El ministro del Interior, Enrique Riera, refirió que el grupo criminal autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) tenía por objetivos a diversas autoridades, empresarios y trabajadores de prensa de Canindeyú. La operación militar Cobrarius abatió al cabecilla Rubén Darío López Fernández, alias Loro, en un campamento con importantes elementos incautados.
“La información que nosotros manejábamos es que se podría lograr o intentar atentar contra jueces, fiscales, productores, periodistas y militares. El grupo criminal no pasa de 14 los miembros identificados, que tienen antigüedad”, comentó Riera en una conferencia de prensa. “Puede ser que tengan ayuda logística los que compran cosas, indígenas que le sirvan como campanas, pero que no tienen capacidad de organizar y enfrentar a nuestras fuerzas. Tenemos todavía como tarea pendiente el núcleo duro donde están Cristiano Mieres y Magna Meza”, acotó.
MAGNA MEZA PODRÍA ESTAR HERIDA
El alto funcionario de Estado agregó que no se descarta la posibilidad de que Magna Meza, una de las principales fundadoras del EPP, se encuentre herida de gravedad o haya fallecido, a consecuencia del enfrentamiento con la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) en zona de la reserva de Mbaracayú.
“No descartamos la posibilidad de que ella esté muy mal herida o que directamente falleció, pero esto se sabrá con el tiempo. Ellos no son de abandonar a sus caídos, puede ser que hayan tenido tiempo de llevarla y a Loro no, teniendo en cuenta que estaba metido en un matorral con el fin de protegerse y fue el lugar donde murió y ya no tuvieron tiempo”, dijo.
Por otra parte, el ministro ratificó el compromiso del gobierno del mandatario Santiago Peña de localizar a los secuestrados, el suboficial Edelio Morínigo y el exvicepresidente de la República, el liberal Óscar Denis. “El Estado no se cansa ni se cansará. Que sus familias sepan que nosotros no descansamos como fuerza de seguridad. Esta es una tarea de resistencia y no de velocidad”, indicó.
SEPA MÁS
Antecedentes
En mayo pasado, la FTC confirmó que el grupo criminal EPP migró al departamento de Canindeyú en busca de refugio, al verse obligados a dejar sus guaridas en las zonas Amambay y Concepción tras la pérdida de su líder Osvaldo Villalba.
La información fue confirmada mediante las evidencias encontradas tras el ataque a la Subcomisaría N.º 10 de la colonia Ybyrarovana, el pasado 3 de mayo.