Cerro Porteño perdió y es insostenible la continuidad del técnico argentino Víctor Bernay, que venía siendo duramente cuestionado por la falta de resultados. La crisis se profundiza en el cuadro azulgrana y se impone el cambio de timón.
En contrapartida, todo el mérito para Tacuary, que se hizo merecedor de una gran victoria en coincidencia con el debut en el banquillo del entrenador Aldo Bobadilla.
Tacuary nunca perdió el orden, se plantó atrás y supo aguantar la presión. Sus defensores abortaron todos los intentos del rival y “mató” cerca del final con varios contragolpes.
El único gol fue del defensor central Marcos Cáceres, quien con golpe de cabeza facturó tras centro de Néstor Camacho.
El primer tiempo se fue en blanco. Cerro tuvo la pelota, creó chances y le faltó efectividad como en todo el juego para culminar sus tantos ataques.
Tacuary desaprovechó la oportunidad de concluir mejor los contragolpes, ya que dispuso de muchos espacios en la abierta defensa rival.
Más lanzado, Cerro apretó al inicio del segundo tiempo, siguió dominando, pero le fue imposible llegar al gol, pese a disponer de varias chances. Influyente fueron las atajadas del arquero Aldo Bareiro, quien mantuvo en cero su portería.
En medio de los nervios de Cerro Porteño cerca del final, Néstor Camacho tomó un balón, lanzó el centro al área y de cabeza facturó impecablemente el defensor Marcos Cáceres para desatar el festejo de Tacuary.