Las tareas que desempeñan y afrontan las mujeres en el hogar son varias y de mucha responsabilidad, como la atención a la familia y el cuidado de la casa. En Paraguay, el 36,8 % de los hogares tiene como jefa o cabeza del núcleo familiar a una mujer, y según la ciencia, este rol es tan demandante que afecta en su bienestar.

La psicóloga Laura Cáceres sostuvo que ser ama de casa es una ocupación que implica presión, debido al trabajo intensivo, el exceso de responsabilidad, el poco descanso y la ausencia de momentos de ocio, que se consideran causantes de estrés. A esto también se suman los conflictos y emociones propias de la esencia humana.

“Muchas mujeres reciben poco reconocimiento y esa sensación de ser ignoradas dispara el cortisol la hormona del estrés, con sentimiento de soledad y aislamiento, sensación de improductividad. Cuando el estrés es crónico ya se considera un problema debido a sus efectos destructores en el organismo, como los trastornos digestivos, dermatológicos, del sueño, disminución de las defensas que pueden generar infecciones y alergias”, explicó la profesional en conversación con La Nación/Nación Media.

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Ocuparse del cuidando de los niños y realizar las tareas domésticas es mucho más estresante. Foto: Pexels

Situación de las amas de casa

En Paraguay, la población femenina está compuesta por un total de 3.659.784, cifra que representa el 49,7 % de la población. Del total, 2.215.108 mujeres se dedican a las tareas del hogar, mientras que el 1.444.676 tienen un trabajo remunerado, de acuerdo a los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en torno a la situación de las mujeres en la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC).

Aunque muchos consideran que trabajar fuera de la casa es más demandante en comparación a quedarse al cuidado del hogar, la marca de productos de cuidado de bebés Aveeno Baby a través de una investigación que estudió a 1.500 padres, reveló que ocuparse del cuidando de los niños y realizar cotidianamente las tareas domésticas, es mucho más estresante que salir a trabajar.

“Como consecuencia del esfuerzo psíquico, la mujer puede desarrollar fatiga mental, y con ello, experimentar una disminución en su capacidad de concentración, un estado de ánimo deprimido, falta de ilusión, angustia, entre otros”, señaló. Para sobrellevar la situación, la psicóloga recomendó incorporar actividades que la hagan sentir satisfecha y cómoda, y tratar de disminuir el trabajo que realiza compartiendo esas actividades con los hijos, dependiendo de la edad de estos.

Además, consideró importante que las mujeres amas de casa eviten la autoexigencia y acepten sus propios límites. “Deben reducir las hormonas del estrés, es decir el cortisol, a través de la psicoterapia y otras actividades como el deporte o la caminata, actividades de placer y relajación, tener un sueño regular y de calidad, más una dieta equilibrada”, puntualizó Cáceres.

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