 15 años”, manifestó.

El ingeniero Fabián Cáceres aseveró que en torno a la revisión el vecino país tiene básicamente dos intereses; disponer de la energía del Paraguay y bajar el costo de la tarifa de Itaipú, mientras que del lado paraguayo los intereses se centran en poder lograr mayores ingresos por las regalías, la venta libre de la energía no utilizada, que la binacional financie obras de infraestructura y finalmente generar el fortalecimiento de la Ande.

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Costo de la tarifa de la Itaipú

Por otra parte, sobre la discusión del costo de la tarifa de la binacional, lamentó que Paraguay aún no cuente con una “señal” de que Brasil responda la solicitud del gobierno del presidente Mario Abdo Benítez, la cual se centra en mantener el precio de la misma, planteamiento contrario a la intención del gobierno de Jair Bolsonaro.

“Hasta hoy en día no tenemos ninguna señal de que Brasil atienda el pedido, es más, ya nos hemos enterado de que la energía de la Itaipú Binacional en el Brasil se está comercializando con una disminución del 12% con respecto al año pasado, ellos con una tarifa provisoria prácticamente ya están confirmando la reducción del precio de la tarifa”, expresó.

Ante la falta de una respuesta, Cáceres señaló que el Gobierno, los representantes de las altas partes del Paraguay deben tomar una decisión final y emplazar al Brasil y no continuar esperando una decisión final.

“Si el Brasil logra su objetivo de bajar la tarifa, que es lo que le interesa, sin negociar con el Paraguay, en el año 2023 ese mismo hecho se puede dar. Es importante que le demos la debida atención porque está todo el país detrás de esta negociación y, por otro lado, con base en eso, si no existe una respuesta, tomar ya una decisión para la revisión de una negociación en el 2023″, comentó.

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No obstante, mencionó que es necesario saber interpretar las señales del gobierno brasileño, ya que la empresa reguladora del sector eléctrico informó que la tarifa de Itaipú que se comercializará en el vecino país tendrá una disminución del 12% con respecto al año 2021. Agregó que las autoridades del Brasil solo indican de manera provisoria su decisión final hasta tanto el Consejo de Itaipú lo defina.

Definición del costo de la tarifa no debe pasar el primer semestre

El ingeniero recordó también que el próximo mes de octubre Brasil realizará sus elecciones generales teniendo nuevamente a Bolsonaro como candidato y una de sus propuestas fuertes se centra en disminuir el costo de la tarifa, mientras que en el Paraguay se estarán desarrollando los comicios internos con miras a las elecciones generales del 2023.

“El ambiente político estará bastante enardecido, bastante contaminado, por eso yo digo que en este primer semestre hay que definir y el Paraguay debe tener una línea fuerte y firme para intentar obtener beneficios sobre la considerada mayor obra de infraestructura de nuestro país en los últimos 50 años. Se debe lograr que la ciudadanía y los partidos políticos estén todos juntos, ya que Brasil nos respetará en la medida en que todo el Paraguay esté unido en esta causa”, dijo.

Lamentó la reacción tardía del Gobierno en plantear una posición ante la intención de Brasil en bajar el precio de la tarifa. Cáceres incluso colocó como ejemplo la creación de comisiones que finalmente no llegaron a “sacar una línea” conclusiva sobre la postura paraguaya.

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Añadió que si Brasil logra este primer paso (de reducir el costo de la tarifa), será muy probable que ellos apunten a esto para el 2023, que la tarifa vaya al menor costo posible, que los gastos sociales mantengan los niveles históricos o que a la vez disminuya, de tal manera que la tarifa sea la más barata posible y que de esa forma cuenten con una energía barata para meter dentro de su mercado.

“Muy tarde llegamos con la propuesta, se tuvo que haber hecho con tiempo suficiente para poder conversar, hablar sobre los puntos que nos unen, de la historia, hablar de la vez que el Paraguay le ayudó al Brasil, sobre los lazos de amistad y por ahí tratar de justificar. Fallamos acá, no aprendimos la lección y actuamos por reacción, pero soy una persona optimista y aún existe tiempo, entonces tenemos que plantar la bandera y cerrar este capítulo”, indicó.

Lea mañana la entrevista con James Spalding, exdirector paraguayo de la Itaipú Binacional.

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