Con el objetivo de contar con datos sobre incidencia, prevalencia y sobrevida de pacientes oncológicos, tras 28 años se reanuda la vigilancia de cáncer en Paraguay. Se trata de la inauguración de la Unidad de Registro y Vigilancia de Tumores, dependiente de la Dirección de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles y entra a funcionar desde la fecha en el edificio de la Dirección General de Vigilancia de la Salud.
La vigilancia se enfocará en un principio en Asunción y el departamento Central, y progresivamente irá abarcando todo el territorio nacional. La misma se llevará a cabo mediante la metodología del registro de cáncer poblacional y permitirá contar con datos precisos de pacientes que están cursando con una patología tumoral, que incluyen datos de incidencia, prevalencia y sobrevida de pacientes oncológicos a nivel país.
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La doctora Natalia Cabrera, responsable de la Unidad de Registro y Vigilancia de Tumores, manifestó que ya iniciaron un censo como fuente de datos y que se tiene identificados -dentro de Asunción y Central- cuales son los centros de salud o Unidad de Salud Familiar (USF) que brindan atención a pacientes oncológicos y son en total 62 los centros de atención.
Agregó que con esta metodología también se efectuó la publicación de datos de prevalencia cáncer de mama, en octubre de este año. La Unidad de Vigilancia cuenta con la colaboración de la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC), dependiente de la OMS, con el cual Paraguay firmó en julio pasado un convenio que se extiende hasta el 2023.
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Según Cabrera, la Universidad Nacional de Asunción (UNA) registró la primera publicación de vigilancia de cáncer en el país en 1992, es decir, hace 28 años, recordó y que tales datos fueron difundidos y compartidos a nivel internacional. Lamentó al mismo tiempo de que ese trabajo no se haya sostenido en el tiempo. Destacó también que luego de 28 años se reanude esta labor a través del Ministerio de Salud Pública con el apoyo de sectores que asisten a pacientes oncológicos.
Explicó que contar con datos como el tipo de cáncer, edad en que se presentan y con qué estadio servirán para elaborar indicadores de incidencia en el país con el que se podrá planificar políticas públicas para enfrentar al cáncer así como saber cómo nos encontramos frente a la enfermedad en comparación a otros países de la región.
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Cabrera aseguró que estos datos serán cruciales porque contribuirán a organizar los servicios y a proporcionar la asistencia adecuada y oportuna al paciente oncológico. La vigilancia del cáncer en el país se está realizando en todos los grupos etarios.