En el décimo día de movili­zación ciudadana autoconvo­cada para repudiar la corrup­ción del Gobierno Central y la corrupción reinante que se reveló con la crisis sanita­ria, ayer la protesta se tras­ladó hasta frente al domicilio particular del presidente de la República, Mario Abdo Bení­tez. Los movilizados recla­man la salida de las principa­les autoridades del país. Del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

Con el lema “Que se vayan todos” llegaron hasta la vivienda de Abdo, que estaba fuertemente custodiada por agentes de la Policía Nacional.

Los manifestantes repudia­ron la corrupción existente, la falta de insumos médicos en los hospitales para afrontar el covid-19 y todas las enfer­medades en general. Recla­maron también conocer qué se hizo con los 1.600 millones de dólares, provenientes de un crédito internacional, por lo que ahora se vive una pro­funda crisis ante la carencia de todos los fármacos y camas hospitalarias. Cuestionan la alevosa corrupción que existe en esta administración.

Desde el viernes 5 de marzo se iniciaron las protestas frente al Congreso Nacional, pero ayer se dio un escenario diferente. Además de mani­festarse frente a la casa del mandatario, también otro grupo de ciudadanos se con­gregó frente al Ministerio de Salud. En la ocasión, los movi­lizados prendieron una vela por cada vida perdida a causa del coronavirus.

Mientras que por la capital del departamento de Ita­púa, Encarnación, ayer los jóvenes no salieron a las calles como los días anterio­res. Las exigencias y repro­ches al Gobierno lo realiza­ron a través de posteos en las redes sociales, pero las movi­lizaciones se retoman desde hoy. Desde el martes, anun­cian también cierre de rutas en el nordeste Edelira, entre todos los distritos de la zona, ruta graneros del Sur, Ruta PY08 y en Ruta PY01.