Octubre es el mes en el que el Ministerio de Salud aúna esfuerzos para informar y alertar sobre el impacto de la obesidad en la salud, e impulsar la adopción de hábitos saludables para prevenir y controlar esta epidemia del siglo XXI.

El director de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, advierte que la obesidad se está disparando, tanto en la población adulta como también en la franja infantil. Indicaron que este año, los esfuerzos se centrarán en la obesidad infantil, en coincidencia con la temporada de los Juegos Suramericanos Odesur, que se lleva a cabo, del 1 al 15 de octubre, en Asunción.

“Desde el 2007 hasta ahora, vemos que año tras año se incrementa la proporción de escolares, (niños y adolescentes de entre 5 a 18 años) que tienen obesidad”, señaló Sequera.

De acuerdo a datos aportados por el Sistema de Vigilancia Alimentario Nutricional (SISVAN-INAN.MSPBS), en el país, el 21,6% de niños y adolescentes de 5 a 19 años tiene sobrepeso y el 13% padece de obesidad.

Así también, el epidemiólogo refirió que, inicialmente, la cifra de sobrepeso en esta franja poblacional era de 21%; esto fue incrementándose paulatinamente. Actualmente, el 34% de los niños y adolescentes presentan exceso de peso, esto es, sobrepeso y obesidad.

Por otra parte, recordó que tiempo atrás, menos del 5% de la población infantil presentaba obesidad, cifra que podría atribuirse a una disposición genética. Sin embargo, los porcentajes han rebasado de tres a cuatro veces más de lo que se registraba años atrás; hoy día, el 13% de los niños y adolescentes tienen obesidad.

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Sequera sostuvo que si no se actúa rápidamente con la adopción de hábitos saludables, niños con sobrepeso y obesidad serán los futuros enfermos crónicos, que siendo jóvenes, entre 30 a 40 años, tendrán presión alta, diabetes, padecerán de problemas renales y estarán con hemodiálisis.

Los niños con sobrepeso u obesidad tienen mayores probabilidades de seguir siendo obesos en la edad adulta y de padecer a edades más tempranas enfermedades no transmisibles como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.

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Para el médico, la obesidad está directamente relacionada con dos factores. Lo que comemos, donde se observa mayor consumo de productos ultraprocesados y menos alimentos frescos. Así cómo también, cuánto nos movemos. Nos movemos cada vez menos, lo que propicia el incremento de peso.

En este sentido, Sequera propone hacer caminatas, subir escaleras y aprovechar las frutas y verduras de estación e incluirlas en el consumo familiar diario. “Hay que empezar a cambiar hábitos para lograr un estilo de vida saludable. Tenemos que volver a poner de moda el comer alimentos frescos y moverse”, apuntó.