Los comerciantes de las ciudades de Ciudad del Este, Pedro Juan Caballero y Salto del Guairá consideran un gran paso la reapertura de la frontera con Brasil a fin de ir reactivando la economía del país, afectada por la pandemia del COVID-19, pero también son conscientes de que nada será fácil hasta no terminar con la propagación de virus.
“Nos unimos en un solo sentimiento para volver a vivir, volver a trabajar. Hay gente trabajadora y queremos vivir honesta y patrióticamente, las dificultades que estamos pasando hicieron que dejáramos de lado nuestras banderas y nos uniéramos en un solo objetivo”, señaló este sábado Ramón “Tito” Rojas, comerciante de Salto del Guairá.
Sostuvo que la crisis desatada a causa de la pandemia del COVID-19 no solo afectó a los empresarios y ciudadanos paraguayos, sino también a los extranjeros radicados en Paraguay, quienes se pusieron del lado de los trabajadores más necesitados y pelearon por la reapertura de la frontera.
Para Tomás Medina, representante de la Cámara de Industria, Comercio, Turismo y Servicio de Pedro Juan Caballero, el primer beneficiado con la reapertura de la frontera es el pueblo paraguayo, ya que puede volver a operar, ganarse el sustento diario y cubrir sus obligaciones financieras.
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“Con certeza, el primer beneficiado es la población, ni yo que vivo acá me daba cuenta de la interdependencia que hay. Tenemos que buscar opciones como un sistema de descuento que dure más tiempo, como 15 días”, agregó el vocero del gremio en entrevista con Telefuturo sobre la situación de la reapertura y la crisis.
La frontera entre Brasil y Paraguay fue abierta nuevamente desde el pasado jueves y está permitido el ingreso y la salida de las personas desde Ciudad del Este, Pedro Juan Caballero y Salto del Guairá, con la finalidad de reactivar la economía ante la crisis provocada por la pandemia del COVID-19.