El arzobispo de Asunción, el cardenal Adalberto Martínez, exhortó a la clase política a respetar la institucionalidad y evitar todo tipo de violencia. Fue al referirse al juicio político a la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez que quedó en suspenso hasta el lunes 1 de agosto, cuando se reabra el debate en la Cámara de Diputados. El prelado llamó a la paz y no conducir a callejones de violencia e incluso de muerte, conforme expresó.

“Yo creo que la paz y el bien se construyen, y evitar todo tipo de violencia. Yo entiendo de que el enjuicio político es una figura constitucional y están en su derecho de convocar desde el Parlamento y también discutir sobre los libelos acusatorios”, señaló en entrevista con la 680 AM.

El arzobispo metropolitano instó al debate en el marco del respeto a las personas y a la misma institución. “Clamamos, pedimos evitar todo tipo de enfrentamiento que pueden empeorar la situación en este momento”, significó.

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Respeto a la institucionalidad

Dijo que desde la Iglesia se emite opinión en el marco del respeto a la institucionalidad de la República. “Yo creo que es importante evitar todo tipo de violencia”, insistió al recordar los episodios del Marzo Paraguayo que enlutaron a la nación paraguaya.

“Yo recuerdo que cuando el Papa Juan Pablo llegó a la Argentina en la guerra por las Malvinas con los británicos. El decía lo mismo, porque realmente la violencia genera mayor violencia. Y es un callejón sin salida y donde podemos lamentar también pérdidas de vidas humanas como ha sido el Marzo Paraguayo”, afirmó.

Así también llamó a buscar el bien común de las personas en medio de las diferencias que se puedan tener desde el punto de vista político. “Es cierto que podemos disentir políticamente, ideológicamente unos con otros, pero eso no debe llevarnos a fricciones que pueden conducirnos a estos callejones de violencia, de muerte incluso”, remarcó.

Escenario complicado

El cardenal Martínez hizo un análisis de la coyuntura política actual y consideró que el Paraguay se encuentra en un escenario complicado. “Estamos en un año electoral no fácil y creo que va a ser bastante disputado, y esperamos que siempre sea dentro del marco de querer construir el bien común del país. Y esperando y soñando por una patria soñada”, manifestó.

Mencionó que hay muchas situaciones que se deben ir ordenando para garantizar la convivencia pacífica entre paraguayos. “Hemos hablado del crimen organizado que realmente es un problema que habría que luchar regionalmente, no solamente en el país. Y a veces también podemos ser ruta de tráfico de drogas y esa ruta no comienza ni acaba en el Paraguay”, indicó.

Refirió que el crimen organizado y el narcotráfico tienen ramificaciones a nivel regional, por lo que se precisa de la colaboración de todos los países en la búsqueda de la construcción de la paz y el desbaratamiento de estos grupos que buscan sus propios bienes.

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