El especialista en empleos y aspirante a senador por el movimiento Honor Colorado Enrique López Arce cuestionó la falta de planificación por parte del Gobierno en la realización del Censo Nacional de Población y Vivienda 2022, que tiene como fin la recopilación de datos que permitan el desarrollo de mejores polí­ticas públicas. Agregó que el feriado nacional para el evento terminó generando una pérdida económica de 50.000.000 de dólares.

“Yo calculo entre 40.000.000 y 50.000.000 de dólares la pérdida, es un día que no se ganó como se hubiese ganado, la economía no produjo y lo más triste es la gente en un momento muy difícil, donde no hay dinero, donde la inflación está en la más alta en los últimos 20 años. Acá todos cumplimos, pero lastimosamente no se trabajó, cuesta mucho a la economía tener un día parado y no se puede más permitir eso”, dijo en comunicación con el diario La Nación/Nación Media.

Al respecto, López Arce mencionó que aproximadamente 2.200.000 paraguayos no generaron ingresos económicos por el feriado decretado el pasado miércoles 9 de noviembre por el jefe de Estado, Mario Abdo Benítez, de las 3.400.000 personas ocupadas laboralmente y que solo 600.000 ciudadanos se movilizaron para realizar el censo, o figuraban dentro de las actividades que quedaron exceptuadas de la prohibición de circulación el día del Censo Nacional.

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“Nos costó muy caro para un censo que no contó con la planificación adecuada. Esto hubiese sido serio. Muchos datos también habrán sido dibujados debido a que en algunos casos los censistas completaban de manera automática. Estamos en el siglo 21, no puede ser que los voluntarios hayan salido con un papel y lápiz, hay muchas herramientas tecnológicas”, expresó.

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Varios ciudadanos cuestionaron la falta de organización para la realización del Censo 2022 tras permanecer encerrados en sus viviendas. Foto: Roberto Zarza.

Preguntas generales impiden tener la realidad del país

Por otra parte, López Arce cuestionó el formulario realizado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) al afirmar que las consultas ciudadanas fueron muy generales y que no permitirán tener informaciones necesarias para determinar la realidad socioeconómica del Paraguay.

“Las preguntas fueron muy generales, por ejemplo en educación solo existía hasta el nivel universitario, eso me llamó la atención, ese momento se hubiese aprovechado para ver cuántos paraguayos tienen maestrías, posgrados, doctorados, qué tipos de oficios desempeñan, profesión, esto es fundamental, se necesita saber cuántos profesionales tenemos en el país en los diferentes sectores y qué nos falta. Por ejemplo, también se hubiese consultado sobre la seguridad social, si se aporta a la caja de jubilaciones, si está en la informalidad, si cobran o no salario mínimo”, lamentó.

El Censo 2022 demandó una inversión de 43 millones de dólares para el Estado. Foto: Roberto Zarza.

No es llamativa la deserción de jóvenes

Finalmente, López Arce afirmó que no fue llamativa la deserción de los jóvenes voluntarios, sosteniendo que es una característica normal para dicha etapa; esto, tras la excusa esgrimida desde el INE al señalar que el incumplimiento, principalmente en la zona de Asunción y Central, terminó afectando el proceso de recolección de datos.

“La posición de los jóvenes no fue llamativa, sino todo lo contrario, es normal. Todos los que estamos trabajando con las nuevas generaciones sabemos que tenemos que calcular siempre un porcentaje más alto de convocatoria, al limitarse a personas muy jóvenes, de 16, 17 o 18 años, es normal que exista un ausentismo del 30% o 35%”, expresó.

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