Seis sujetos irrumpieron en una agencia de viajes con pasamontañas y tapabocas para robar la caja fuerte, pero no lograron el cometido. La caja de 700 kilos quedó tirada en la vereda ya que los delincuentes no pudieron abrirla y menos transportarla. El hecho ocurrió en el barrio San Roque de Asunción. La misma banda ya habría perpetrado otras sustracciones similares en comercios de la zona.
Mary Díaz, una de las propietarias del negocio, exteriorizó su indignación por el auge de la inseguridad y lamentó que a pesar de haber recurrido reiteradas veces a la comisaría jurisdiccional no pudo formalizar la denuncia por falta de insumos de la Policía.
“La verdad que es una sensación que no se puede describir cuando te llaman a la madrugada a tu casa es solamente por algo feo que pueda estar ocurriendo. Y me fui a ver, increíble, una feroz caja fuerte encontrás ahí tirada en la vereda. Una caja de 700 kilos no entendés cómo pudieron haberlo sacado hasta ahí”, señaló a la 1080 AM.
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Dijo que por fortuna los criminales “no pudieron abrir ni llevar la caja”, y todo quedó registrado en las cámaras de seguridad de la agencia. “Algo les falló porque la mitad de la caja ya estaba dentro de una furgoneta blanca. Un conocido me dice que hicieron el mismo procedimiento en su negocio, es increíble. Inclusive en este momento otra conocida me pasa el dato de la misma cosa, de la misma banda”. puntualizó.
La empresaria resaltó que todo el equipo de investigación de la Policía acudió al lugar. “Muy bien se comportó la gente de Criminalística, todo muy serio en su trabajo, me sorprendió bien”, refirió. Sin embargo, la mujer hasta ahora no pudo realizar la denuncia en la Comisaría Tercera porque primero no funcionaba el sistema informático y además el “libro está lleno”, por lo que tampoco se pudo asentarla en forma manual.
“Me dijeron que tenía que hacer la denuncia y entonces me voy y no funcionaba el sistema. Entonces, me dieron el número de teléfono, llamábamos a preguntar más tarde si había vuelto el sistema, etc. Después alguien me dijo que me podían tomar la denuncia en el libro. Me voy a la tarde otra vez, pero tampoco se pudo, porque el libro ya no tenía hojas. Ahora me estoy yendo por tercera vez”, lamentó.
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