El agente de la Policía Nacional, el suboficial inspector Benito Javier Báez Figueredo, de 39 años, fue asesinado a tiros, este domingo pasado, por un sujeto que se movilizaba en una motocicleta, a la salida de un evento deportivo en el Bañado Sur de Asunción. La víctima, que se encontraba en su día libre, había recibido amenazas de muerte tras participar en operativos que afectaron al clan Ledesma, dedicado al microtráfico.
El funcionario policial recibió tres disparos, uno en la cabeza, otro en la columna y el tercero en la pierna. Fue socorrido por su pareja en su propio vehículo hasta el Hospital de Barrio Obrero; al llegar al nosocomio, lamentablemente los médicos informaron que ya nada se podía hacer por la gravedad de sus heridas.
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En su domingo libre, Báez Figueredo estaba acompañando a su esposa para ver a otro familiar en un evento deportivo, por la noche de dicha jornada. Cuando la pareja se retiraba del lugar y se dirigía para abordar su vehículo, fue interceptada por el criminal que llegó en una motocicleta y empezó a disparar en varias ocasiones.
El suboficial participó en operativos donde fueron detenidos al menos tres miembros clave del clan Ledesma; el último procedimiento se había realizado el 9 de junio. La línea investigativa inicialmente es la de un crimen por venganza, no se descarta que con este tipo de acciones los clanes quieran enviar algún tipo de mensaje a las autoridades de manera a amedrentarlas.
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