El doctor Guillermo Sequera, director general de Vigilancia de la Salud, fue el invitado del programa “Fuego cruzado”, emitido por el canal GEN y conducido por los periodistas Augusto dos Santos y Benjamín Livieres.

Durante la entrevista, el profesional de la salud se refirió a cómo ve el futuro de la pandemia en nuestro país, las expectativas para cuando se inicie el proceso de vacunación y expresó su preocupación por el peligroso serotipo de dengue que circula actualmente.

¿Hay algo más que tengamos que saber sobre el futuro y por qué ocurre ahora una epidemia de tamaña proporción?

Nuestra civilización recuerda la más reciente pandemia de esta envergadura y que fue la gripe española. Tuvimos otras epidemias, como la del HIV en las décadas del 80 y del 90, con las que aprendimos a convivir y no las eliminamos.

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En los últimos 20 años, muchos científicos del mundo apuntaban a que esto iba a ocurrir, por la dinámica que tenemos hoy en el mundo y por la gran movilidad que tienen las personas.

A principios del 2000 tuvimos la epidemia del SARS-1, el MERS, que quedaron en algunos continentes y no llegaron hasta acá. Los grandes científicos del mundo van avisando de otro gran problema que es el climático y espero que no nos despertemos con ese problema.

Hace siete meses estábamos súper preocupados, pero más allá del cansancio, ¿qué se puede hacer frente a esto?, porque en el momento más delicado bajamos la guardia

Es muy complejo porque está el efecto fatiga, el cansancio es totalmente entendible, pero, por otro lado, algo positivo es que también vamos conociendo un poco más. La incertidumbre que teníamos en marzo o abril disminuyó bastante y eso es algo paradójico. Cuando no había casos, estábamos sin dormir, yo estaba sin dormir, tampoco digo que ahora duermo mejor, pero por lo menos duermo.

En marzo o en abril, la incertidumbre era gigantesca y hoy, por más que los números y la dinámica muestren una mortalidad en promedio de 15 a 20 personas fallecidas por día, nos parece hasta natural y dentro de todo, cuando hacemos perspectiva de los que pasaría dentro de los próximos 15 días o el próximo mes, no vemos un escenario catastrófico como veíamos en un principio.

Que este ritmo se mantenga o dure por demasiado tiempo, eso sí puede ser peligroso, pero tener ese mismo escenario de lo que ocurrió en Ecuador o en Bolivia, lo veo muy difícil, no imposible, pero cada vez más difícil que ocurra.

Guillermo Sequera, director general de Vigilancia de la Salud, analizó la situación actual de la pandemia en el país, la llegada de la vacuna y el futuro del COVID-19. Foto: Eduardo Velázquez.

¿No va a llegar la segunda ola anunciada como una cuestión mucho más enfática y mucho más potente?

Podría llegar, debería llegar la segunda ola. La gripe española tuvo más de dos olas, algunos incluso hablan de 3 o 4 y otros hablan de 5 y obviamente cada ola puede tener un tamaño diferente, puede ser mayor o menor. Pero sí, deberíamos tener una segunda ola luego de un descanso de dos a tres meses. Eso es algo que lo tienen casi todos los países.

Nosotros dentro de todo, a pesar de no ser un país grande, si nosotros disecamos esa meseta que parece tener dos bolitas y vemos por microrregiones, veremos que Concepción tuvo su primera ola, Alto Paraná con una larguísima primera ola y ahora está arrancando otra vez, Caaguazú también y Encarnación que tuvo su pico a final de año y ahora está descendiendo otra vez.

En los microterritorios sí se hablan de olas bien definidas, pero nosotros nomás vemos en conjunto una gran meseta.

Si el comportamiento social se sigue relajando, ¿cuáles podrían ser las consecuencias? y la cada vez menor autoridad política al implementar medidas públicas ¿podría variar negativamente nuestro futuro sanitario?

Olvidemos que existan autoridades e imaginemos que estamos quietos por el miedo. Para la epidemia y volvemos a salir, entonces la epidemia va a volver a circular. La palabra epidemia (epi: sobre y demia: demos, pueblo) significa las interacciones que hacemos y lo que hace la gente es lo que define el ritmo de la epidemia, no importa mucho finalmente el virus.

Importa cómo interactuamos nosotros y si en nuestras interacciones no hay control, no hay distanciamiento, no está el tapabocas, no hay lavado de manos, no está la ventilación, el virus está en la suya. La interacción es lo que más le gusta y si nuestras interacciones son sin protección, la epidemia va a tomar su fuerza como la tomó en diversos lugares en donde no se respetaron.

Foto: Eduardo Velázquez.

Vacunas

¿Cuál es el porcentaje aceptable para decir “estamos inmunizados”?

Lo ideal es que se supere el 60 al 70 por ciento. Con eso la epidemia va a dejar de crecer y va a disminuir. Vamos a tener brotes de ese grupo, que sería un tercio de los que no se vacunaron, pero no va a generar una ola epidémica. Hay que tener en cuenta que ninguna de las vacunas, excepto una que se estuvo probando, está preparada para menores de 18 años. Todas están diseñadas para mayores de 18 años.

Entonces con eso ya descartamos a un 20 a 25 por ciento de la población y nos quedamos con un 75 por ciento restante y por la tecnología que tienen las vacunas actualmente, el 100 por ciento no va a ser. Van a ser los de la población de mayores de 18 años.

En el tema de las vacunas finalmente primó el sálvese quien pueda y el resultado es que la tiene Brasil, la tiene Argentina, mientras Uruguay y Paraguay no la tienen

Los mejores alumnos de la gestión de la pandemia, Paraguay y Uruguay, estamos rezagados en el tema de la vacuna.

¿Y no fue un problema nuestro también decir “nos dejaron en la vía”? ¿por qué no reaccionamos más rápido en tratar de conseguir con Uruguay o solos en última instancia?

La verdad que es muy complejo eso y pasa mucho por lo político. Pasa mucho por la gestión política, más que interna o externa. Ser Paraguay o ser Uruguay en estas situaciones, peleando con los grandes, hacerte del diplomático no queda. Ya no importa cuánto dinero tengas para comprar la vacuna.

El precio pasa mucho más por lo político y los costos pasan por los favores políticos y las negociaciones pasan por otro nivel, que escapan a la visión que yo mismo pueda tener. Veo países que no tienen la capacidad económica que tiene Paraguay y que están consiguiendo vacunas.

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¿Cuál es tu pronóstico sobre cuándo las vacunas llegarán a Paraguay?

Tengo la seguridad de que las vacunas llegan en este trimestre y lo más probable va ser en el mes de febrero, pero no sé la fecha, eso lo maneja el ministro, pero todo el equipo está enfocado en que para febrero tengamos la vacuna. Hoy tuvimos una reunión sobre todo lo que va a ser la campaña de vacunación y toda la logística tiene que estar lista la semana que viene o la otra semana como para recibir ya el primer lote.

Tenemos que tener todo listo logísticamente desde el aeropuerto hasta el Centro Nacional de Vacunas para la distribución y todo eso con ayuda del Comando del Ejército y de diferentes sectores del Gobierno.

¿Cuánto tiempo se necesita después para alcanzar ese nivel de inmunidad para decir la cosa está controlada?

Yo creo que mucho tiempo, creo que todo el año vamos a estar con la campaña. Esta campaña de vacunación es muy atípica para todos los países, no solo para Paraguay. Porque no es la típica campaña que tenemos todas las dosis, salgamos a vacunar.

Las grandes e históricas campañas de vacunación que hizo Paraguay e hizo todo el mundo, es yo ya tengo las vacunas, tengo que vacunar a 4, 5 millones, y durante un mes o dos me dedico a vacunar. Pero para eso tenés que tener todas las vacunas.

Ahora el mundo no tiene capacidad para responder a la demanda y te da de a puchito. Entonces, tenemos que hacer un plan, que es más complejo, porque tenés que definir hasta dónde tenés que vacunar y todo el resto tiene que esperar.

Las pruebas realizadas con la vacuna Pfizer estiman que esta podría servir contra la cepa británica. Foto: AFP.

¿Qué tenemos que hacer si aparece la nueva cepa y cuál es el procedimiento al respecto?

Bueno, la epidemia tiene un ritmo de explosión en diferentes países que hace que las mutaciones sean más rápidas. Paraguay no es un lugar donde exista una mutación nueva, porque nuestra epidemia no es tan explosiva como en otros países.

Entonces, esta explosión de casos genera mutaciones que pueden condicionar el resultado de las vacunas. Nosotros estamos esperando que esta nueva cepa que se dio en el Amazona, los estudios nos confirmen que la vacuna puede servir o no, estamos pendientes. Es raro que ocurra eso, pero para cada vez que ocurran estos fenómenos.

¿Es raro que ocurra, que sirva?

No que la mutación ya modifique la respuesta de la vacuna, pero hay posibilidades. Las probabilidades son bajas, pero son las mismas probabilidades que la nueva mutación sea más letal, por ejemplo. Que es de película, que sea súper contagiosa y sea más letal.

Pero no es imposible eso, es poco probable. Lo mismo que la mutación condicione la vacunación. La mutación que ya se dio en Sudáfrica y Reino Unido, se ha notificado que la vacuna sirve para eso. Ahora estamos esperando informes de lo que ocurrió en el Amazonas.

En Brasil se habla de que circula una nueva cepa, hay muchos paraguayos que están yendo a veranear, se habla de un mayor índice de contagiosidad, aparentemente. ¿Qué riesgo corremos ante esta nueva cepa o presumimos que ya está en el país?.

¿El tapabocas es el mismo?

El tapabocas es el mismo, distanciamiento es lo mismo, a no ser que nuestros números nos muestren algo más, una disparada de casos, que lo veríamos primero en Sao Paulo, lo veríamos un poco en otros países, o ciudades más conectadas que Paraguay.

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¿Cuál sería la estrategia en caso de una emergencia a raíz de la nueva cepa? ¿Insistir con las medidas sociales de nuevo?

Si confirmamos una nueva variante, que realmente demuestre una mayor letalidad, una mayor mortalidad, seguramente vamos a tomar algunas medidas más restrictivas, eso seguro.

¿Cómo hacer para que las políticas públicas se cumplan? porque de eso depende una mayor contención de la epidemia

Totalmente, porque ya es una cuestión que pasa ya por lo político, desacato a las autoridades, las fuerzas públicas, la aplicación de muchas de ellas, la mayoría de las cosas, no es tanta la competencia del Ministerio de Salud.

Si nosotros nos damos cuenta, pero es parte de la convivencia y el costo de casos y de mortalidad que estamos teniendo, es el costo de una economía totalmente activada que muchos quieren en este país.

Pero, bueno, sin que tengamos una nueva cepa, hay números que probablemente no necesariamente el gobierno quiera tomar alguna medida restrictiva, van a caer de maduro. La gente se va a asustar con los números. Puede haber números que obliguen a la gente a estar en casa.

A partir de la llegada de la vacuna, ¿cuánto tiempo demorará el sistema de vacunación y cuánto tiempo demorarán en terminar de vacunar a las personas previstas?

Como te dije, las vacunas van a llegar de a puchos, el Covax sí tiene bastante bien descrito cuánto van a llegar en cada lote. Ellos tienen bien planificado todo eso.

¿Podrías dar números?

Se habla más en porcentajes, con Covax hay algo así como 4 millones y medio de dosis que tiene que venir y va llegar algo así como 50 mil, 60 mil dosis por lote. Y a medida que van llegando eso tiene que estar disponible para vacunar ya al día siguiente, en 24 a 48 horas, dispuestas en un lugar de vacunación.

En el 2023, y los siguientes años, ¿vamos a tener que vacunarnos de vuelta?

No sabemos, no sabemos. Es probable que sí. Pero bueno, yo tengo mis propias hipótesis y no quiero marearle a la gente.

Dengue: el serotipo más peligroso

Foto: Eduardo Velázquez.

Tampoco podemos olvidar hablar del dengue, qué combinación peligrosa dengue y COVID-19.

Sí, dengue y un serotipo que es justamente el más jodido, que es el serotipo 2, que históricamente recordarán fue en la epidemia 2012, 2013, más de 200 muertos, nunca antes tuvimos. Este año que pasó tuvimos la mayor epidemia de dengue en número de casos, pero en comparación al número de muertes y los casos positivos es relativamente bajo, 75 casos de muerte por dengue, en serotipo 4. Pero el serotipo 2 es el que más fallecidos nos dio y es el que está circulando ahora.

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¿Recordás cuántas muertes se dio por el serotipo 2?

Creo que menos de 300, pero por ahí cerca. Cuando que cada año mueren entre 20 a 25 personas por dengue, todos los años.

¿Se espera una epidemia más leve que el año pasado?

Es lo que ocurre después de tener una epidemia tan grande como la que tuvimos el año pasado, que nos olvidamos, pero tuvimos la más grande en los últimos 10 años. El año siguiente suele ser relativamente más tranquilo. No importa el serotipo que llegue a circular. Entonces, creemos nosotros que esas proyecciones no apuntan a que este año sea así.

¿Era real o irreal que el calor ayudaba con el tema del COVID-19?

¿El calor con el COVID-19? Puede ser, pero hay que entender, es cierto, al COVID-19 le gusta el ambiente frío. Pero igual te puede hacer un brote y una epidemia en el calor. Acá el fenómeno que ocurre es más conductual, humano.

Cuando hace frío estamos encerrados. Los países del norte están con calefacción, encerrados, las reuniones se hacen en lugares cerrados, no es tanto al aire libre, entonces ahí se contagia más. Por eso hay más contagios y las epidemias de virus respiratorios se dan en el invierno, por una cuestión conductual social, de encerrarnos y tolerarnos más el hacinamiento y lugares no ventilados.

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