En la Cámara Baja del Congreso se declaró de interés nacional la iniciativa para que el gobierno de Joe Biden libere vacunas de reserva. Estados Unidos anunció que estaría distribuyendo un total de 60 millones de dosis de la vacuna AstraZeneca contra el COVID-19 que tienen en depósitos sin ser utilizadas.

La iniciativa del legislador estadounidense Raja Krishnamoorthi, que busca destinar a terceros países las vacunas contra el COVID-19 disponibles y no utilizadas por Estados Unidos, fue declarada de interés nacional por la plenaria de la Cámara Baja, a iniciativa del diputado Sebastián García (PPQ-Capital).

El documento aprobado también insta al Ministerio de Relaciones Exteriores a realizar gestiones ante el gobierno estadounidense para que Paraguay forme parte de las naciones beneficiadas con las vacunas sobrantes.

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Según comentó el diputado García, Krishnamoorthi, quien es miembro del Subcomité de Crisis de Coronavirus del Congreso de los Estados Unidos, solicitó al presidente Joe Biden que libere las millones de dosis que su país tiene de reserva como un “gesto de humanidad”, teniendo en cuenta que hay muchas personas en países carenciados que necesitan desesperadamente ser inmunizadas.

Este pedido nace además a razón de que el mecanismo Covax no proyectó las dosis necesarias para nuestro país, por lo que Paraguay mantiene un bajo índice de vacunación.

Vacunas para el mundo

Estados Unidos anunció que comenzará a distribuir el excedente de 60 millones de vacunas AstraZeneca contra el COVID-19 a países que más lo necesitan. Paraguay, como una de las naciones con la menor tasa de vacunación, podría comenzar fuertes negociaciones para volverse uno de los beneficiarios.

La Casa Blanca se siente cada vez más segura sobre el suministro de las tres vacunas que se administran en los EEUU, en particular después del reinicio de la inyección de dosis única de Johnson & Johnson durante el fin de semana.

Estados Unidos también ha estado bajo una creciente presión en las últimas semanas para compartir una mayor cantidad de su suministro de vacunas con el mundo, ya que países como India experimentan oleadas devastadoras del virus y otros luchan por acceder a las dosis necesarias para proteger a sus poblaciones más vulnerables.

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