Desde este lunes, tras casi dos años de espera se dio la reapertura del cruce fronterizo Falcón-Clorinda, así también del paso vía fluvial al Puerto Formosa-Puerto Alberdi. Desde la Dirección de Migraciones confirmaron que en el primer día 93 personas cruzaron hacia Clorinda, en tanto que de Alberdi no pasó ni una sola persona.
Cabe destacar que los pobladores y, en especial, los comerciantes, se muestran muy expectantes con la reapertura de las fronteras con Argentina y esperan que la economía vuelva a florecer luego de un largo tiempo. Los comerciantes de Alberdi mencionan que muchas familias sobrevivieron con las ollas populares, ya que durante todo el año anterior prácticamente no se trabajó, por lo que esperan que con la reapertura se pueda volver a dinamizar la actividad.
Ante esta nueva situación que implica la rehabilitación de las fronteras con los países vecinos, que aumenta el ingreso de turistas para toda la región, como también el contrabando. Desde La Nación lanzamos la siguiente interrogante: El contrabando tiende a aumentar con la reapertura de los pasos fronterizos, ¿cómo se puede combatir este flagelo?
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El 51% de los votantes respondió que se puede lograr “depurando las instituciones encargadas del combate al contrabando”, afirmando que en muchos casos estas podrían estar aliadas con los contrabandistas y por eso pasan tranquilamente las fronteras. Así también, que se contraten personas idóneas y con ganas de luchar contra el contrabando.
En tanto que el 40% de los lectores apuntó que la forma de luchar contra el contrabando es generando opción laboral para las personas que se dedican a esta actividad ilegal. Apuntaron que la mayoría se dedica a la comercialización de los productos prohibidos porque no tienen una mejor salida laboral y que necesitan llevar el pan para sus familias.
Mientras que el 9% de los seguidores manifestó que la solución es crear una ley con sanciones más fuertes para los contrabandistas y los cómplices. De esta forma se frenará abruptamente la venta de estos productos, haciendo que los pequeños como grandes contrabandistas del país se apeguen a las nuevas reglas.