Tras los terribles récords que el COVID-19 estableció durante mayo, el presente mes arrancó con cifras igualmente alarmantes. La semana epidemiológica del 30 de mayo al 5 de junio arrojó una nueva marca de positivos, se registraron 20.408 nuevos casos; en tanto, se reiteró la cifra de fallecidos que alcanzó la semana precedente, 752 víctimas.
Durante mayo, los promedios semanales fueron de 15 mil contagios y 500 muertes. Sin embargo, en la segunda quincena se dispararon los números a 18 mil contagios y 700 fallecidos. En el periodo del 23 al 29 de mayo se reportaron 20.362 positivos y 752 fallecidos.
Lea más: Joven crea su propia zona de arte
Contabilizando únicamente los informes de junio, en los cinco primeros días totalizan 15.637 positivos y 553 fallecidos. Durante los 31 días de mayo, los récords impuestos por el virus fueron 76.307 positivos y 2.801 fallecidos; superando, incluso, la cantidad de víctimas del 2020, que registró 2.262 muertes entre marzo y diciembre.
La primera semana de junio ya se adjudicó todos los nuevos récords diarios: 3.481 nuevos positivos (4 de junio), 130 fallecidos (5 de junio), 3.947 internados (2 de junio), 607 en UTI (1 de junio). A nivel general, Paraguay acumula 371.021 casos confirmados en toda la pandemia, así como 9.739 fallecidos y 304.294 recuperados.
Lea más: Cómo comenzar una rutina para ir en bicicleta al trabajo
Dejanos tu comentario
Martes Santo “de la traición” y “controversia” invita a la reflexión
El Martes Santo es el tercer día de la Semana Santa. Si bien no forma parte del Triduo Pascual (de jueves a domingo), es un día importante dentro de la celebración cristiana, por lo que se invita a la reflexión en la familia y con los seres queridos.
En el marco de la Semana Santa, el Martes Santo se recuerda que Jesús anunció sobre la traición de Judas, que lo entregó por 30 monedas de plata días previos a su muerte en la cruz.
El Martes Santo, Martes de la Controversia, es un día especial en el camino espiritual que va trazando la Semana Santa. En él intensificamos nuestra preparación para vivir el Triduo Pascual, según Aciprensa.
Lea también: Lunes Santo nos recuerda la unción en Betania
“Según el evangelio del día Jesús habla de su traición, manifiesta que uno de sus discípulos lo va a traicionar, por esto se conoce como el martes de la traición. Porque ese día Judas Iscariote acuerda con los sumos sacerdotes la entrega de Jesús por 30 monedas de plata”, dijo el padre Marcelo Caballero.
La traición en la iglesia primitiva era muy fuerte, teniendo en cuenta que esta era la manera que se hacía sentir la fuerza de la traición hacia Dios, lo cual seguimos haciendo hasta hoy. “La traición es lo que hacemos hasta ahora cuando nos alejamos de Dios, cada vez que obramos en contra de sus mandamientos”, apuntó.
Dejanos tu comentario
Lunes Santo nos recuerda la unción en Betania
Según la feligresía católica, durante la Semana Santa se recuerdan los misterios de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Estos días se prestan para la reflexión, el perdón y el sacrificio a fin de lograr una conversión el Domingo de Pascuas, día en que Cristo venció a la muerte.
Según el capuchino hermano Marcelo Caballero, todos los días de la Semana Santa nos invitan a prepararnos intensamente a celebrar a Cristo resucitado después de la larga preparación de la cuaresma. “Estos días santos no invitan a recogernos especialmente en la oración con el señor”, refirió en contacto con La Nación/Nación Media.
“Celebramos su misterio de amor, por el cual él ofrece su propia vida en rescate de cada uno de nosotros. Que nosotros pecadores estábamos condenados, pero él asumió la condena por nosotros. Como él es autor de la vida no podía permanecer muerto, entonces él vence a la muerte con su resurrección y nos ofrece el perdón de los pecados más una vida nueva”, explicó.
Lunes Santo de la unción
Indicó que el Lunes Santo en el Evangelio del día se recuerda la unción en Betania, porque se rememora el día en que María derramó el perfume sobre Jesús. “Es cuando Jesús asocia este gesto de María al gesto de las personas que preparaban el cuerpo para la sepultura justamente para vivir lo que Jesús viviría días después con la pasión”, afirmó el hermano.
Lea también: Los cristianos celebran mañana el inicio de la Semana Santa con el Domingo de Ramos
El padre Christian Medina, de Caacupé, destacó que el Lunes Santo se recuerda el segundo día de la Semana Santa que empezó ayer con el Domingo de Ramos. “Recordamos la unción en Betania, lugar donde Jesús se encontraba con sus amigos. Era como un lugar de vacaciones y cuando Jesús quería descansar un poco y visitar a Marta, María y Lázaro; entonces en este lugar se hizo una cena en donde María se puso a ungir los pies de Jesús con un perfume de nardo y ese perfume que agarró todo la casa”, explicó.
Continuó contando que en ese entonces, Judas hizo un comentario de que en vez de derramar el perfume podía haberlo vendido y luego repartir a los pobres. “Sin embargo, Jesús hace una declaración: ella está preparando mi funeral, a los pobres siempre los tendrán con ustedes y a mí no siempre. Dándose así el caso de la unción en Betania”.
Afirmó que con esto, Jesús resaltó el valor de la mujer que siempre está presente y tratando de guiar todo dentro de la iglesia. “Hay una figura bíblica en esta lectura en el querer de Jesús y valora muchísimo lo que puede hacer la mujer dentro de la iglesia, es la persona que ayuda, que está siempre al pendiente, atendiendo las municiones, haciendo voluntariado, expresando esa cercanía con la vida de la iglesia y de Jesús. Siempre son las mujeres las que tienen un acompañamiento más cercano a las celebraciones y acontecimiento. Por eso Jesús le da ese privilegio a María”, expresó.
Lea también: Capacitan a estudiantes y personal sanitario sobre la leishmaniasis
Dejanos tu comentario
Covid-19: semana cerró con 93 hospitalizados y más de 1.500 contagios
Así como los casos de dengue, las infecciones por covid-19 continúan en aumento, así como los cuadros que requieren de internación debido a la gravedad de los casos. Hasta el momento, Paraguay experimenta una transmisión comunitaria nivel 2. Se insta a la vacunación y a tomar las medidas de prevención, como lavado de manos, uso de tapabocas si se tiene síntomas respiratorios para evitar contagios.
El Ministerio de Salud alerta de la curva creciente de los casos, debido a que se confirmaron 1.529 casos en la última semana epidemiológica (segunda semana de enero), y también reportó que 93 personas fueron hospitalizadas a causa de las formas graves del virus.
La población más vulnerable continúa siendo los niños menores de 5 años y los adultos mayores registran, ya que corresponde al mayor porcentaje de internaciones. El informe de Salud indica que la incidencia es de 23 casos por 100.000 habitantes, existiendo una alta positividad, que llega al 34%.
Lea también: Una niña habría muerto a causa de dengue grave en Itauguá
El mayor porcentaje de internaciones por la enfermedad se reporta principalmente en el grupo de 80 años y más (17%), seguido del grupo de 0 a 4 años (13%) y de 70 a 74 años (8%). En cuanto a la cifra de fallecidos, en las últimas ocho semanas se registraron 34 fallecidos por covid-19. Los mayores de 80 años representan el mayor porcentaje de defunciones.
Los departamentos que registran más contagios son: Guairá y Misiones, además de la capital del país, Asunción y las ciudades de Lambaré, Villarrica, San Ignacio y Pilar, donde se presenta una alta transmisión, considerada de nivel 3; mientras que Central, Cordillera y Pdte. Hayes, específicamente las ciudades de Fernando de la Mora, Luque, Mariano Roque Alonso, San Lorenzo, Villa Elisa, Villeta, Ypacaraí, Ypané, Concepción, Caacupé, Piribebuy, Encarnación, Paraguarí y Villa Hayes, cuentan con nivel 2, mostrando una transmisión moderada.
Vigilancia genómica
En los últimos cuatro meses se han identificado en el país nuevas subvariantes de ómicron: la XBB 1.9.2 que circula desde septiembre de 2023, y desde diciembre se ha detectado B.A.2.86 y su subvariante JN1 reportado el 15 de enero de 2024.
Lea también: Marihuana Vip: Tribunal de Sentencia condenó a 12 acusados
Dejanos tu comentario
El aumento de la violencia familiar exige urgentes medidas para remediarla
Entre los actos de agresión más corrientes en la sociedad paraguaya los hechos de violencia familiar son los de mayor incidencia, de acuerdo con las denuncias realizadas en las fiscalías del país. Son muchos más que los casos de hurtos agravados, en particular, o los hurtos comunes, que también son abundantes, según las estadísticas del Ministerio Público.
Aunque las cifras del 2023 son solo de once meses (de enero a noviembre), uno de los aspectos que llama la atención es cuánto han aumentado en los últimos tres años, ya que en once meses del último año se registraron un 22,14 % más que en todo el 2020, un número que rebela que la violencia dentro de las familias va creciendo con fuerza.
Sin entrar en el detalle de si las estadísticas abarcan solo una parte de lo que ocurre en la realidad, porque no todo lo que sucede en el ámbito familiar se reporta a la Fiscalía, el aumento de las agresiones que se dan en el círculo más íntimo de las personas es preocupante y no puede pasar desapercibido para la sociedad.
Datos registrados en el mencionado organismo y que fueron publicados por nuestro diario indican que entre los hechos punibles más denunciados en las fiscalías del país están la violencia familiar, en primer lugar, seguido por los casos de hurto agravado y demás. Uno de los aspectos que merece la atención es que las denuncias de hechos violentos en las familias se van incrementando a medida que pasa el tiempo.
Así, de 25.953 causas denunciadas en el 2020, de enero a noviembre del 2023 ascendieron a 31.701 casos, que son 5.748 denuncias por agresiones más, cifra que rebela un alto crecimiento e indica la difícil situación que se vive en muchos círculos domésticos. De los registros mencionados surge que los meses en que más violencia familiar se ha denunciado son setiembre (3.291), octubre (3.239), noviembre (3.226) y enero (3.120) del año que acaba de terminar.
El departamento con mayor número de violencia familiar denunciado es el de Central, que registró 13.281 casos de enero a noviembre del 2023. En segundo lugar se ubica Asunción, donde se registraron 4.702 denuncias de enero al 27 de diciembre último. El tercer lugar lo ocupa Alto Paraná, con 3.196 hechos presentados a la Fiscalía en el lapso de enero a noviembre.
Teniendo en cuenta las estadísticas registradas en las diferentes oficinas fiscales del país, la cantidad de casos de agresiones que se producen en el núcleo de las familias, que en la jerga jurídica se conocen como violencia familiar, es alarmante. Porque, de manera indiscutible, demuestra que la sociedad paraguaya se está encontrando ante una grave enfermedad social que no se puede desconocer y dejar de atender adecuadamente. Un mal que va mucho más allá del aspecto legal, de si se ha cometido un acto punible o no. Y que trasciende hasta alcanzar la salud mental y la estabilidad de las familias paraguayas.
Como parte de la búsqueda de soluciones para esta dolencia social paraguaya que va creciendo sería bueno replantear la importancia de seguir teniendo numerosas secretarías y ministerios de dudosa utilidad pública. Y crear el Ministerio de la Familia Paraguaya, que englobe todo lo que hasta ahora hacen los ministerios de la Mujer, de la Niñez, de la Juventud y algunas secretarías de manera desarticulada para concertar una acción común que abarque toda la problemática familiar.
No se puede hacer nada válido por los niños, por las mujeres, por los jóvenes o por cualquier miembro de la sociedad sin tener en cuenta el valor y la importancia de la familia como cuna y lugar de desarrollo social y afectivo de las personas. No se trata de agrandar la burocracia estatal con un ministerio más sino de establecer una entidad eficaz, eliminando dependencias de escasa utilidad, para rehacer el tejido social del país.
Y aunque no se instaure un organismo estatal o de cualquier índole, es urgente que el Estado y la sociedad paraguaya tomen nota de esta enfermedad que padece y se comience a actuar para remediarla. No se puede admitir el aumento de la violencia en las familias sin tener conciencia de esta realidad y no actuar en consecuencia.