La Policía Nacional detuvo a dos mujeres por un caso de estafa al dueño de un supermercado ubicado en Filadelfia, Chaco, ayer martes. La víctima denunció que recibió una llamada telefónica de una persona que simuló ser un proveedor; sin embargo, se estima que fue un delincuente recluido en una penitenciaría.

El hombre fue embaucado al realizar una transferencia bancaria de G. 1.100.000, luego le pidieron nuevamente G. 5.000.000, lo que le llamó la atención. Posteriormente, ante las sospechas, denunció en la Comisaría local para ser asesorado, debido a un posible caso de estafa, de acuerdo a la información policial.

El hecho fue comunicado al fiscal del caso; posteriormente, se buscó a Liz Diana Ávila Ayala, de 27 años, quien tenía el dinero en su poder y en su declaración mencionó que existía otra persona que iba a retirar más dinero, de nombre Liz Eugenia Fariña Barrios, de 52 años.

Ambas aseguraron que fueron enviadas por una persona que está recluida en el penal de Tacumbú de nombre Gustavo David Villalba. “Él fue el que le llamó a nuestra víctima. Él está recluido por un caso de hurto agravado. Uno de sus compañeros le pidió si no tenía una persona para que vaya a retirar dinero de una cooperativa y fue la hermana de Gustavo”, expresó el comisario Darío Von Brand, director policial de Boquerón, en contacto con la 1020 AM.