Decorar el dormitorio de los niños es también una forma de brindarles un ambiente más agradable, donde se sientan cómodos y parte del hogar, además se aprovecha mejor la utilidad de cada rincón. Desde los colores de las paredes hasta la elección de los elementos decorativos, estos son algunos consejos de LN tips para diseñar el espacio infantil.

El dormitorio es uno de los lugares donde más tiempo pasa un niño, por eso es tan importante que esas cuatro paredes se convierten en sus dominios y en una representación tangible de sus temores, ilusiones y forma de pensar. Por eso, si estás buscando crear un espacio que sea cómodo, acogedor y emocionante para tus hijos, asegúrate de incluirlos en el proceso.

Dependiendo de la edad del niño, pueden compartir preferencias sobre escritorios, temas o incluso colores. Si tus hijos comparten una habitación, incluso puedes incorporar ideas que equilibren cada una de sus perspectivas para que haya partes del espacio que realmente se sientan únicas e individuales.

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También es importante incorporar sus personajes favoritos y las formas fáciles y flexibles de hacerlo son con calcomanías de pared removibles que se puedan quitar cuando cambie de opinión o puedes comprar ropa de cama y frazadas temáticas. Cuando se trata de los colores de paredes, es mejor tratar de optar por neutrales tanto como sea posible. Esto hace que el cambio sea mucho más fácil sin quitarle la diversión.

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Uno de los principales consejos es incorporar sus personajes favoritos. Foto: Pinterest

Un espacio propicio para el descanso

Una cosa clave que los padres a menudo pasan por alto es que las habitaciones están hechas, en última instancia, para descansar. Las cosas simples pueden hacer una gran diferencia, por ejemplo es mejor comprar una cortina que vaya del piso al techo o que sea opaca para no dejar pasar la luz por completo, ya que esto ayudará con las rutinas de sueño, especialmente para los más pequeños.

Crea diferentes áreas para sus actividades preferidas porque esto puede ayudar con la autonomía, el trabajo, el juego autodirigido y la responsabilidad. Por ejemplo, crear una estación de tareas o un espacio de trabajo puede ayudar a los niños mayores a ser más responsables y concentrarse en sus tareas o proyectos escolares. Para los más pequeños, tener algunos juguetes didácticos puede ayudar a crear rutinas más sólidas alrededor de la cama o la siesta, porque estos serán parte del área para dormir.

Personalidad y comportamiento del niño

Cuando se trata de crear el dormitorio infantil perfecto, algunas cosas clave a tener en cuenta son el temperamento, la personalidad y el comportamiento de tu hijo o hija. Si tienes un niño o niña que se sobre estimula fácilmente con su entorno, es mejor incorporar colores y tonos tenues, de esa manera el espacio se siente reconfortante y seguro. Además, puede ser útil agregar objetos sensoriales, mantas relajantes u otros artículos que evoquen alegría y paz.

Por otro lado, si tienes un niño o niña más enérgico o incluso bullicioso, es posible que desees considerar un juego de dormitorio para niños de tamaño completo que tenga diferentes capas, niveles o incluso incorpore movimiento con una escalera o un tobogán. Algo como esto puede crear una oportunidad para el juego y la autorregulación, a diferencia de una cama normal que sofocará la energía y el vigor naturales del o la pequeña.

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