Japonés de 74 años hace furor con sus acuarelas en YouTube
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El japonés Harumichi Shibasaki tenía casi 70 años cuando comenzó a grabar tutoriales de arte para su canal en YouTube, que tiene ahora más de 1,4 millones de seguidores de todo el mundo. Su canal “Watercolor by Shibasaki” (Las acuarelas de Shibasaki) propone sobre todo cursos de dibujo y pintura. En algunas ocasiones, sus nietos y sus gatos se cuelan en los videos.
“Buenos días, soy Shibasaki. ¿Cómo estamos?”, pregunta sonriendo el artista de 74 años, con pelo y bigote blanco. Shibasaki filma él mismo todos los videos en su casa, en el campo, con un smartphone, una cámara reflex y un dispositivo de iluminación.
“Cuando era pequeño, en casa no teníamos ni televisión”, explica a la AFP. “Nunca habría imaginado que una época como esta podía existir”. Para él, estar conectado con personas de todo el mundo es “como un sueño”. Su canal registró un aumento de popularidad durante la pandemia del COVID-19, después de que pidiera en un video a los internautas dibujar con él, en momentos en que muchos países impusieron el confinamiento y la gente tenía que quedarse en casa.
El video recibió innumerables comentarios de seguidores de todas las partes del mundo. Algunos decían sentirse “relajados y tranquilos”, otros elogiaban a Shibasaki por su “manera de hablar tan agradable” que permite “dormir en paz”. Aficionado al dibujo desde niño, este hijo único de una pareja de agricultores de Chiba, cerca de Tokio, se fue para la capital a los 18 años a estudiar Bellas Artes. Luego se dedicó a la docencia.
Su hijo lo alentó para que creara un canal en YouTube. En él, Shibasaki despliega su talento de pedagogo, pero también es un espacio para comunicar con sus seguidores, algunos de los cuales incluso le comentan temas personales. “Creen seguramente que pueden contármelo todo”, explica Shibasaki, quien también comenta sus problemas de salud en los videos.
Tras haber sido operado del corazón en seis ocasiones, dice tener “una imagen muy concreta de la muerte” y “comprender realmente” los problemas de la gente. Espera poder seguir pintando tanto tiempo como sea posible, pero, con la edad, “la vista empeora y las manos tiemblan”, admite. “Creo que podré dibujar correctamente todavía cinco años más”, augura. “Si puedo crear pinturas que perdurarán después de mí, es lo que quiero hacer”.
Paola Ferrari destaca éxito del stand de Paraguay en la Expo Osaka
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Paola Ferrari, capitana de la selección paraguaya de básquetbol y embajadora de la Marca País, visitó el pabellón de Paraguay en la Exposición Universal de Osaka 2025. “Hola a todos, estoy por aquí porque quiero contarles mi experiencia en la Expo Osaka”, compartió en un mensaje en redes sociales, resaltando su emoción por la cantidad de visitantes que atrae el espacio nacional.
“Tuve la suerte de conocer el stand de Paraguay, que me pareció espectacular. Saber que 20.000 personas pasan por nuestro stand a diario y conocen más sobre nuestro país es maravilloso”. La deportista, que ha brillado en equipos de Italia y es una de las figuras más queridas del deporte paraguayo, destacó especialmente el trabajo artesanal con Ñandutí, el encaje tradicional que se enseña en vivo en el pabellón.
“Me gustó mucho la parte del Ñandutí, ver cómo se promueve nuestra cultura y también Itaipú, una de nuestras grandes fortalezas”, añadió. Además de su paso por la Expo, Ferrari visitó la Embajada de Paraguay en Japón, donde fue recibida por parte del staff diplomático. “Les recomiendo que vengan y conozcan la Expo Osaka. Es una experiencia única”, concluyó.
El pabellón paraguayo, titulado “Ikigai Paraguay: Energía que conecta”, se inspira en el concepto japonés de ikigai, que representa el propósito de vida. Bajo este lema, Paraguay se presenta como un país vibrante, con una cultura rica, liderazgo en energías renovables y una visión sostenible del futuro
Ubicado en la isla artificial de Yumeshima, el stand ofrece una experiencia multisensorial que incluye: Exhibiciones de artesanía indígena, como cerámica y tallas en maderas; Clases de Ñandutí, impartidas por tejedoras japonesas y nikkei; Promoción de Itaipú Binacional, una de las mayores hidroeléctricas del mundo y souvenirs y pines de regalo, que encantan a los visitantes.
Anuncian muestra y premiación del concurso Elden Tefft
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El Comité Paraguay-Kansas (CPK), Kansas-Paraguay Partners (KPP) y el Centro Cultural Paraguayo Americano (CCPA) invitan al brindis de apertura de la muestra y premiación de artistas participantes del concurso de artes visuales Elden Tefft 2025, el próximo miércoles 18 de junio a las 19:00 en la Galería Agustín Barrios del CCPA, sito en avenida España n.° 352 casi Estados Unidos y Brasil, en Asunción.
La muestra quedará abierta al público hasta el viernes 20 de junio en el horario de 10:00 a 17:00. Esta iniciativa lleva el nombre de Elden Tefft en reconocimiento al aporte del escultor, escritor y profesor estadounidense, quien entre los años 1980 y 1991 propició importantes intercambios artísticos entre Kansas (Estados Unidos) y Paraguay, dejando un valioso legado en la comunidad artístico-cultural de Paraguay.
El concurso tiene como objetivo apoyar a artistas visuales emergentes en el desarrollo de su creatividad y capacidad artística, así como brindar una oportunidad de experiencia e intercambio académico y propiciar vínculos culturales y sociales entre Paraguay y los Estados Unidos de Norteamérica.
El tema establecido como eje inspirador –en esta segunda edición- fue “El arte como voz social”, entendiendo que el arte es tanto un reflejo crítico de la realidad, así como motor de cambio social. La convocatoria se orientó a los lenguajes circunscriptos al campo de las artes visuales: de técnica libre, bidimensional (pintura, dibujo, grabado, fotografía o mixta) o tridimensional (instalaciones, intervención urbana, entre otros).
Durante la exposición el próximo miércoles 18, se dará a conocer al artista ganador del primer premio quien tendrá la oportunidad de realizar una visita académico-cultural de cuatro semanas al Estado de Kansas, USA., con costos de pasaje, alojamiento, comidas, transporte interno incluidos, por un valor estimado de USD 10.000 y viático de USD 500 para gastos personales.
Gustavo Benítez reflexiona sobre el arte paraguayo en un libro
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“Visibilizar la memoria como acto de resistencia/Archivo Gustavo Benítez/Arte contemporáneo paraguayo” se titula el libro del artista paraguayo Gustavo Benítez, publicado en una edición limitada con el apoyo del Fondo Nacional de la Cultura y las Artes. El material oficializó su lanzamiento el 21 de mayo pasado, en el marco de una exposición en el espacio Little Italy de Asunción.
Aborda con imágenes y textos los diferentes momentos del arte visual del Paraguay (1977-2024). El autor vivió y se formó en Río de Janeiro (Brasil), en la Escuela de Artes Visuales del Parque Lage (1980-1984), con la maestra Celeida Tostes; posteriormente desarrolló su trabajo en Asunción, participando en exposiciones nacionales e internacionales.
Esta publicación reúne imágenes, textos y documentos clave del trabajo del artista, reflexionando sobre el arte paraguayo desde la dictadura hasta hoy. La edición rescató su trayectoria como diseñador, docente y artista comprometido con los derechos humanos. A través de su obra, Benítez propuso una mirada crítica sobre la historia reciente del país, apelando a la memoria como un acto de resistencia. Informes al 0981 346-672.
La reciente publicación aborda la trayectoria de su autor y ofrece una mirada sobre la creación artística local desde la dictadura. Foto: Gentileza
Arte y ética de la alteridad
El curador de arte Fernando Moure realizó este comentario sobre el material: Esta edición, un archivo de gran necesidad para el estudio visual de nuestra escena artística, constituye una valiosa herramienta para comprender las sendas del arte contemporáneo en Paraguay. A través de la mirada y la experiencia personal del artista Gustavo Benítez Galeano, nacido en 1959, el libro es una bitácora visual y narrativa, en la cual se recopilan imágenes y recuerdos de su vida y trabajo, al tiempo de profundizar un contexto general del sistema del arte local durante las últimas décadas de la dictadura hasta hoy.
La publicación reúne contenidos como imágenes y textos que abarcan diferentes momentos del arte visual en Paraguay, desde 1977 hasta 2024. El título Visibilizar la memoria como acto de resistencia refleja la intención del artista de hacer visible su trayectoria y dibujar una memoria del arte paraguayo de esos tiempos.
Como asunción de lo que sabíamos, el trabajo artístico del artista Gustavo Benítez Galeano en las últimas cinco décadas prevalece en nuestro medio a fuerza de calidad, tesón y hondo significado ético. Su obra ha enraizado y fructificado a fuerza de calidad y experiencia, añejada por la distancia y el silencio de un ecosistema agreste como el nuestro.
La reciente publicación aborda la trayectoria de su autor y ofrece una mirada sobre la creación artística local desde la dictadura. Foto: Gentileza
Identidad y memoria vivas
Finura, sensibilidad, generosidad y audacia. Es lo que se evidencia tras la lectura de este libro preciosamente diseñado, y cuya edición primorosa incluye textos e imágenes inéditos. Un rescate enorme y que le ha ocupado cuatro años de deseo y cuya realidad florece en álbum gráfico, en un catálogo razonado.
Recién publicado y apoyado económicamente por el Fondo Nacional de la Cultura y las Artes (Fondec), la edición recorre sincrónicamente los primeros pasos de un jovencísimo Gustavo en el Centro de Estudos Brasileiros, en 1971, junto a Edith Jiménez y a Livio Abramo, para luego continuar con Olga Blinder y Ofelia Echagüe Vera. Vendrá el tiempo de su migración al Brasil, a Río de Janeiro, donde continúa su formación como artista e inicia su carrera de Diseño Gráfico e Industrial.
Como alumno en el Centro de Artes Visuales del Parque Lage de Rio, ahonda en procesos creativos, en dinámicas de comprensión de la experimentación de las artes de la transformación. Concluido este rico capítulo brasileño, Gustavo regresa al Paraguay con una obra actualizada y que avizora un desarrollo de primera magnitud.
El libro continúa con su regreso al Paraguay, su carrera ascendente en el arte, el diseño, la comunicación y la docencia. Comienza el desarrollo de una obra de radical humanitarismo y ecologismo, que será el leit-motiv su lucha existencial, su rebeldía moral en una sociedad en la que campean injusticias, prebendas y el narcisista status quo de algunas figuras culturales.
Esta biografía personal señala con gran atención un contexto político y social, fuertemente marcado por la resiliencia del arte. La edición es un racconto de los años del miedo, los de la deforestación masiva y demasiado rápida de las selvas y biomasas del Bosque Atlántico, el etnocidio de los habitantes originarios, la desaparición de animales y plantas, las represas hidroeléctricas, las violencias de un Estado sin derechos contra sus hijos.
La reciente publicación aborda la trayectoria de su autor y ofrece una mirada sobre la creación artística local desde la dictadura. Foto: Gentileza
Quimera invertida
Con el fin de la dictadura en la década previa al siglo XXI, las luchas civiles enfrentando el autoritarismo, o el mismo lugar e importancia de las artes en esos años en Asunción dibujan el compromiso de GB con nuevas sensibilidades. Su trabajo apuesta por una abstracción no objetivista, utlizando materiales no convencionales, oscureciendo la comprensión, cual reflejo silente de lo indecible.
Benítez hace suya la causa de la libertad personal y colectiva en la capital paraguaya, involucrándose en las esperanzas de un nuevo tiempo. El tenso pulso sostenido por la comunidad artística comprometida con los derechos humanos y la libertad ante el inmovilismo de la dictadura y de las élites que la sostienen, tiene claros ejemplos de su activismo a lo largo de estas 264 páginas.
También cabe un retrato retrospectivo de nuestra sociedad civil del arte de esos años, endogámica y cerrada en sí misma, una escena poco receptiva a las novedades expresivas como el arte de instalación o el objeto. El hacer de Gustavo insistió en materializarse en el secreto, el enigma o la metáfora oblicua y a contrapelo de una estética complaciente, decorativa y que olía a trementina.
El despliegue, el despegue hacia poéticas vegetales, cósmicas y del paisaje natural serán las nuevas señas de identidad de su obra, anhelante del bosque y de sus seres vivos, de un territorio hoy yermo y vacío. El simbolismo de la misma materia y los temas que de ella se conjugan habilitan abundantes narrativas sobre el tiempo, el cambio y la transformación, como un ejercicio de memoria que es a la vez, visionario para el presente y futuro.
El arte de Gustavo Benítez es uno de imágenes y pensamientos cuyo corazón construye una cosmogonía ficticia pero viva, palpitando en árboles, animales, minerales, aguas, personas, lunas o bólidos celestes. Motivos funcionando como portales, como espacios de penetración visual y de comprensión analítica de una realidad que requiere de verdad, coraje y resistencia para ser comprendida. Un arte interpelador, a un nivel ético, para quienes transitamos este tiempo y lugar, una obra de afectos y efectos movilizadores por y para la vida.
Sigue la doble exposición “Ecos sutiles” y “¡La vida insiste!”
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La Embajada de Brasil en Paraguay y el Instituto Guimarães Rosa (IGR) presentan la doble exposición de artes plásticas contemporáneas “Ecos sutiles” y “¡La vida insiste!”, con obras de cuatro destacadas artistas brasileñas y curaduría de Antonio Carlos Machado. Inaugurada el 11 de junio, podrá visitarse hasta el 29 de agosto, con entrada gratuita en el Espacio Cultural de la Embajada de Brasil, en Eligio Ayala casi Perú, en Asunción.
La propuesta expositiva reúne dos muestras que dialogan en torno a temas como la memoria, la transformación y la resistencia, desde perspectivas poéticas y materiales diversas. En la Sala Lívio Abramo, se presenta “¡La vida insiste!”, de Karina Amadori, una instalación que transforma la seda paranaense en metáfora de persistencia. Sus obras exploran la relación entre fragilidad y fortaleza, activando una reflexión sobre los ciclos de vida y resistencia desde lo textil y lo orgánico.
Simultáneamente, el Espacio Cultural albergará “Ecos sutiles”, una exposición colectiva que reúne trabajos de Juliane Fuganti, Bruna Mayer y Gabriela Stragliotto. Cada una aborda o território do sensível a partir de lenguajes visuales particulares: Juliane Fuganti presenta una serie de fotograbados que capturan la atmósfera de los manglares, revelando la fuerza simbólica y vital de estos ecosistemas.
Bruna Mayer incorpora su propio cuerpo en una obra performática realizada con sangre, proponiendo un diálogo entre el duelo y la creación. Gabriela Stragliotto ofrece pinturas que trazan mapas afectivos, en los que la geografía emocional se vuelve paisaje plástico. Estas dos exposiciones, inéditas en Paraguay, consolidan el compromiso del Instituto Guimarães Rosa con la difusión del arte contemporáneo brasileño y el fortalecimiento del intercambio cultural regional.