La directora de Registros Públicos, Lourdes González, habló de la evolución de los tres trabajadores heridos ayer miércoles a raíz de la explosión de un balón de gas dentro del edificio. Dijo que uno de ellos sigue en terapia intensiva, pero estable, mientras los demás están en observación por lesiones leves.

“Eran tres personales de una empresa externa que realiza el trabajo de mantenimiento de unos cilindros. Estos cilindros contienen gas halogenado que es un agente extintor de incendios. Es el tipo de agente extintor que se utiliza en los archivos inmobiliarios en caso de que ocurriera siniestros”, señaló a la 1080 AM.

Los matafuegos especiales están colocados en los tres pisos del edificio donde se encuentran archivados todos los títulos de propiedad, conforme detalló.

“Precisamente, cuando estaban bajando los cilindros de arriba y del data center, ingresa el personal al ascensor con uno de los cilindros. Y en ese momento aparentemente manipula -pero no es muy clara la imagen- la válvula del cilindro se activa. No es que explota, sino se activa y con un fuerte ruido descarga todo el gas”, refirió.

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El gas inundó todas las dependencias rápidamente generando pánico dentro de la institución, por lo que la directora dispuso la evacuación en forma inmediata de todas las personas.

“Por normas que tenemos ya establecidas en protocolos de seguridad se evacuó inmediatamente a todo el personal y a los usuarios del Registro, hasta tanto se constituyeran los bomberos y la gente de la FOPE”, dijo.

En cuanto al estado de las personas que resultaron lesionadas, la abogada afirmó que está realizando un seguimiento y en el caso del personal ingresado en terapia intensiva, su esposa informó que se encuentra evolucionando satisfactoriamente.

“Fue ingresada a terapia porque es una persona de tercera edad, recibió algunas quemaduras, pero más que nada las quemaduras que produce el frío del gas que lo recibió en la espalda. Y como es una persona cardíaca, se consideró la mejor forma de tenerlo bien monitoreado ingresando a terapia. Pero está bien”, afirmó.

Los otros dos funcionarios afectados presentaron “una intolerancia al gas” que se había diseminado en el edificio, que les produjo náuseas y otros malestares menores. “Es un gas que no es tóxico, pero sí produce irritaciones en los ojos, en la nariz, boca, náuseas y demás. Estas dos personas siguen internadas también en observación, los médicos quieren culminar unos chequeos para dar el alta”, subrayó.

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