Los ministros del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) encargados del análisis del dictamen de la comisión, rechazaron la participación de las oenegés Decidamos y Alma Cívica en carácter de observadores electorales del próximo 30 de abril.
En contacto con La Nación/Nación Media, Christian Ruiz Díaz, director de Financiamiento político del TSJE informó que los ministros tomaron dicha decisión puesto que ambas oenegés no se ajustan a los lineamientos establecidos en el reglamento del ente.
Respecto a Decidamos dijo que le solicitaron el plan de trabajo a desarrollar. “Nos comunicaron que también quieren realizar un conteo rápido a través de muestras”, explicó. Por lo que el TSJE considera que una misión de observación no tiene la facultad de hacer conteos rápidos, sondeos de opinión, ni boca de urna.
El rechazo a Alma Cívica obedece a que su consejo directivo está integrado por un candidato a senador, en este caso, Bruno Defelippe. “Eso hace que se ponga en riesgo la objetividad e imparcialidad que debe tener una misión de observación”, expresó el director de Financiamiento Político en contacto con La Nación.
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Ruiz Díaz comentó que los ministros aceptaron el dictamen de la Comisión de Elecciones del TJSE, en contra de las organizaciones no gubernamentales con los argumentos mencionados. De esta manera, tanto Decidamos como Alma Cívica no podrán observar las elecciones por su falta de objetividad.
Asimismo, el director del TSJE comentó que este año no habrá una misión de observación electoral nacional, puesto que las elecciones contarán con al menos 500 observadores internacionales, distribuidos a nivel país. En otra entrevista mencionó, “tenemos una misión avanzada de la Unión Europea, que ya está trabajando desde hace un buen tiempo en el país y se queda hasta el 15 de mayo”.
Los observadores electorales solo pueden tomar nota y luego proporcionar una evaluación profesional, independiente e imparcial del proceso electoral. Sin embargo, no pueden hacer proselitismo ni intervenir en la mesa receptora de votos ni mucho menos inmiscuirse en actividades exclusivas de los agentes electorales.
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