Son nueve las personas privadas de libertad que culminaron exitosamente un diplomado en Didáctica Superior Universitaria impartido por la Universidad Autónoma del Sur. Se trata del primer grupo de reclusos ubicados en la Unidad Penitenciaria Industrial Esperanza (UPIE) que se preparan para ser docentes y poder impartir clases a sus propios compañeros.

Indicaron que la universidad tiene como propósito formar a profesionales en el área de la educación superior como docentes investigadores para emprender tareas orientadas a la gestión pedagógica aplicada en la resolución de problemas que puedan contribuir a mejorar la calidad de la docencia superior, la extensión académica y la investigación dentro del ámbito educativo. Al respecto, la rectora, Mirtha Reyes, dijo que la filosofía de la institución es el servicio a todos aquellos que están olvidados por la sociedad.

En el marco de dicho diplomado los estudiantes adquirieron diferentes competencias, como manejar conocimientos de la actividad académica en la solución de problemas educativos, generar conocimientos en el campo de las ciencias y técnicas de la educación, implementar en la práctica aquellos conocimientos que coadyuvarán a la superación de particulares académicos y generales administrativos.

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En el marco de dicho diplomado los estudiantes adquirieron diferentes competencias. Foto: Gentileza.

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Así también, proponer los conocimientos teórico-metodológicos y fundamentos que surgen de las experiencias vividas, desarrolladas y comprobadas; construir estrategias surgidas de la investigación de campo que aporten propuestas formales y viables ante posibles situaciones y circunstancias, además de otras.

Por su parte, el ministro de Justicia, Édgar Olmedo, agradeció el gesto de aportar conocimientos y educación a las personas privadas de libertad. Recordó que una de las primeras actividades en la que participó como ministro fue la habilitación de aulas universitarias en UPIE y miraba sorprendido porque tiempo atrás era poco probable la habilitación de un centro de estudios en un establecimiento penitenciario.

“Para nosotros es un privilegio contar con el apoyo de tan prestigiosa casa de estudios. Nos llena de alegría que muchos internos se estén preparando para ser docentes y que puedan impartir clases a sus propios compañeros. Bueno, hoy tenemos la primera remesa”, destacó.

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