Ciudad del Este. Agencia Regional.
A las 1:00 de hoy se produjo un asalto a mano armada en el interior de un templo masónico, en que fueron víctimas cinco personas que se encontraban compartiendo en el sitio hasta esa hora. Ocurrió en el local ubicado en el km 13,5 del barrio Santa Mónica, de Minga Guazú, a unos 200 metros de la ruta PY02. Es lo que reportó la Subcomisaría 14, del km 14, Acaray. El km 13,5 es el límite entre Ciudad del Este y Minga Guazú.
Fueron víctimas el encargado Julio Sánchez Ávalos (50), además de otras cuatro personas que se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas en el interior del templo, según el reporte. En el horario citado irrumpieron los hombres armados y los intimaron a entregar el dinero que tenían. Una de las personas recibió en la cabeza un golpe con la culata del arma de fuego.
Los hombres estuvieron con la cara cubierta, vestimentas oscuras y armas de fuego en mano. Despojaron de sus aparatos celulares a sus víctimas, además de dinero en efectivo que cada uno tenía en ese momento. De uno de ellos sacaron 700 dólares, de otro 300 mil guaraníes y de una tercera persona 5 mil guaraníes.
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Es lo que informó a La Nación/Nación Media, el comisario Sergio Sosa, jefe de la sede policial interviniente. Igualmente indicó que “los delincuentes exigieron primero la entrega de un monto de dinero elevado a las víctimas y al no obtener sus objetivos, procedieron a despojarlos a cada uno todo lo que tenían, además de sus aparatos celulares”. Luego del despojo, las cinco personas fueron encerradas en el sanitario del templo.
Las personas asaltadas se encontraban todavía en el local compartiendo, luego de haber participado de una reunión de los masones afiliados hasta las 00:00, aproximadamente, según lo indicado al personal policial que acudió al sitio, tras el pedido de auxilio. El comisario Sergio Sosa mencionó que unas 80 personas habrían participado de la reunión de masones realizada anoche en el citado templo.
Asimismo, refirió que los delincuentes habrían creído que en el lugar se realizó una especie de colecta que acostumbran hacer en ese tipo de reuniones y por eso exigieron montos más elevados a sus víctimas hasta que decidieron llevar lo que encontraron.
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