Durante el último fin de semana las tormentas registradas en diferentes puntos del país ocasionaron grandes destrozos a raíz de los fuertes vientos, la caída de granizos y las inundaciones, cientos de familias debieron ser evacuadas, ya que sus casas se vieron gravemente afectadas.
En este sentido, el titular de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), Arsenio Zárate, en conversación con el programa “Así son las cosas”, emitido por Universo 970 AM/Nación Media, destacó que son ocho departamentos los más afectados; Alto Paraná, Caaguazú, Cordillera, San Pedro, Concepción, Guairá, Itapúa y Misiones con un total de 29 municipios que están siendo asistidos.
“Hasta el momento son 5.000 familias las que tenemos registradas, pero seguimos relevando datos y esto va aumentando conforme llegamos a las localidades afectadas y vemos el estado en el que quedaron las casas”, subrayó el ministro de la SEN.
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Zárate precisó que la SEN se encuentra trabajando de manera coordinada con las gobernaciones y los municipios, además de recibir la ayuda extra de las fuerzas armadas, que ha prestado varios camiones y recursos humanos para llegar hasta las zonas afectadas de manera más rápida.
“Nosotros lo que entregamos ahora como parte de la asistencia son chapas, para que las familias puedan reparar sus techos de manera provisoria y puedan tener un lugar donde resguardarse, teniendo en cuenta que la inestabilidad climática continúa y la mayoría de las viviendas afectadas son precarias”, subrayó el titular de la SEN al tiempo de comentar que desde la institución se encuentran trabajando ya en estrategias de contingencias ante próximos hechos similares porque se esperan varios fenómenos climatológicos severos.
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Asciende a 100 el número de fallecidos en Brasil, suspenden rescates por nuevas lluvias
El número de muertes por las históricas inundaciones en el sur de Brasil alcanzó este miércoles el centenar, mientras las operaciones de rescate en la castigada capital de Porto Alegre fueron suspendidas por nuevas lluvias.
Según Defensa Civil, al menos 100 personas fallecieron, 372 resultaron heridas y 128 están desaparecidas por las inundaciones provocadas por desbordes de ríos tras las lluvias torrenciales de la última semana en el estado do Rio Grande do Sul.
En más de 400 municipios afectados, más de 160.000 personas fueron evacuadas de sus viviendas por este desastre climático, cuya violencia expertos y el gobierno brasileño vinculan al cambio climático. El río Guaíba, desbordado sobre Porto Alegre, se había rebajado el miércoles a 5,14 metros, pero la situación aún es inestable.
Voluntarios con lanchas y jetskis comenzaron la jornada buscando abrirse camino entre las calles inundadas para evacuar a quienes aún están atrapados en sus casas o simplemente no quisieron dejarlas por temor a saqueos.
Pero cuando el agua apenas bajaba en algunas zonas de Porto Alegre y su zona metropolitana, la lluvia volvió a caer, lo que interrumpió las evacuaciones. La alcaldía pidió “que los barcos en operaciones de rescate suspendan temporalmente sus actividades”. Citó además “posibles descargas eléctricas y vientos superiores a 80 km/h en las próximas horas”, según publicó en X.
Las autoridades también insistían a los habitantes en que no regresaran a las zonas de riesgo y alertaban de la posibilidad de inestabilidad en los terrenos y de peligros para la salud. “Las aguas contaminadas pueden transmitir enfermedades”, dijo a periodistas Sabrina Ribas, portavoz de Defensa Civil.
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“Cada diez mil años”
Cerca del inundado estadio del Gremio de Porto Alegre, donde desde el sábado funciona un improvisado puerto de desembarque para evacuados, los voluntarios comenzaron a retirar sus embarcaciones con el inicio de las precipitaciones, constataron periodistas de la AFP.
El cielo cobró un color gris oscuro amenazante, y el viento comenzó a soplar con fuerza. Pero incluso con la zona bajo agua y a pesar del riesgo de crecida, muchos pobladores se niegan a dejar sus casas. Algunos podían verse en los techos de las humildes viviendas. Más de una semana después de que comenzaran las lluvias, sin corrientes que desplacen las aguas, el olor es nauseabundo en una ciudad que tiene zonas convertidas en verdaderos basurales.
En el sur del estado, las inundaciones deben alcanzar “graves proporciones” en los próximos días debido al “colosal” volumen de agua que cayó en el Guaíba y otros ríos que alimentan la Laguna de los Patos, con salida al Atlántico, alertó MetSul Meteorologia.
“El caudal récord equivale a (...) lo que podría esperarse en una recurrencia estimada una vez cada 10.000 años, por lo que la cantidad de agua que avanza por la Laguna de los Patos es extraordinaria y nunca antes vista”, señaló en una nota.
Las precipitaciones deben seguir, con “aguaceros” de viernes a domingo en la región de Porto Alegre, según el Instituto Nacional de Meteorología (Inmet). El gobierno del estado decretó el nivel de emergencia en cinco embalses, dos de ellos en “riesgo de ruptura inminente”.
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Cien mil casas dañadas o destruidas
Casi 100.000 viviendas quedaron dañadas o destruidas por la fuerza de la naturaleza. Los daños económicos superan los 4.600 millones de reales (908 millones de dólares), según una estimación de la Confederación Nacional de Municipios.
Tras el cierre por tiempo indeterminado del aeropuerto internacional, la base militar de Canoas recibirá vuelos comerciales para el transporte de donaciones y de pasajeros que retornan al estado, informó la fuerza aérea.
En una esquina del centro histórico de Porto Alegre, en una zona a salvo de las aguas, decenas de personas se ayudaban con un generador contratado por una farmacia para cargar sus celulares, una herramienta vital para contactar con familiares y amigos en medio del caos. “Esto es un universo paralelo”, resume la profesora universitaria Daniela da Silva, de 30 años.
La emergencia en Brasil coincide con la publicación de un informe este miércoles de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) que destaca un récord de peligros climáticos en Latinoamérica y el Caribe en 2023 producto del fenómeno de El Niño y los efectos del calentamiento global por influencia de la actividad humana.
Debido al calentamiento, los eventos extremos o raros “son cada vez más frecuentes y más extremos, y es de esperar que eso continúe” en Brasil, dice a la AFP José Marengo, coordinador de investigación del Centro Nacional de Monitoreo y Alertas de Desastres Naturales (Cemaden).
Fuente AFP
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Anuncian lluvias con sistema de tormentas para el miércoles y jueves
Este martes, desde la Dirección de Meteorología e Hidrología (DMH) emitieron una alerta especial sobre lluvias y tormentas que avanzan hacia el país. Este sistema de tiempo severo afectará a Asunción y 12 departamentos del territorio nacional durante la jornada de mañana miércoles y el jueves.
Según lo informado por la central meteorológica, desde la mañana del miércoles se esperan lluvias con tormentas eléctricas, acompañadas de vientos fuertes y la ocasional caída de granizos. “Las lluvias podrían acumularse entre 70 a 110 milímetros en algunos puntos del país”, detallaron en el informe.
Explicaron que los vientos soplarán de moderadas a fuertes y que llegaría o incluso superarían los 100 kilómetros por hora. “Las tormentas serían con alta frecuencia y no se destacaría la portabilidad de caída de granizos”, señalaron.
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Este sistema de tormenta afectaría al centro, sur y este de la Región Oriental, como también el centro y sur de la región Occidental. “Desde la mañana y hasta la tarde del miércoles, llegarían a Ñeembucú, Misiones, suroeste de Itapúa, sur de Paraguarí”, manifestaron.
En tanto que, las lluvias avanzarían hacia Asunción, Central, centro y oeste de Itapúa; Caazapá, centro y norte de Paraguarí, Guairá; centro y sur de Presidente Hayes recién desde la tarde del miércoles 8 y se extenderá hasta la mañana del jueves.
“También afectaran a Cordillera; centro y oeste Caaguazú; este de Itapúa, sur de Alto Paraná; sur y oeste de San Pedro, el sistema de tormentas llegaría también desde la tarde del miércoles 8, pero seguirán hasta la tarde del jueves”, puntualizaron.
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Asisten a cerca de 3 mil familias damnificadas
En medio de las inundaciones por las incesantes precipitaciones en el Departamento de Ñeembucú, el Gobierno Central en forma conjunta con la gobernación departamental hasta la fecha distribuyó cerca de 3.000 kits de alimentos de 25 kilos cada uno, brindando asistencia a 2.715 familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
El fin de semana la asistencia llegó a la comunidad de Potrero González, distrito de Tacuaras, donde unas 28 familias recibieron ayuda inmediata, incluyendo la entrega de una canoa a remo para uso comunitario, facilitando así el acceso a sus hogares en medio de las inundaciones.
El despliegue de asistencia se extendió a lo largo y ancho del departamento, abarcando comunidades en Pilar, Tacuaras, Guazucuá y San Juan de Ñeembucú. En Pilar, se brindó ayuda a 510 familias, en Tacuaras a 649 familias, en Guazucuá a 575 familias, y en San Juan de Ñeembucú a 961 familias. Además, se prestó atención específica a grupos vulnerables como la comisión de chatarreros y la comisión de yuyeros ambulantes.
Los datos preliminares de la Secretaría Departamental de Gestión y Riesgos resaltan la magnitud de las lluvias registradas en el departamento de Ñeembucú en los primeros cuatro meses del año. Los distritos como Guazucuá y Tacuaras experimentaron niveles alarmantes de precipitación, alcanzando el 76 % y el 60 %, respectivamente, de la media anual de lluvias. En las últimas lluvias caídas la semana pasada superaron los 190 milímetros.
En Pilar, la situación no es menos preocupante, con el registro del 45,3 % de la media anual en tan solo cuatro meses.
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Unas 150 familias afectadas por crecidas
El intendente de Pilar, Fernando Ramírez, mencionó que la ciudad ya se encuentra hace más de 20 días en situación de inundación, que afecta a más de 150 familias de la zona de Valle Apu’a. El jefe comunal indicó que están trabajando de manera coordinada entre el Gobierno nacional, departamental y municipal para atender las familias.
“Hace más de 20 días estamos atravesando por una situación bastante complicada, concretamente en el distrito de Pilar identificamos más de 150 familias que hace más de 20 días han sido afectadas por la lluvia, por zonas inundadas”, dijo en entrevista al programa “Arriba hoy”, de GEN y Universo 970 AM/Nación Media.
Ramírez detalló que tanto el Gobierno, la gobernación y la municipalidad están trabajando en varios frentes, por un lado, el desagüe con maquinarias proveído por las tres administraciones. “Un esfuerzo articulado de desagotar las aguas en la medida de las posibilidades con maquinarias de gran porte, maquinarias gestionadas por el Gobierno municipal, departamental, nacional, las binacionales también. Por ese tiempo lo hicimos y continuamos haciendo”, afirmó.
Por otro lado, se está trabajando en la asistencia humanitaria que consiste en la entrega de alimentos a las familias afectadas. “En el caso concreto del distrito de Pilar, prácticamente una vez que se ha observado el impacto de la naturaleza en la zona, específicamente de Valle Apu’a, en menos de 24 horas la Secretaría de Emergencia Nacional, el Gobierno nacional ya se hizo presente”, apuntó.
DEFENSA COSTERA
Por otra parte, el intendente se refirió sobre la obra de infraestructura y la defensa costera que servirá para paliar las inundaciones. En estos momentos el Gobierno está trabajando en el financiamiento de estas obras, específicamente para la fase b y la fase c. Estas fases se estarían iniciando ya en el segundo semestre de este año y el tiempo estimado para la conclusión de la misma sería de dos años.
“Según el pliego de bases y condiciones, la fase b, que es una fase más complicada del sistema de alcantarillado sanitario, los desagües tienen un plazo de hasta 24 meses; y la fase c tiene un año de plazo para la ejecución. Estas fases se pueden llevar adelante al mismo tiempo, pueden iniciar al mismo tiempo porque son obras complementarias, y estimamos que una vez iniciada la obra en dos años pueda concluirse”, sentenció.