Desde la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) indicaron que la baja en los envíos se dio a consecuencia de la merma en la producción durante la campaña pasada. Foto: Archivo.
Caída del 54% en envíos de soja durante el primer semestre se debe a menor producción, afirman
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El complejo sojero experimentó una de las peores crisis a consecuencia de las condiciones climáticas adversas registradas en nuestro país. Es por eso que al cierre de junio del 2022 los envíos de soja en grano sufrieron una caída del 54%, además de una merma del 42% en ingresos, según el informe de Comercio Exterior de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).
Hasta el sexto mes de este año, nuestro país logró el envío de 1.883.045 toneladas de granos de soja, es decir, 2.190.196 menos respecto al mismo periodo del año anterior, lo que representa una reducción del 54%. En ese sentido, Sonia Tomassone, asesora de Comercio Exterior de Capeco, explicó que esta baja en volumen significó que unos US$ 702 millones dejaron de ingresar al país.
La asesora del gremio sostuvo que esta caída en volumen refleja la drástica merma de la producción registrada en la campaña pasada a raíz de las condiciones climáticas severas provocadas por el fenómeno La Niña, que se instaló en la región. A principios de este año, se mencionó que la cosecha de este año sería la peor en los últimos 25 años con una pérdida del 80% de los cultivos.
En cuanto a las divisas, explicó que las divisas generadas a junio fueron de US$ 955,7 millones, una disminución del 42% respecto a los US$ 1.658,5 millones inyectados a la economía nacional durante los primeros seis meses del 2021. Tomassone indicó que, a pesar de la poca disponibilidad del grano, la exportación de aceites y pellets de soja se incrementó tanto en volumen como en valor, en comparación con el comportamiento de años anteriores.
En este primer semestre, nuestro país exportó 236.111 toneladas de aceite de soja, un incremento de 16.381 toneladas, en comparación con los primeros seis meses del 2021. Desde Capeco indicaron que esto significó un ingreso de US$ 336.118.723, una variación positiva de US$ 109.468.167 respecto al mismo periodo del año pasado, cuando los envíos de este derivado generaron US$ 226.650.956.
“Lo que estamos haciendo en este momento es darle una cierta garantía al productor que las variedades nacionales van a mantener su resistencia a distintas enfermedades”, dijo Mohan Kohli, consultor de la Capeco. Foto: Gentileza
Mohan Kohli, el científico indio que convirtió a Paraguay en exportador de trigo asegura que variedades nacionales pueden plantarse en la región
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El doctor en genética indio Mohan Kohli, consultor de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) y líder del Programa Nacional de Investigación de Trigo, conversó con La Nación/Nación Media sobre la producción del grano en Paraguay y sobre cómo pasó de ser un país importador a otro exportador del cereal.
Actualmente, las labores en torno al grano se enfocan en mejorar las variedades existentes y hacerlas resistentes contra enfermedades que afectan al trigo manteniendo su calidad y rendimiento. Si bien no se trata de una tarea fácil de realizar, porque para crear una variedad se tarda cerca de 10 años, es un proceso de evolución continua que prosigue en el país.
En los últimos 20 años, Kohli viene colaborando en el desarrollo de más de 20 variedades de trigo en Paraguay. Las variedades nacionales de trigo en el mercado son Itapúa 75, Itapúa 80, Itapúa 85, Itapúa 90, Itapúa 95, Canindé 1, Canindé 31. Las que están en fase de multiplicación son Itapúa 105 e Itapúa 110.
El proceso de desarrollo de variedades es realizado con el Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (Ipta), la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) y el Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio). Se hace en dos centros, uno en Capitán Miranda, Itapúa y otro en Colonia Yhovy, de Canindeyú.
“Nosotros hacemos los ensayos y la selección con la colaboración de productores y cooperativas donde también evaluamos los materiales genéticos para que sean adaptados y resistentes”, mencionó el experto.
La producción anual de trigo en Paraguay es de aproximadamente un millón de toneladas. Foto: AFP
Resistencia a enfermedades
El trabajo de Kohli es que cualquier variedad liberada de aquí en adelante tenga resistencia al hongo piricularia (produce manchas o lesiones en las hojas, nudos y en las diferentes partes de la panícula y los granos) y a la fusarium (afecta las espigas del trigo), otra enfermedad que hace años preocupa al sector.
El objetivo es que en los próximos cinco años las variedades que serán liberadas tengan cierto grado de resistencia a estas enfermedades, para ayudar a los productores a que sus costos de producción se mantengan y no aumenten. “Lo que estamos haciendo en este momento es darle ciertagarantía al productor de que las variedades nacionales van a mantener su resistencia a distintas enfermedades”, subrayó el doctor en genética indio.
Potencial exportador
En los años normales, la producción anual de trigo en Paraguay es de más de un millón de toneladas, un volumen 40 veces superior a lo que producía hace dos décadas. Este cereal es industrializado en el país con un consumo interno de 650.000 ton/año y el remanente es enviado principalmente a Brasil, aunque hay más de 30 mercados abiertos.
Si bien Paraguay es exportador del cereal en pequeña escala, tiene potencial de enviar las variedades nacionales a destinos como Argentina, Brasil (Paraná, Mato Grosso del Sul y San Pablo) o Bolivia. Estas regiones pueden sembrar las variedades paraguayas, explica Kohli y aclara que todavía no se hicieron ensayos probatorios, ya que esto implica una decisión política y una evaluación en diferentes ambientes.
“Para liberar una variedad en cualquier país habría que hacer ensayos por dos años. Si se toma esa decisión el día de mañana, entre los obtentores, será posible hacerlo. Para ello, se deberá desarrollar contacto con esos países, con sus instituciones, y a partir de ahí será muy fácil producir las semillas, hay potencial”, asegura.
Expectativas
La siembra de la nueva campaña se inició en abril, en San Pedro y Canindeyú. En tanto, en el Sur, se avanzará durante la siguiente semana. Foto: Archivo
“El trigo juega un papel muy importante porque, recordemos, la soja se siembra en más de 3,6 millones de hectáreas, superficie que debe ser cubierta en los meses de otoño e invierno”, explicó y agregó que allí entran a participar el maíz, el trigo, la canola, el girasol, la avena como abono verde y otros cereales.
La siembra de la nueva campaña se inició en abril, en San Pedro y Canindeyú. En tanto, en el Sur, se avanzará durante la siguiente semana debido a las condiciones de lluvias. Se espera que el área de siembra alcance las 400.000 hectáreas o menos, cuya producción dependerá de la coyuntura climática. “Alcanzaremos más de 1.000.000 de toneladas de trigo, dependiendo de la superficie”, remarcó Kohli.
Perfil de Kohli
Kohli brinda una excepcional contribución científica a la agricultura y la economía paraguaya. Foto: Gentileza
Mohan Kohli es ingeniero agrónomo de la Rajasthan Agricultural University de India. Obtuvo su maestría en Ciencias de la Agricultura Botánica y su doctorado en Genética en la Indian Agricultural Research Institute. Tiene estudios de postdoctorado en el Centro de Mejoramiento del Maíz y el Trigo de Estados Unidos.
Llegó a Paraguay en 1978 como parte del Centro Nacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo de México. En la década de los 80 y 90 se encargó de identificar materiales de trigo que se adaptasen al país, teniendo en cuenta las altas temperaturas.
Recientemente, el Ministerio de Relaciones Exterioresle concedió la condecoración Comendador de la Orden Nacional del Mérito por su excepcional contribución científica a la agricultura y la economía paraguaya.
Datos claves
Las labores en torno al trigo se enfocan en mejorar las variedades existentes y hacerlas resistentes a las enfermedades.
Si bien Paraguay es exportador del cereal en pequeña escala tiene potencial de enviar las variedades nacionales a la región.
La siembra de la nueva campaña de trigo se inició en abril en los departamentos de San Pedro y Canindeyú y próximamente en el Sur.
El precio promedio de la soja a abril del 2023 se situaba en los USD 552 por tonelada, pero en el primer cuatrimestre de este 2024 la media alcanzó los USD 390 por tonelada, unos USD 162 menos por tonelada. Foto: Archivo
Baja en la cotización de la soja afectó al ingreso de divisas
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Pese a que las exportaciones de soja tuvieron un aumento en volumen con relación al primer cuatrimestre del año pasado, el ingreso de divisas por el grano se vio afectado por la baja en las cotizaciones internacionales, según informó la asesora de Comercio Exterior de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), Sonia Tomassone.
Indicó que el precio promedio de la soja a abril del 2023 se situaba en los USD 552 por tonelada, pero en el primer cuatrimestre de este 2024 la media alcanzó los USD 390 por tonelada, unos USD 162 menos por tonelada. Agregó que otro problema que sigue percibiendo el sector es la ralentización de los envíos a causa de los problemas logísticos.
De acuerdo al comparativo, de enero a abril de este año se registraron USD 1.336 millones, mientras que durante el mismo periodo del año anterior las divisas generaron USD 1.480 millones, una caída de 9,7 % debido a la variación de 144 millones.
Hasta abril fueron exportadas 3.423.550 millones de toneladas de soja, y al mes del año pasado se habían embarcado 2.679.957 millones de toneladas, lo cual arrojó un incremento de 743.993 toneladas. La asesora indicó que los envíos de los derivados de la soja (aceite y pellets) aumentaron tanto en volumen como en valor, traduciéndose esto en una mayor industrialización.
Se enviaron al exterior 190.091 toneladas de aceite, unas 63.730 toneladas más, teniendo en cuenta que en el 2023 se dio la salida de 126.861 toneladas. Los pellets fueron embarcados en 645.334 toneladas versus las 401.534 toneladas del primer cuatrimestre del año anterior.
En cuanto a los destinos del complejo soja, Argentina se posicionó como el principal comprador, absorbiendo el 78 % del total exportado. Brasil le siguió con el 11 %, Rusia con el 1 % y en menor volumen Perú, Estados Unidos, Chile y Corea del Sur.
Además del tomate, según datos del BCP, la cebolla, el repollo y el locote siguen en la lista de los productos que más se encarecieron. Foto: Ilustrativa/Archivo
Producción frutihortícola se vio afectada por el clima: “necesitamos tecnología”
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El ministro de Agricultura y Ganadería, Carlos Giménez, detalló que no solo la producción de tomate se vio afectada por las condiciones climáticas. Otros cultivos como la cebolla, el locote y la papa enfrentaron la misma dificultad, que hoy repercute en la suba de los precios de la canasta básica.
“Hay cuestiones que, lastimosamente, nos cuestan todavía en la producción eficiente que deberíamos tener. Necesitamos tecnología acorde a la época moderna y las adversidades climáticas para tener una agricultura sofisticada”, señaló el ministro a la 650 AM. Con el escenario actual, se dispararon los precios de los productos frutihortícolas, especialmente del tomate, que tuvo un notable encarecimiento desde el mes de abril.
“En el caso del tomate, se espera que para fines de junio se normalicen los precios, a partir de la producción local, que prevé la cosecha”, añadió Giménez. Más allá del complejo escenario productivo, la suba en el precio de los productos frutihortícolas responde igualmente al escenario económico de la Argentina, el principal punto de importación para el país.
“Argentina siempre ocupa nuestro mercado. A nosotros nos cuesta mucho producir con las condiciones climáticas adversas”, remarcó el ministro y puso énfasis en cómo impacta la situación económica de los países vecinos (Argentina y Brasil) en la presión al alza de los productos de la canasta básica.
Además del tomate, según datos del BCP, la cebolla, el repollo y el locote siguen en la lista de los productos que más se encarecieron junto con la carne y los lácteos. Otros aumentos también se dieron en bebidas alcohólicas.
La lluvia recompone maravillosamente el perfil de humedad del suelo, pero el exceso de humedad atrae plagas y enfermedades, alertaron desde la Capeco. Foto: Archivo
Las fuertes lluvias repercutirían en calidad y rendimiento de cultivos
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El director ejecutivo de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), Hugo Pastore, actualizó el panorama actual, así como las previsiones respecto a los cultivos, teniendo en cuenta las recientes e intensas lluvias que golpearon al sector.
Mencionó que si bien, en ciertas zonas del país la cantidad de lluvia caída fue suficiente, en otras fue en exceso, por lo que todo extremo tampoco es bueno, dijo, y que las precipitaciones más importantes afectaron principalmente en el centro sur, donde fueron muy abundantes.
“Es cierto que la lluvia recompone maravillosamente el perfil de humedad del suelo, pero los extremos nunca son buenos. La cantidad de lluvia, los días nublados, el exceso de humedad atrae plagas y enfermedades, por eso es probable que los cultivos que están para cosecha sean afectados en calidad y rendimiento”, expresó a la 780 AM.
Hugo Pastore, director ejecutivo de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco). Foto: Jorge Jara
El campo, motor de la economía
Explicó que la etapa actual es de cosecha de la soja de segunda, así como la cosecha de maíz de segunda que está por iniciarse, y por arrancar la siembra de trigo que estuvo atrasada justamente por las lluvias. Ahora, con los nuevos días de sol se podrá retomar los trabajos de siembra, aunque el pronóstico habla de más precipitaciones, mencionó Pastore.
Otro aspecto importante es que las lluvias pudieron ayudar en la recuperación en cierta medida del nivel de los ríos. “Es una primavera, que veremos cuánto dura, en el sentido de la bonanza de tener mejor nivel de agua en los ríos”, remarcó.
Pastore aseveró que el exceso de lluvias no es positivo, pero “la falta es peor”, pues la economía paraguaya está directamente ligada a la actividad agropecuaria, y cuando el campo produce, Paraguay crece. “Nuestra economía, si bien ha crecido y diversificado en muchos rubros, el carro jefe sigue siendo la producción agropecuaria”, remarcó.