Tras la presentación del proyecto ante la Junta Municipal de Asunción y la Cámara de Diputados, representantes de MuCi (Museo de Ciencias), impulsado por la fundación estadounidense Peery, fue revelada la posible ubicación del museo y planetario: el Jardín Botánico. La iniciativa busca proteger este importante espacio de los asuncenos, revitalizándolo y convirtiéndolo en un circuito cultural.

MuCi, el museo de ciencias y planetario, cuya construcción será una donación de la Fundación Peery, con sede en California (Estados Unidos), será diseñado por el arquitecto paraguayo Luis Ayala, para ofrecer a la ciudadanía un espacio de experiencias inmersivas y cultivar la curiosidad de las personas de todas las edades. Las actividades del museo explorarán los nexos entre la ciencia y la tecnología, la ingeniería y las artes.

Para hacerlo realidad, es necesario un espacio acorde a las funciones finales del proyecto, por lo que los impulsores solicitan al Gobierno o la ciudad que, a través de un convenio de usufructo, provea el terreno donde construirlo. Tras varios meses de estudios rigurosos y un análisis de factibilidad, los representantes de MuCi exhibieron ante la Junta Municipal de Asunción su sugerencia: el Jardín Botánico.

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“Una de las razones por las que creemos que el Jardín Botánico sería el espacio ideal para MuCi es porque, al mismo tiempo, podríamos revitalizar y cuidar este importante pulmón verde de la ciudad. Para ello, invertiremos para que sea más seguro para los visitantes y que, a la vez, puedan participar de diferentes actividades. Es urgente y necesario instalar museos, sobre todo, en el Jardín Botánico, que es el símbolo de las ciencias naturales de Paraguay”, puntualizó Dave Peery, presidente de la Fundación Peery y cofundador de MuCi.

Agregó que “soñamos con un circuito atractivo que incluya un mariposario, un observatorio espacial, una zona de camping para los niños del interior, entre otros atractivos”, señaló. La intención es aportar a una revitalización del Botánico, convertirlo en un ícono para la recreación educativa y al aire libre de todas las personas del país, donde el museo sería solo uno de los pilares principales.

En ese sentido, Peery dijo: “Desarrollamos una nueva imagen para el Jardín Botánico, con señalética y mapas para invitar a la ciudadanía a imaginarnos juntos cómo podríamos mejorar ese lugar tan emblemático”.

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Por su parte, la Consultora Tecnoambiental SRL realiza un estudio de factibilidad, según lo explicó Guillermo de Barros, coordinador del proyecto: “El objetivo general del estudio es determinar la factibilidad socioambiental para la instalación del proyecto. Para ello, un equipo multidisciplinario, conformado por un especialista social, un biólogo, ingenieras ambientales y cadistas, se encuentran realizando relevamientos en el área de la fauna y flora específicas, además de entrevistas con actores locales y administrativos, estudios legales, entre otros”.

Según explicó el Arq. Luis Ayala, quien trabaja en Estados Unidos y posee vasta experiencia en proyectos institucionales de gran porte y alta complejidad, el diseño del edificio de MuCi se encuentra en etapa conceptual arquitectónica.

“Proponemos un edificio verde, con una terraza vegetada tipo parque, accesible para los usuarios y con muro de jardines verticales, plantados en macetas de tierra colorada que contendrán las especies de plantas nativas del Paraguay. La distribución del edificio se basa en la arquitectura vernacular paraguaya: kuláta jovái”, comentó Ayala, refiriéndose al estilo que contempla una galería central y habitaciones a los costados.

Siguiendo ese modelo, mencionó que la construcción tendrá un lobby techado pero abierto en sus extremos, alineado con los vientos predominantes de Asunción, de manera a que siempre se mantenga fresco, a pesar de nuestro clima predominantemente caluroso. “Este espacio es donde todo sucederá. Habrá una plaza de acceso, un café para el encuentro con los amigos, un anfiteatro para eventos y acceso al planetario. A los lados de este lobby estarán las exhibiciones del museo de ciencias, ya sean las permanentes o las de rotación”, puntualizó.

“La intención del edificio es integrarse con la naturaleza, no se talará ni un solo árbol, al contrario, se plantarán ejemplares en la terraza verde para proporcionar sombra a los usuarios. El proyecto contempla el respeto a la vegetación existente, manteniendo bastante distancia con esta para no afectar sus raíces. Planteamos que el área total de la construcción sea de unos 12.000 metros cuadrados, en varios niveles. Sin embargo, reduciremos la presencia del edificio, para lograr una escala más humana y adecuada a su entorno, al aprovechar la inclinación natural del terreno”, señaló.