En su última intervención en la VII Cumbre de la Comu­nidad de Estados Latinoa­mericanos y Caribeños (Celac), celebrada ayer en Buenos Aires, Argentina, el presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, pidió que el foro siga siendo un espacio de debate e integración y no de intromisión.

“Esta es una gran oportuni­dad para reconocer que no podemos avanzar si no forta­lecemos nuestra conciencia, nuestro sistema democrá­tico. Y valorar a la democra­cia de por sí, no contaminar los procesos de integración con nuestras visiones ideo­lógicas”, expresó Abdo.

Señaló que los debates ideo­lógicos fortalecen los proce­sos de la democracia, pero no deberían impedir construir un destino común para la región. “Que las diferencias ideológicas sirvan para enri­quecer el debate nacional y no para construir murallas que nos impidan ver de manera solidaria el futuro”, añadió.

Asimismo, puso énfasis en el objetivo inicial de la Celac que se formó en el 2010 con la finalidad de “profundizar el diálogo respetuoso”. “Me voy con esperanzas de que este foro se convierta en un espacio de debate sincero, de integración y no de intromi­sión, y que podamos hablar y buscar un camino de salida a las crisis que acechan a nues­tras democracias”, significó.

Defendió la democracia como sistema de gobierno y abogó por la construcción de un proceso integracionista. “Tenemos que construir un destino común para nues­tra región, una hoja de ruta común para conectarnos al mundo”, acotó.

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