Ciudad de Caaguazú. Omar Jara.
El crimen ocurrido este jueves en la ciudad de Caaguazú se vuelve un caso doloroso en extremo a partir de la identificación de la víctima debido a que la misma se trataba de una niña de apenas 12 años de edad. La Policía Nacional, ante la imposibilidad de identificar a la víctima, la había creído una joven de entre 22 a 23 años.
Pero todo eso se desvirtuó cuando al final a través de intensas averiguaciones de la misma Policía se la pudo identificar y dar la penosa información de que la víctima se trataba de una menor de apenas 12 años de edad, con iniciales A.B.G. cuyo cuerpo sin vida fue hallado en el barrio Bernardino Caballero de Caaguazú, en un predio baldío ubicado al costado de un cementerio y presentaba signos de tortura y abuso sexual.
Investigadores policiales lograron ubicar a una mujer que podría tratar de identificarla y que accedió a acudir a la morgue donde estaba depositado el cuerpo de la víctima. La misma logró reconocerla y dijo que era su nieta. Según datos, los padres de la menor habrían fallecido hace unos años atrás, y ella habría caído en problemas de adicción.
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La niña quedó al cuidado de su abuela y una tía, en la comunidad del Pueblo de Dios del distrito de Repatriación. La menor de edad salió de la casa y desde el mes de diciembre del año pasado tenía orden de búsqueda y localización.
Según datos proveídos por el oficial David Verón, del departamento de Investigaciones, unos nueve meses atrás, ya se recibió una denuncia sobre un supuesto hecho de abuso sexual en niños en el Pueblo de Dios (la víctima habría sido la misma niña hoy fallecida) en la Unidad Especializada de la Fiscalía zonal de Caaguazú, donde se habría proveído los datos del supuesto autor de ese hecho, en contra del cual se dio una orden de captura, pero no pudo ser detenido.