El presidente de la Unión Tabacalera del Paraguay y de la Tabacalera del Este (Tabesa), José Ortiz, manifestó su rechazo al protocolo de eliminación de comercio ilícito de productos de tabaco, señalando que solo fortalecerá a la “competencia desleal”. Asimismo, indicó que la mayoría de los aspectos que señala este proyecto de ley que está siendo analizado en el Senado ya existe y está legislado.

En ese sentido, indicó que el tema de trazabilidad, en la medida que es posible ya está legislada. Mencionó que el proyecto de ley en estudio, propone ahora métodos de trazabilidad que son absolutamente inviables tecnológicamente, como, por ejemplo, definir quién es el consumidor final cuando se trata de un producto masivo y no es viable ni para la industria y mucho menos para el Estado aplicar.

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“En este tipo de protocolos siempre hay intenciones o va concatenado con artilugios que llevan a una competencia desleal. Este proyecto habla de una lucha contra el ilícito del tabaco. Pero el ilícito del tabaco no forma parte del protocolo, solo alcanza a las empresas que cumplimos las leyes”, expresó el empresario en comunicación con la Radio 1080 AM.

En ese sentido, el representante del sector tabacalero aboga por el rechazo del proyecto de ley que fue remitido por el Poder Ejecutivo y está siendo analizado en la Cámara de Senadores. Resaltando que cuanto más exigencia se pone al comercio lícito del tabaco y se vuelven los impuestos confiscatorios, lo que se logra es fortalecer aún más la evasión tributaria y el comercio ilícito, que es lo que por el contrario se busca.

José Ortiz, presidente de la Unión Tabacalera del Paraguay, sostiene que todo el ilícito del tabaco, se fortalece, cuando más exigencia le pones al comercio lícito. Foto: Nadia Monges.

“Todo el ilícito del tabaco se fortalece, cuando más exigencia le pones al comercio lícito. Si pones impuestos confiscatorios, cada vez que sube el impuesto al tabaco, las fábricas clandestinas, y los falsificadores están felices, porque las industrias legales que pagamos impuestos, tenemos más dificultades y cada vez nos cuesta más vender y tenemos en contra la competencia desleal la falsificación y evasión impositiva”, comentó.

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En ese sentido, puso como ejemplo la situación que se está viendo en Brasil, donde cada semana se está detectando fábricas clandestinas de cigarrillo, porque en el vecino país pululan debido a que sus impuestos son confiscatorios. Mencionó que tiene informaciones que el gobierno del Brasil incluso ahora está evaluando bajar sus impuesto, lo cual considera la medida más acertada, porque los impuestos confiscatorios solo incitan a la competencia desleal, insistió.

Fomenta expulsión del comercio legal

En representación de la Unión de Tabacaleros del Paraguay, Ortiz abogó por el rechazo del proyecto de ley que está en estudio en la Cámara Alta, en primer lugar porque en Paraguay ya existe una Ley de Trazabilidad, muchas cosas ya están en práctica y otras están en proceso de reglamentación.

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“Este proyecto no permite testar ningún artículo, si permitía testar algunos artículos, tal vez iba a ser un protocolo llevadero. Pero ellos te dicen, o aceptas como es, o no aceptas. O sea es una imposición más drástica. Entonces, dónde entra la competencia desleal, las multinacionales tienen sus dedos dentro de estos protocolos, porque están poniendo muchas trabas para exportar, a zonas francas. Ponen, por ejemplo, que no se podrá exportar en contenedores consolidados, se están metiendo en la logística legal. Mientras que la logística ilegal seguirá corriendo normalmente”, indicó.

Al respecto, señaló que entonces el gran negocio va ser tener una fábrica ilegal de cigarrillos, porque con esas exigencias están expulsando del negocio formal, porque se vuelven inviable. Porque no se podrá exportar a zonas francas y los dutty free. Esa es la parte que un legislador, que no está en el negocio, difícilmente va conocer. “Por eso, yo tengo mis razones, porque con este tipo de proyecto nos expulsa del comercio lícito. Esta realmente es la ley de promoción y fomento del comercio ilícito, debería llamarse esta ley, cuando uno es una persona entendida en el comercio exterior”, acotó.

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