Las encías guardan los secretos de una son­risa que va más allá de la estética. Estos tejidos sua­ves y delicados no solo pro­tegen los dientes del daño, sino que también brindan algunas pistas sobre lo que sucede en el interior, por eso su color es información valiosa para la salud bucal y el bienestar general.

Desde un rosa saludable hasta un rojo alarmante o incluso un azul sutil, los tonos de las encías contienen pistas esenciales que nunca deben pasarse por alto. La principal razón por la que las encías pueden enfermar es debido a la acumulación de bacterias sobre los dien­tes, que se conoce como placa bacteriana.

Cuando la placa bacteriana empieza a depositarse en el espacio que existe entre los dientes y las encías, conocido como surco gingival, provoca sangrado e inflamación; y si no se toman medidas, las pro­pias toxinas de las bacterias siguen su actividad, gene­rando enfermedades perio­dontales que, cuando se pro­fundizan, pueden terminar con la salud del hueso de la boca, impulsando la caída de alguna pieza dental.

1. Encías rosas. Las encías sanas tienen un tono rosado distintivo que significa una buena salud bucal, por lo que no sangran durante el cepillado o el uso del hilo dental. Este color saluda­ble indica un suministro de san­gre adecuado, una oxigenación correcta y falta de inflamación.

2. Encías pálidas o blancas. Estos tonos pueden ser un indicio de anemia u otros pro­blemas de salud subyacentes. La anemia es una condición en la que el cuerpo carece de suficientes glóbulos rojos, lo que lleva a niveles reducidos de oxígeno. Si notas palidez persistente en tus encías, es vital consultar con un odon­tólogo y un profesional de la salud para diagnosticar la causa raíz e iniciar el trata­miento adecuado.

3. Encías rojas o inflamadas. Se asocian con la gingivitis, la etapa temprana de la enfer­medad de las encías. La mala higiene oral es la principal culpable de esta afección, lo que permite que las bacterias se acumulen y formen placa, que eventualmente conduce a la inflamación. Si no se trata, la gingivitis puede progresar a una enfermedad periodontal más grave, lo que puede gene­rar la pérdida de dientes.

4. Encías de color rojo oscuro o azulado. Las encías que tie­nen un color rojo oscuro o incluso azulado pueden indi­car una oxigenación inade­cuada o problemas de cir­culación. Esta decoloración puede estar relacionada con problemas cardiovasculares, enfermedades respiratorias u otras afecciones médicas. Si tienes este tono en tus encías, es necesario buscar atención médica inmediata para iden­tificar y abordar cualquier posible problema de salud.

5. Manchas marrones o negras en las encías. Podrían atribuirse a la melanina, que es un pigmento responsa­ble de la coloración de nues­tra piel. Esta condición suele ser inofensiva y común entre las personas con tonos de piel más oscuros, sin embargo, si notas irregularidades o cam­bios en la apariencia de estas manchas, es recomendable que un profesional dental las examine.