El director de la Fundación Paraguay Ciberseguro, Miguel Ángel Gaspar, manifestó que los comunicadores Clari Arias, Jorge Torres y el diputado por el Partido Hagamos, Carlos Rejala, fueron víctimas de una ingeniería social y suplantación de identidad, tras el ataque de desconocidos que buscaron acceder a informaciones mediante el uso de sus números de teléfonos personales.

“Lo que pasó con Jorge Torres, Clari Arias y al diputado Carlos Rejala no tiene la pinta de una clonación porque eso es una replica que implica tener el original, sino más bien esto sería un ataque de ingeniería social y suplantación de identidad, que es el nombre correcto”, mencionó mediante una comunicación con Universo 970 AM.

Gaspar apuntó a la fragilidad en cuanto a la recuperación de los números de celulares, hecho del que posiblemente fueron víctimas los periodistas y el legislador; es decir, que extraños hayan solicitado a una telefonía que les habiliten sus respectivas líneas en un nuevo chip y llegar de esa manera a la suplantación de identidad.

“La ingeniería social es el proceso que hizo que llegue hasta Torres, el pedido del código de WhatsApp que es el proceso para quedarse con sus datos. La suplantación de identidad fue el hecho de ir hasta un local y decir soy Jorge Torres, quiero cambiar de chip y que la prestadora de servicio le haya permitido eso. Nosotros ya hemos mencionado a las telefónicas que ese proceso de recuperación del chip es frágil, irrisorio y tendría que tener más medidas de seguridad que incluso la misma presentación de la cédula tendría que ser presencial o con herramientas de certificación digital, cosa que no tenemos”, mencionó.

Lea también: Periodistas y parlamentario, víctimas de un nuevo método de hackeo

Sin normativa de protección

Señaló también que actualmente el país no cuenta con una normativa que proteja a las personas en cuanto a la seguridad de sus datos digitales y abogó por la importancia. Agregó que actualmente están trabajando en una propuesta para presentar al Congreso próximamente, para ello las personas pueden acceder a la página web datospersonales.org.py y brindar sus sugerencias.

“Nosotros le dejamos de dar importancia hace muchos años y creímos que no nos iba a pasar, pero sucede. La ciber delincuencia, o la delincuencia digital es la que más nos ataca. Hay leyes como la 1682 el hábeas data, en el código penal hay una serie de leyes sueltas, pero no hay una ley de protección de datos integral que venimos peleando junto con otras instituciones en algo que se llama coalición de datos”, dijo.

Agregó que la ingeniería social es el ataque que más se lleva a cabo porque depende del desconocimiento o la vulnerabilidad del factor humano que sigue siendo la parte más delgada. “Al no haber una ley de protección de datos personales hay muchas cosas que faltan en la legislación y nos dejan desprotegidos”, sentenció.

Gaspar colocó como ejemplo la entrega de los subsidios brindados por el Gobierno donde la ciudadanía debe proveer todos sus datos personales al sistema de billetera Zimple, el cual no cuenta con una “sola línea donde hable sobre que hacen con los datos de las personas que reciben”.

También puntualizó el sistema del IPS, en el que las personas deben proveer sus datos mediante un sistema de biometría, la huella digital. “Para poder consultar se debe realizar ese proceso, en ninguno de los contratos dice qué hacen o como se tratan los datos personales”, dijo. Instó también a los trabajadores de prensa a usar otras aplicaciones digitales como el Telegram, sosteniendo que la herramienta es menos vulnerable que el WhatsApp, el Facebook o el Instagram, que forman parte de una misma empresa.

Lea también: Tuma insta a ex fiscales a presentar sus renuncias: “Ellos nunca ven nada”