Lo que varios sectores más golpeados por la pandemia habían logrado respecto a la ley transitoria de aporte al Instituto de Previsión Social (IPS) no está resultando actualmente, ya que al parecer, la institución no está comprendiendo muy bien las definiciones de actividades afines a los rubros beneficiados.

Es lo que denuncia la representante del sector gastronómico, Arami O’Hara, quien expresó su descontento ante un hecho de rechazo de solicitud al IPS para acogerse al beneficio. Lo hizo a través de su cuenta de Twitter y dio a entender que la institución no está entendiendo sobre los rubros afines a la gastronomía en particular.

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“Están rechazando porque en actividad principal por ejemplo dice panadería o parrillada, y según ellos parece que no es gastronomía, solo si dice gastronomía es válido. Y para eso ya estamos en la SET, hay una actividad principal e incluso podemos registrarnos hasta 4 actividades y todo sigue siendo legal porque estamos pagando impuestos”, aquejó la empresaria gastronómica.

La Ley se pensó no solo para mantener la formalidad, sino también para formalizar a más gente. Foto: Archivo.

Ley se creó para dar oxígeno

O’Hara mencionó que la ley se peleó y se logró para que los sectores más afectados por las restricciones de la pandemia como gastronomía, hotelería, turismo, eventos y entretenimiento puedan seguir honrando su formalidad y compromiso con el IPS y a la vez tener un oxígeno en el 2021, ya que aún no hay recuperación económica.

Es así que dicha pelea por ese beneficio, que se suponía ayudaría a seguir dando oxígeno a empresas formales, ahora resulta que la misma institución les pone el palo en la rueda, sentenció. Al tiempo de recalcar que la ley transitoria de aporte que debía tener carácter formalizador incluso, pero que al momento de reglamentarlo, como casi siempre pasa, en vez de ser algo que “sirva y ayude”, se convierte totalmente en otra cosa.

La representante del sector gastronómico señaló a la vez que la ley se pensó no solo para mantener la formalidad, sino también para formalizar más gente, de modo que sea atractivo con un aporte de 2,5% por un año y la gracia para que más empresas pongan en blanco a su gente, recuperen oxígeno y luego empiecen a pagar en el 2022 lo que corresponde por seguro social.

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Lamentó que ahora hay que volver a esperar, explicar y aguardar a que hagan los cambios y que se entienda todo de nuevo, mientras el IPS seguirá cobrando, pero lo que indigna es que no proyecta ganar más empresas en blanco y más aportantes a futuro, dijo O’Hara.

Los planes de Gobierno para sobrellevar la pandemia ya no deben solo mirar la urgencia de hoy, sino también la importancia de seguir teniendo empresas sólidas y formales mañana. Las leyes se tienen que redactar, analizar y legislar de una vez por todas pensando a corto y largo plazo, acotó.

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