En el marco de los trabajos para fortalecer a los productores de distintos rubros, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) firmó un acuerdo de trabajo en conjunto con las entidades aliadas que promueven la apicultura en el Chaco Central.
El convenio es en el marco del Proyecto de Promoción de la Producción Pecuaria Diversificada y Sustentable, Componente 3 – Apoyo a las Mesas Sectoriales y a sus Actores (Procadenas) y fue firmado en la sede la Gobernación de Boquerón, en la ciudad de Filadelfia, Chaco paraguayo.
Desde el MAG explicaron que el objetivo de esta iniciativa es mejorar el ingreso de unas 250 familias productoras apícolas del Chaco, en un periodo de 3 años, mediante su inclusión en forma gradual en las cadenas de valor de la miel de abeja en el mercado de este rubro mediante la empresa Apicultura del Chaco SA (APICSA).
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De esa manera, se espera impulsar la producción sustentable y competitiva, y la comercialización a precio justo de la miel de abeja, como un rubro alternativo para la generación de ingresos familiares, además de potenciar la articulación entre el sector público y el privado para promover modelos de desarrollo inclusivo, competitivo y sustentable.
Las metas contemplan la producción en el segundo año de unos 15.000 kilos de miel de abeja en la zona del proyecto respecto a la línea base, mejorar en un 10% el ingreso de las 250 familias incluidas en el proyecto y aumentar en un 20% la cantidad de miel de abeja vendida en el mercado nacional proveniente de la zona del Chaco.
Por el sector público firmaron el acuerdo representantes del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) en la persona del viceministro, Marcelo González Ferreira, además de representantes de la Dirección de Extensión Agraria (Deag), el Servicio Nacional de Salud y Calidad Animal (Senacsa), entre otros.
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Lanzan la Feria Bioceánica del Libro Chaco 2025 en Boquerón
Con una importante concurrencia de público en el estand de la Gobernación de Boquerón, en la Expo Rodeo Trébol, en la ciudad de Loma Plata, se realizó la presentación de la Feria Bioceánica del Libro Chaco 2025, que se llevará a cabo en Carmelo Peralta, los días 30, 31 de octubre y 1 de noviembre. Esta será la segunda edición del evento librero y cultural.
El anuncio se dio con el lanzamiento del libro de ensayo “Una aproximación a la existencia real de la conciencia”, del escritor chaqueño Emiliano Servín Maldonado, presidente de la Junta Departamental de Boquerón. Acompañaron este acto el gobernador de Boquerón, Harold Bergen, y el presidente de la Sociedad de Escritores del Paraguay (SEP), Marcos Ybáñez.
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En su publicación, el escritor Emiliano Servín explora con su pluma crítica los grandes dilemas de la vida humana, en un ensayo donde interpela con maestría sobre la existencia real de la conciencia, logrando una fiel descripción de las contradicciones sociales y políticas de nuestra época.
“Es un libro imprescindible, en este tiempo de relativismo social, cultural y político, al ser una obra con un enfoque académico y didáctico que no debe faltar en la biblioteca de cada paraguayo”, refirieron durante la presentación de la obra. El tema de la conciencia forma parte de una de las preocupaciones más recurrentes en la historia literaria.
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MAG: sector agropecuario generó un retorno de G. 1,2 billones en dos años
En los últimos dos años, las inversiones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) superaron los G. 480.000 millones, con un retorno económico estimado de G. 1,2 billones para la agricultura familiar y la producción nacional. El informe presentado esta mañana en el Hotel Crowne Plaza, por el titular de la cartera, Carlos Giménez, destaca que más de 100.000 familias productoras fueron beneficiadas con acciones que impulsaron la productividad, el acceso a mercados y la generación de ingresos.
Entre los principales resultados económicos se registran: G. 135.000 millones en ventas en ferias agropecuarias, de los cuales G. 100.000 millones corresponden al Programa Hambre Cero. Aumento promedio del 25 % en la productividad de cultivos clave como tomate, papa, cebolla y ajo.
Exportaciones por G. 14.000 millones en productos hortícolas a Argentina y G. 274.000 millones en banana a Chile y Brasil. Fortalecimiento de 1.200 organizaciones rurales, mejorando su capacidad de comercialización y acceso a crédito.
“En nuestro país, nosotros encontramos una agricultura fortalecida, exportadora, sólida, que alimenta a más de 80 millones de personas en el mundo. La agricultura familiar también es fundamental, pero es ahí donde encontramos mucha iniquidad, por lo que nos vamos a enfocar en mejorar dentro del plan 2030″, agregó el ministro durante la conferencia de prensa.
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Inversiones
El documento también detalla inversiones en infraestructura y tecnología, como la instalación de 21 estaciones meteorológicas automáticas, modernización de laboratorios, digitalización de registros de la agricultura familiar y mejora de la conectividad en agencias regionales.
De cara al periodo 2025–2026, el MAG proyecta la expansión de cultivos estratégicos, apertura de nuevos mercados internacionales y mayor acceso a financiamiento para productores rurales, con el objetivo de seguir aumentando el impacto económico del sector.
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Paraguay produce 20.000 toneladas de cebolla: un rubro rentable y con alto potencial
La producción de cebolla es un rubro socioeconómicamente muy importante en el país, teniendo en cuenta la cantidad de mano de obra que emplea en el campo. Actualmente Paraguay cuenta con un consumo diario de 150 toneladas de cebolla, mientras que a nivel nacional la demanda es de 54.000 toneladas al año.
El ingeniero agrónomo Diego Garcete, coordinador de Gestiones de Producción del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), mencionó a La Nación/Nación Media que en el 2024 el área de cultivo estuvo orillando cerca de 950 hectáreas, con una producción aproximada de 20.000 toneladas, lo que dio para satisfacer el mercado por cerca de 60 a 65 días, pero generalmente la producción nacional solo alcanza a cubrir unos 50 días del consumo interno.
Este rubro es bastante resistente al frío y las heladas, adaptándose a cualquier tipo de suelo. En tanto, los rendimientos sí se pueden ver afectados por la falta de agua y el suelo degradado, pero en el país se están haciendo las capacitaciones pertinentes para ir mejorando la producción.
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Producción cíclica
Garcete explicó que se tienen tres ciclos de producción: la variedad tempranera que se inicia en la época de marzo a partir de los primeros días hasta el 15 de abril, la medianera desde el 15 de abril al 20 de mayo aproximadamente y la tardía desde el 20 de mayo hasta el 31 de junio, las cuales son las épocas óptimas para hacer el plantío.
En los meses de setiembre, inclusive octubre, ya se comienza a cosechar la primera variedad, posteriormente la siguiente de octubre y noviembre, y las tardías entre noviembre y diciembre.
Como institución, el MAG repartió este año 1.130 kilogramos de semillas de cebolla de dichas variedades, lo cual abarcaría 665 hectáreas, representando un 70 % de la producción nacional para este 2025. El otro 30 % restante corresponde al sector privado y en conjunto se espera llegar a las 1.000 y 1.100 hectáreas de tope de producción.
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Catorce departamentos
Actualmente, el MAG está trabajando con 3.800 productores de 14 departamentos. Las zonas más productivas son Paraguarí, Itapúa y Caaguazú, que cuentan con más productores. Le siguen agricultores de Guairá, Caazapá, Misiones, Bajo Chaco, Alto Paraná, Central, San Pedro, Canindeyú, Amambay y Ñeembucú.
“En promedio un productor de cebolla que tiene un cuarto o hasta media hectárea de producción brinda mano de obra a cuatro familias por día. Por eso genera una microeconomía bastante importante dentro de cada distrito y departamento”, alegó Garcete. La comercialización se realiza principalmente en las fincas familiares de producción, a través de compradores directos o intermediarios.
En cuanto a rindes, el promedio nacional está entre las 12 y 15 toneladas por hectárea, pero se proyecta llegar a las 18 a 20 toneladas por hectárea a través de las capacitaciones y también de las visitas técnicas diarias de la cartera agraria en las zonas productivas.
Rentabilidad y potencial
La rentabilidad de la cebolla está ubicada en un 53 %. “El costo por hectárea estaría rondando los 40 millones y sacando 18 toneladas por hectárea se tendría un ingreso promedio de 64 millones”, destacó el coordinador de Gestiones de Producción. Es decir, que el retorno llega a los G. 24 millones por hectárea.
Agregó que este rubro tiene el potencial de seguir creciendo y se apunta a trabajar de manera asociativa con los comités de base o las asociaciones de productores, viendo la manera de insertar dentro de sus organizaciones el uso de clasificadoras de cebolla e instalar los galpones secaderos para que se pueda almacenarla y poder ofrecerla en cuando el productor desee.
Por último, dijo que el MAG busca poder extender el ciclo de producción y ofertar por más tiempo lo producido a nivel local, y para que esta no salga en una misma época ya se encuentran realizando la zonificación de la producción.
Esto se basa en que en departamentos como Paraguarí, Itapúa y una parte de Caaguazú reciben semillas de cebolla de la línea tempranera. En tanto, demás departamentos, reciben la semilla medianera y la tardía, a fin de tener una producción escalonada y por sobre todo extender la época de oferta nacional a 80 o hasta 90 días.
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Paraguay produce 20.000 t de cebolla, un rubro rentable y con alto potencial
La producción de cebolla es un rubro socio económicamente muy importante en el país, teniendo en cuenta la cantidad de mano de obra que emplea en el campo. Actualmente Paraguay cuenta con un consumo diario de 150 toneladas de cebolla, mientras que a nivel nacional la demanda es de 54.000 toneladas al año.
El ingeniero agrónomo Diego Garcete, coordinador de Gestiones de Producción del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), mencionó a La Nación/Nación Media que en 2024 el área de cultivo estuvo orillando cerca de 950 hectáreas, con una producción aproximada de 20.000 toneladas, lo que dio para satisfacer el mercado por cerca de 60 a 65 días, pero generalmente la producción nacional solo alcanza a cubrir unos 50 días del consumo interno.
Este rubro es bastante resistente al frío y las heladas, adaptándose a cualquier tipo de suelo. En tanto, los rendimientos sí se pueden ver afectados por la falta de agua y el suelo degradado, pero en el país se están haciendo las capacitaciones pertinentes para ir mejorando la producción.
PRODUCCIÓN CÍCLICA
Garcete explicó que se tienen tres ciclos de producción: la variedad tempranera que se inicia en la época de marzo a partir de los primeros días hasta el 15 de abril, la medianera desde el 15 de abril al 20 de mayo, aproximadamente, y la tardía desde el 20 de mayo hasta el 31 de junio, las cuales son las épocas óptimas para hacer el plantío. En los meses de setiembre, inclusive octubre, ya se comienza a cosechar la primera variedad, posteriormente la siguiente de octubre y noviembre, y las tardías entre noviembre y diciembre.
Como institución, el MAG repartió este año 1.130 kilogramos de semillas de cebolla de dichas variedades, lo cual abarcaría 665 hectáreas, representando un 70 % de la producción nacional para este 2025. El otro 30 % restante corresponde al sector privado y en conjunto se espera llegar a las 1.000 y 1.100 hectáreas de tope de producción.
RENTABILIDAD
La rentabilidad de la cebolla está ubicada en un 53 %. “El costo por hectárea estaría rondando los 40 millones y sacando 18 toneladas por hectárea se tendría un ingreso promedio de 64 millones”, destacó el coordinador de Gestiones de Producción. Es decir, que el retorno llega a los G. 24 millones por hectárea.
Agregó que este rubro tiene el potencial de seguir creciendo y se apunta a trabajar de manera asociativa con los comités de base o las asociaciones de productores, viendo la manera de insertar dentro de sus organizaciones el uso de clasificadoras de cebolla e instalar los galpones secaderos para que se pueda almacenarla y poder ofrecerla cuando el productor desee.
Por último, dijo que el MAG busca poder extender el ciclo de producción y ofertar por más tiempo lo producido a nivel local, y para que esta no salga en una misma época ya se encuentran realizando la zonificación de la producción. Esto se basa en que en departamentos como Paraguarí, Itapúa y una parte de Caaguazú reciben semillas de cebolla de la línea tempranera.
En tanto, los demás departamentos, reciben la semilla medianera y la tardía, a fin de tener una producción escalonada y por sobre todo extender la época de oferta nacional a 80 o hasta 90 días.
CATORCE DEPARTAMENTOS
Actualmente, el MAG está trabajando con 3.800 productores de 14 departamentos. Las zonas más productivas son Paraguarí, Itapúa y Caaguazú, que cuentan con más productores. Le siguen agricultores de Guairá, Caazapá, Misiones, Bajo Chaco, Alto Paraná, Central, San Pedro, Canindeyú, Amambay y Ñeembucú.
“En promedio un productor de cebolla que tiene un cuarto o hasta media hectárea de producción brinda mano de obra a cuatro familias por día. Por eso genera una microeconomía bastante importante dentro de cada distrito y departamento”, alegó Garcete.
La comercialización se realiza principalmente en las fincas familiares de producción, a través de compradores directos o intermediarios. En cuanto a rindes, el promedio nacional está entre las 12 y 15 toneladas por hectárea, pero se proyecta llegar a las 18 a 20 toneladas por hectárea a través de las capacitaciones y también de las visitas técnicas diarias de la cartera agraria en las zonas productivas.