El estado delicado de salud del senador Fernando Lugo pone ahora a los parlamentarios ante una situación muy poco común, y por sobre todo delicada, teniendo en cuenta que el proceder en estos casos debe verse bajo un análisis importante, aseguró el médico de cabecera de Lugo, el también senador Jorge Querey, en comunicación con La Nación/Nación Media, al ser consultado tanto por el estado de salud de Lugo como de los pasos a seguir en el Congreso.

“Esto lo están analizando la mesa de presidentes, los dirigentes y los abogados para ver un poco cuáles son los caminos que se toman en este tipo de casos; es una situación imprevista que a nosotros nos duele mucho, pero que, por otro lado, tenemos que hacer lo correcto y vamos a ver un poco cómo se suscita eso”, comentó Querey.

El senador hizo fuerte hincapié en que nada está definido aún en el ámbito parlamentario. “Todo está en revisión con respecto a lo que corresponde hacer en este caso, porque hay que revisar el reglamento interno, hay que revisar la Constitución y sacar la mejor conclusión de eso y hacer lo que corresponde y es correcto”, enfatizó al tiempo de aclarar que él personalmente no cuenta con un caso parecido en el ámbito político.

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Es importante resaltar que parte de lo que está siendo analizado es sobre el permiso médico que se gestiona en casos de no poder participar en sesiones de la Cámara por motivos de salud, además de su goce de sueldo y la elección o no de un nuevo vicepresidente primero de la Cámara.

Dentro de la situación médica, el doctor Querey aclaró que Fernando Lugo continúa en la unidad de cuidados intensivos de manera estable en cuanto al funcionamiento orgánico y que por la parte de esfuerzo neurológico según los controles de resonancia magnética nuclear la zona de lesiones está en proceso de cicatrización, pero también existen otras zonas críticas donde no se observan lesiones, ratificando que este estado les permite tener una esperanza mayor de recuperación neurológica.

Querey también recalcó que “su nivel de vigilia, es decir, abre los ojos, se despierta entre comillas, pero aún no interactúa adecuadamente con el entorno, hay algunos signos positivos, pero todavía no son suficientes para catalogar de buena respuesta. En este escenario veremos la evolución en los próximos días y semanas, seguramente y quizás hasta meses de repente. Eso no podemos prever nosotros”.

Al ser consultado sobre su experiencia dentro del área con casos similares y la recuperación, el doctor Querey fue claro: “Hay mucha variación de casos, no es posible agarrar y hacer una predicción, es decir… el tanteo es libre, la especulación es libre, pero de ahí a afirmar un periodo de tiempo para la rehabilitación de todas sus capacidades, sea recuperación leve mediana importante, es muy difícil”, afirmó.

“Casi siempre se tiene algún grado de secuela. En el caso de los pacientes como él en general, la secuela directa suele ser en lo visual, por la zona que fue afectada, lo que pasa es que esa lesión se extendió cuando el sangrado se extendió, entonces hay que ver un poco hasta qué grado se afectó, la resonancia en este sentido nos da signos esperanzadores, pero eso no excluye que eventualmente pueda haber lesiones celulares”, afirmó Querey.

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