El nuevo embajador paraguayo ante el Estado de Israel, Alejandro Rubin Cymerman, ya se encuentra en ese país desde hace unos días, y afirmó que el lunes 29 de enero estará presentando las copias de su cartas credenciales ante el director de protocolo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel.

Explicó que esta acción ya le habilita a iniciar sus primeras reuniones de misión diplomática, pero deberá aguardar la audiencia convocada por el canciller Israel Katz, la que espera que se pueda dar en poco tiempo. También se refirió a cómo encontró la embajada paraguaya en Tel Aviv, la situación de Israel actualmente.

En comunicación con La Nación/Nación Media, el diplomático paraguayo informó que arribó a Israel el pasado miércoles 24 de enero siendo recibido por representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores israelí, y al día siguiente inició las primeras reuniones en la sede diplomática ubicada en Tel Aviv. Mencionó que se siente muy emocionado, honrado y agradecido por la cálida acogida y manifestó su compromiso con el desarrollo de una relación de amistad y cooperación mutua.

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Indicó que la primera actividad oficial es la reunión con el director de protocolo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, lo que le permitirá posteriormente llevar adelante otras reuniones y asistir a actividades, si bien no plena, mientras aguardar la convocatoria en audiencia del canciller israelí Israel Katz, explicando que no suele ser muy rápido, porque lo normal es juntar a unos cuantos embajadores para convocarlos por grupo. “En todas las cancillerías se hace así, pero yo estimo que con Paraguay serán un poco más flexibles y van a ser más rápidos”, comentó.

Respecto a la situación de la embajada paraguaya ubicada en Tel Aviv, el embajador Rubin explicó que el jueves fue su primer encuentro con los funcionarios, se trata de una sede diplomática pequeña, que está constituida por dos funcionarios contratados locales, además de un miembro más de la cancillería paraguaya. “Tuvimos un primer encuentro de conocimiento, donde les presenté mi planificación de lo que quiero lograr, para comenzar la misión diplomática entendida en el conjunto de lo que me toca como embajador en Israel”, señaló.

Traslado de sede diplomática

Por otra parte, señaló que está vigente el compromiso político asumido por el presidente de la República Santiago Peña, de trasladar la sede diplomática a Jerusalén, capital de Israel. Mencionó que se estableció un acuerdo entre ambos Estados, de que una vez que Israel designe a su embajador para Paraguay y reabra su sede diplomática en Asunción se estaría realizando de manera simultánea.

“Mi venida a Israel es el comienzo de un proceso para hacerlo, y prontamente esperamos que estén nombrando y enviando a un embajador a Paraguay para iniciar los procesos. Estos procesos son lentos, pero las decisiones ya están tomadas”, enfatizó.

Busca volver a la normalidad

El embajador Rubin comentó de cómo ha encontrado a Israel a su llegada, en medio de un combate constante con el grupo terrorista Hamás. Indicó que si bien, lleva muy poco tiempo aún en el país, las primeras impresiones que tuvo es que la ciudadanía está muy golpeada, por lo que pasó, y pasa con los soldados que mueren, pero sobre todo por lo ocurrido el pasado 7 de octubre.

“Fueron situaciones horribles que han calado hondo en la sociedad, hay filmaciones, y hay muchos testimonios de los que fueron secuestrados y que volvieron, son testimonios horripilantes de lo que les pasó a las mujeres, a los niños. Hablan de torturas, violaciones. Todavía hay mucha preocupación por las más de 100 personas que aún siguen secuestradas en la Franja de Gaza y que es una de las prioridades de Israel la liberación de todos ellos”, comentó.

Indicó que hace solo unas horas que llegó al país, la mayor parte de ese tiempo ya se ha dedicado a trabajar y no le ha permitido salir a recorrer la ciudad. Pero sí ya ha notado que anímicamente la ciudadanía está muy golpeada aún. Pero por otra parte, están trabajando para que la vida vuelva a la normalidad lo antes posible.

“Aquí como el Ejército es parte de una vida, hay muchos jóvenes que forman parte de la milicia, y los padres y familiares están muy afectados y preocupados todos los días. Es lo que pude sentir un poco caminando por la calle. El israelí es muy resiliente y rápidamente está buscando volver a la normalidad, se ve gente en las tiendas, shopping y restaurantes pero se siente un ambiente tenso, de no tanta felicidad. Pero por otro lado, se ve que tienen mucho compromiso como país y forman una gran familia que se ayudan entre todos”, acotó.

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