La primera infancia, edad comprendida entre 0 y 8 años, es una oportunidad única de influir en el desarrollo de los niños, según estudios y evidencias científicas. A esta edad se la conoce como la edad de la “esponjita” porque en este periodo los preescolares todo lo absorben de manera fácil a través del juego y de estímulos específicos.

Sin embargo, no es muy aprovechada ni atendida en materia de políticas públicas que logren una verdadera estimulación a edad temprana para que el niño o la niña llegue a la escuela con más capacidades y habilidades que lo ayuden a absorber más y mejor el aprendizaje en aula.

Hippy es un programa educativo internacional de visitas domiciliarias semanales que busca empoderar a padres en su rol como primeros educadores de sus hijos en etapa preescolar. Foto: Gentileza.

Ante esta realidad, se instala en el país Hippy Paraguay, a través de 324 familias de cinco localidades (Luque, Chaco, Paraguarí, Cambyretá y Lambaré). Se trata de un programa educativo de apoyo a padres y madres para estimular la educación del niño en una temprana edad.

Hippy, por sus siglas en inglés Home Instruction for Parents of Preschool Youngsters, y traducido al español significa “Instrucción en el hogar para padres de niños en edad preescolar.”

Hippy empodera a padres y tutores

Es importante aclarar que el programa educativo no tiene contacto directo con los niños; es decir, no se trata de que un grupo de docentes o especialistas en primera infancia visite a los niños en sus casas para la estimulación. Más bien, el programa educativo internacional busca empoderar a padres, madres y tutores en su rol como primeros educadores de sus hijos en etapa preescolar.

“Hippy Paraguay es un programa educativo internacional de visitas domiciliarias semanales que busca empoderar a padres, madres o tutores que en muchos casos son abuelas y abuelos en su rol como primeros educadores de sus hijos en etapa preescolar”, explicó Laura Duarte, directora de Hippy Paraguay, en comunicación con La Nación.

Dijo además que “este programa abarca a niños de la edad de 2 a 5 años, pero este primer año o año 1 como le llamamos, solamente vamos a trabajar con niños de 2 y 5 años que también están participando a la par”.

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Los niños de 5 años formaron parte de un plan piloto desarrollado el año pasado con 30 familias que forman parte del Centro Educativo Arambé (CEA) de Luque, eran niños de 4 años cursando el jardín, hoy ya tienen 5 años y este año están desarrollando el currículo 5 (o cuadernillo para 5 años de Hippy) a la par del currículo escolar, explicó Duarte.

Hippy Paraguay es totalmente gratuito, llegó al país de la mano de la Fundación Ramón T. Cartes, fundador y principal benefactor de Arambé, en alianza con HC Innovations y la Universidad Hebrea de Jerusalén.

Estructura de Hippy Paraguay

El programa implementa una estructura para su desarrollo que consiste en la contratación de una coordinadora del programa en una localidad, se trata de una profesional del área de educación a quien se le entrega un cuadernillo de actividades que cubren cinco áreas del desarrollo del niño en etapa preescolar: alfabetización, lenguaje, motricidad, matemáticas y ciencias.

Las coordinadoras profesionales son las encargadas de entrenar a los tutores comunitarios, padres o madres, en este caso con hijos de 2 años, sobre cómo deben estimular a sus niños. Esto, a través del sistema rol-play que es el método de aprendizaje que utiliza Hippy.

Se trata de hacer un juego de roles; es decir, ponerse en el lugar de otra persona. Entonces, la coordinadora hace un rol-play con la tutora, donde ella es mamá y la tutora hija, y luego van invirtiendo los roles para practicar el cuadernillo.

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A través de este método, los tutores tienen la oportunidad de corregir cualquier error para que el currículo o cuadernillo llegue a casa y la tutora lleve a hacer la actividad con papá y mamá y que esta sea de la manera más profesional posible.

El cuadernillo está pensado para la edad evolutiva de cada niño; en este sentido, el plan de 2 años es uno, el plan para niños de 3 años es otro y hay otro plan para niños de 4 y 5 años.

Cada cuadernillo es totalmente distinto y está adaptado a la edad del desarrollo en el que se encuentra el niño beneficiado con el programa. El material es de muy fácil acceso para las familias, está pensado para aquellas personas o padres que no tienen estudios avanzados.

Es bastante accesible para cualquier persona que pueda leer y escribir. Allí se encuentra absolutamente todo lo que se debe hacer y decir, e incluso algunas preguntas que pudiera hacer el niño.

Los cuadernillos son entregados de manera gratuita tanto a tutores como a las familias. Cada tutor se reúne con su coordinadora los días lunes para entrenarse, lleva todos los materiales y tiene la misión de practicar el cuadernillo con su propio hijo durante toda una semana, todas las tutoras son mamás de niños de 2 años. El lunes siguiente se empieza a recorrer casa por casa para llevar educación de calidad a los padres.

“Es importante que las tutoras tengan una experiencia con su hijo primero y luego cuando van casa por casa puedan tener ese compartir de experiencias con los demás padres del programa. Lo lindo de Hippy es la horizontalidad que hay entre la tutora y la mamá porque va a ser muy distinto que yo directora o coordinadora se vaya casa por casa, ya que podría generar cierta resistencia en cuanto a cómo puede esa persona llegarle a esa mamá”, señaló Duarte.

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Los tutores en ocasiones son del mismo barrio con ciertas afinidades y con el que se logra enseñar de las experiencias vividas que se transmiten de forma mucho más accesible, porque la idea también de Hippy es fomentar vínculos entre la madre y el niño, así como padres de la misma comunidad.

Hippy nació hace más de 50 años en Israel de la mano de Avima D. Lombard, profesora de la Universidad Hebrea de Jerusalén, como respuesta comunitaria para apoyar la educación de aquellos niños en situación más vulnerable a través del empoderamiento de sus padres. El fundamento del programa es que la instrucción en los hogares contribuye a fortalecer el aprendizaje de estos niños y mejorar los procesos de enseñanza escolar.

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