Atendiendo que la pandemia ya no debe ser una excusa para frenar una educación de calidad y en vista de la recomendación de la Sociedad Paraguaya de Pediatría, que sugiere al menos 2 dosis para volver a clases, ahora comienza una carrera contra el tiempo para recuperar lo perdido durante estos dos años de pandemia.

Al respecto, Luis Ramírez, psicólogo y orientador educacional, miembro del Consejo Nacional de Educación y Cultura y vicepresidente de las Instituciones privadas del Paraguay, fue invitado en el programa “Fuego Cruzado”, que se emite por canal GEN, y manifestó que de acuerdo a evaluaciones a nivel regional, pero también a nivel nacional, señalan que han sido 2 años de rezago educativo, no solo a nivel país, sino a nivel mundial.

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No obstante, señaló que en Paraguay se va a realizar este año una medición, a fin de tener con mayor certeza cuánto afectó la implementación de las clases virtuales. Pero de acuerdo a estudios y cifras oficiales de la Dirección Nacional del Primer Empleo, han confirmado que jóvenes que culminaron sus estudios entre el 2020 y 2021 tuvieron dificultades concretas en pruebas de matemáticas y desarrollo emocional a la hora de presentarse a alguna prueba para el primer empleo.

“Hay datos que podemos observar, como ejemplo, en el mundo laboral las respuestas que vienen de alumnos que terminaron el colegio en el 2020 y el 2021, hoy se ve que tienen muchas dificultades para el primer empleo. No están aprobando las pruebas de matemáticas y no pasan las pruebas de desarrollo emocional. Esos también son datos que se deben de tomar como un indicador de que la cosa no funcionó muy bien en el sistema virtual en estos dos años. Eso hay que decirlo para que la gente tenga mucha claridad, significa que un niño que entró al primer grado hizo lo que pudo, pasó al segundo grado, hizo lo que pudo y hoy está en el tercer grado y tenemos que nivelar 2 años”, explicó.

Al respecto, el profesional sostuvo que el 2022 es clave para la educación, porque se tiene que nivelar 3 años académicos para mejorar la educación. Caso contrario, el país va a estar mucho más rezagado que 2 años.

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Luis Ramírez indicó que se puede observar en el mundo laboral las respuestas que vienen de alumnos que terminaron el colegio en el 2020 y el 2021, hoy se ve que tienen muchas dificultades para el primer empleo.

Exigencia de tarjeta de vacunación

Por otra parte, Luis Ramírez recordó que ya en el 2013 se estableció la obligatoriedad de la presentación de la tarjeta de vacunación de todo niño, niña y/o adolescente a ser matriculado en escuelas y colegios. Indicó que es una resolución del MEC vigente y desconoce que se haya cambiado la normativa.

“Cualquier persona que va a comenzar un año escolar necesita de su tarjeta de vacunación para que pueda ser inscripta en los colegios. Yo creo que no se trata ahora de decir, con esta vacuna sí y con esta vacuna no, sino que es un proyecto nacional, un proyecto país, en donde la educación, que va muy ligada a la salud y sobre todo en los primeros años de vida, entendió que es fundamental mostrar la tarjeta de vacunación, porque con eso se ha salido adelante con muchas enfermedades y dificultades que podían ser superadas por esta forma”, explicó.

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Igualmente, insistió que esta no es una situación nueva, ya está legislado, e incluso, el artículo 68 de la Constitución Nacional establece que toda persona está obligada a someterse a las medidas sanitarias de una ley. Además está la Ley de las Vacunas N° 4621; así como el artículo 836 del Código Sanitario y el 128 de la Constitución Nacional que establecen que no es una decisión personal la de no vacunarse. Asimismo, indicó que existe una resolución del Ministerio de Educación en la que nos pide a los colegios que para inscribir a los alumnos exijamos la tarjeta de vacunación.

“El panorama es muy claro, ahora qué nivel de exigencia se va a tener, o si se va a exigir o no la vacuna contra el COVID, es lo que hoy está raramente para nosotros cuestionado. Porque yo creo que está demostrado que funcionan y que caso contrario, todo lo que hacemos quedará en la nada o caerá en saco roto si comienza a haber un contagio masivo entre los alumnos, las clases se verán interrumpidas de vuelta”, explicó.

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Impacto de los antivacunas

Ramírez señaló que es menos intenso el impacto de los mensajes de antivacunas en el sector privado, atendiendo que entre los asociados de colegios privados están alcanzando un 97% de población vacunada. Mientras que el nivel de no vacunados es muy bajo, y esa es una ventaja que están contando, y que permitirá tener las clases presenciales. “En ese sentido, estamos muy contentos por el alto nivel de vacunación que tenemos en los jóvenes. En cuanto a los niños y niñas comienza ahora, y vamos a ver, vamos a prepararnos con protocolos”, indicó.

Las campañas de vacunación son un proyecto nacional, un proyecto país, en donde la educación va muy ligada a la salud y sobre todo en los primeros años de vida entendió que es fundamental mostrar la tarjeta de vacunación porque con eso se ha salido adelante con muchas enfermedades. Foto: Archivo.

Al respecto, Ramírez señaló que han propuesto a los ministerios de Salud Pública y Educación la posibilidad de que los colegios sean lugares de vacunación, que los alumnos puedan vacunarse en sus escuelas y colegios. “Nosotros estamos listos para trabajar de la mano de Educación y Salud porque creemos que es la gran posibilidad de esto que tiene las dos patas que caminan juntas sin salud no hay educación. En ese razonamiento es que creeos que sí hay que vacunar a todos los niños”, insistió.

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Brecha entre público y privado

Por otra parte, Luis Ramírez manifestó que se debe seguir insistiendo con el tema de la vacunación, atendiendo que en el sector privado los adolescente y jóvenes en su mayoría ya están vacunados, pero atendiendo el bajo porcentaje de vacunación a nivel general que no llega ni al 50% de los jóvenes de entre 12 y 18 años, lo que da cuenta que existe una brecha desigual entre el sector público y privado.

“Es preocupante, porque vivimos en sociedad y teniendo en cuenta que la clave para la convivencia es ponernos de acuerdo en los elementos que nos ayudarán a convivir y es centrar para poder avanzar como país. Cómo podemos tener una sociedad que no se pone de acuerdo en cuestiones básicas, centrales para la convivencia y la educación es fundamental. No podemos seguir agrandando la brecha, la educación debe ser de calidad para todos”, indicó.

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