Las necesidades son urgentes, pero la prioridad para la población chaqueña es el agua y alimentos. Solicitan que el Gobierno reaccione ante esta situación que pone en aprieto a todo el Chaco paraguayo. Foto: Ilustrativa.
Boquerón se declara en emergencia departamental ante la sequía que azota al Chaco
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Esta semana, los cuatro distritos de Boquerón se declararon en emergencia ante la sequía que azota al Chaco paraguayo. A ellos se suman los distritos de Teniente Irala Fernández y Campo Aceval de Presidente Hayes; ahora aguardan que la Cámara de Diputados apruebe la declaración de emergencia en todo el Chaco.
El gobernador de Boquerón, Darío Medina, explicó que a la fecha los cuatro distritos: Filadelfia, Loma Plata, Mariscal Estigarribia y Boquerón, se declararon en emergencia por la sequía y necesitan de la ayuda del Gobierno Central. “El lunes la junta declaró emergencia departamental en Boquerón”, detalló en entrevista con La Nación – Nación Media.
Afirmó que están muy expectantes ante el pedido del diputado por Boquerón, Edwin Reimer, quien solicitó a la Cámara Baja la declaración de emergencia en todo el Chaco ante la crítica situación por la que están pasando cientos de familias. “El pedido es que por ley se declare emergencia por sequía no solo en Boquerón, si no que en todo el Chacho, para que las autoridades del Gobierno Central pongan los recursos para ayudar”, relató.
Según lo manifestado por Medina, la situación es sumamente crítica en la zona ya que a medida que pasan los días se van secando los reservorios de agua dulce y cada vez deben ir más lejos para acarrear agua apta para el consumo de las personas. “Se están agotando las reservas de aguas, especialmente los tajamares y pozos de agua dulce que empiezan a salinizar y se vuelve más crítica la situación”, confirmó.
Comentó que hoy estuvieron recorriendo las comunidades para saber cuáles son las necesidades por la que están pasando los pobladores de esa zona y todos refirieron que cada vez están más lejos las reservas de donde deben buscar el líquido vital. A todo esto se suma la falta de trabajo teniendo en cuenta que la mayoría trabajan en las estancias, pero ante la sequía no están contratando personal.
“En la gobernación tenemos seis camiones que van y vienen acarreando agua, pero cada vez están más lejos los lugares de abastecimiento de agua dulce y en algunos lugares estamos dependiendo de la voluntad de los ganaderos que donan de sus tajamares para no dejar sin agua a las familias necesitadas”, manifestó el gobernador.
Darío Medina, gobernador del departamento de Boquerón (Chaco). Foto: Archivo.
Por otra parte, resaltó que desde la fecha nuevamente se encuentra funcionando el acueducto administrado por la Essap en Loma Plata, lo que está ayudando a paliar esta terrible situación a la que se enfrentan las familias. “Después de casi dos meses que estuvo sin poder abastecer de agua, desde hoy llega otra vez hasta Loma Plata”, señaló.
Agregó que a parte de la emergencia de agua, las familias están necesitando alimentos para poder subsistir, ya que muchas quedaron desempleadas ante la sequía y no tienen cómo comprar los víveres. “Tenemos la necesidad de alimentos, porque en todas las comunidades que recorrimos notamos la escasez de alimentos”, lamentó.
El 60% son comunidades indígenas
Cabe destacar que Boquerón es uno de los departamentos que concentran la mayor cantidad de personas de los pueblos originarios. “El 60% de los 85 mil pobladores son de las comunidades indígenas. Son siete etnias que pueblan nuestros departamentos y necesitan de alimentos y agua en estos momentos”, manifestó.
Relató que este es el tercer año de sequía por la que pasan en el Chaco y esperan que las lluvias se adelanten pese a que octubre es el mes en el que se registran importantes lluvias. “En los últimos tres años solo llovió un tercio de lo que debería caer en las épocas de lluvias. Se necesitan kits de alimentos para distribuir y lamentablemente en las gobernaciones del Chaco nos han recortado bastante nuestros presupuestos”, mencionó.
Medina advirtió que las necesidades son urgentes, pero la prioridad para la población es el agua como alimento y también ayudar a los agricultores y ganaderos que dentro de poco se van a quedar sin abastecimiento. “Todos tienen problema de agua y lamentablemente desde este mes no estamos entregando los kits de almuerzo y cena a los alumnos de instituciones educativas, lo que empeora la situación”, apuntó.
Por último, añadió que el agua que distribuye la gobernación y las municipalidades no tienen costos, pero que también están las aguaterías privadas y la Essap que sí tienen costos para los que tienen recursos para comprar. “La Essap cobra por cargar los camiones cisternas y cobra por el flete también, pero nosotros no. Las aguaterías privadas cobran por 10 mil litros de agua aproximadamente 400.000 guaraníes”, refirió.
De momento, los pobladores del Chaco paraguayo aguardan que la Cámara de Diputados apruebe la ley que declara en emergencia por sequía a la zona y que el Gobierno pueda meter mano para ayudar a las familias. De hecho, la Secretaría de Emergencia Nacional ya cuenta con cuadrillas que están distribuyendo agua en camiones, pero también necesitan de alimentos.
Como segunda parada de la Ruta de Festivales 2025 de Sonidos de la Tierra llega “Suena Puerto Casado”, una celebración musical y cultural que hará vibrar la puerta norte al gran Chaco paraguayo. El evento tendrá lugar el sábado 21 de junio en el Coliseo Deportivo Municipal, con una programación que se extenderá durante todo el día.
Desde tempranas horas, la ciudad se transforma en un escenario vivo donde convergen el talento, la interculturalidad y comunidad en torno al seminario de orquestas juveniles de la región Chaco paraguayo, integrantes de la Red Sonidos de la Tierra. A las 8:30 iniciaron los ensayos abiertos, seguido por la apertura del Mercadito de Sonidos de la Tierra, un espacio donde feriantes locales ofrecerán artesanía, gastronomía típica y productos de la zona.
Durante la tarde, los visitantes podrán disfrutar de un circuito turístico por los atractivos históricos locales, además de participar en una acción ambiental colectiva y presenciar el tradicional desfile de los pueblos, consistente en el paso colorido de las 6 orquestas juveniles que invitarán a la población para el concierto.
El punto culminante será el concierto de la Orquesta Regional del Chaco, que comenzará a las 18:00. En escena, jóvenes músicos de las Escuelas Comunitarias de Música de la Red Sonidos de la Tierra del Chaco ofrecerán un espectáculo vibrante, que rescata la identidad sonora de la región y la proyecta al país entero. Suena Puerto Casado es mucho más que un festival: es una muestra de lo que la música puede lograr cuando se convierte en herramienta de transformación, encuentro y orgullo territorial.
Con más de 3.000 participantes inscriptos, 70 escuelas comunitarias de música activas, y un promedio de 500 personas por sede, la Ruta de Festivales se ha consolidado como una plataforma de desarrollo humano que promueve el talento musical, dinamiza la economía local, impulsa el turismo y fortalece la identidad cultural paraguaya.
Uno de los grandes valores de esta propuesta es la creación de ensambles musicales formados por jóvenes de diferentes ciudades, que se reúnen para compartir partituras, talentos y emociones, construyendo juntos una obra colectiva que trasciende fronteras locales.
Cada festival de la Ruta 2025 se convierte en una celebración única del territorio y su identidad:
31 de mayo – #Suena Villa Elisa: Una fusión cultural que refleja el espíritu diverso de una ciudad construida sobre la convivencia de inmigrantes.
21 de junio – #Suena Puerto Casado: Una expedición musical al Chaco paraguayo, histórico portal de Alto Paraguay, con paisajes, memorias y sonidos únicos.
19 de julio – #Suena Tacuatí: Un homenaje al norte fértil del país y a la riqueza cultural y agrícola que define a esta región.
5 de agosto – Lanzamiento Festival Nacional: Presentación oficial del evento cumbre de la Ruta, que reunirá a más de 70 orquestas de todo el país.
16 y 17 de agosto – #Suena San Juan: Festival Nacional de Guitarras – Mangoré para el Mundo, inspirado en el legado de Agustín Barrios y el protagonismo de la guitarra como símbolo de la música paraguaya.
29 de septiembre – #Suena Atyrá: Una invitación a descubrir la cultura viva de la ciudad más limpia del Paraguay, reconocida por su organización comunitaria y vocación ambiental.
El Colectivo Artístico Incesante presentará el jueves 26 y viernes 27 de junio en el Teatro de las Américas del CCPA (José Berges 297 entre Brasil y Estados Unidos) el espectáculo “Cuerpos de agua”, una propuesta emergente en danza contemporánea liderada por Aramí Cañete, Fátima Galeano y Micaela Martínez.
En esta obra, las intérpretes exploran la conexión entre la memoria corporal y la crisis hídrica, reflejando cómo los cuerpos, al igual que el agua, se transforman y se adaptan a su entorno. A través de la danza, el colectivo debate la relación entre el cuerpo y su entorno, reflexionando sobre la crisis hídrica y la necesidad de sensibilizar sobre la importancia del agua como elemento esencial para la vida.
Bajo la dirección artística de Fabián da Silva, la obra propone un diálogo entre movimiento y diseño escénico, generando una experiencia visual y sensorial que evoca la fluidez del agua y su capacidad de transformación. El costo de las entradas es de G. 80.000. Informes en el 0971 513-030.
El juez Carlos Lezcano rechazó reducir la condena a los hermanos José Rosa y Carlos Leonor Vera Medina, condenados a 6 años de cárcel en el marco del cuádruple homicidio registrado en la estancia Taguató de Mariscal Estigarribia, Chaco. Foto: Archivo
Asesinato en Taguató: rechazan reducción de pena de hermanos condenados
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El juez de ejecución penal de Filadelfia, Chaco, Carlos Alberto Lezcano, rechazó reducir la condena a los hermanos José Rosa y Carlos Leonor Vera Medina, quienes fueron condenados a 6 años de pena privativa por los hechos punibles de abigeato y robo agravado en el marco del suceso del cuádruple homicidio registrado en la estancia Taguató, de Mariscal Estigarribia, Chaco, donde fueron asesinados dos adultos y dos niños.
Por su parte, la querella adhesiva representada por el abogado José Dos Santos se opuso al pedido de la defensa de los condenados argumentando que “ el pedido de redención formulado por los condenados no corresponde debido a que no se tienen datos certeros y carecen de credibilidad, debido a que se observa que todas las planillas han sido confeccionadas en un mismo momento, además llama la atención que la hora de entrada y salida en todas las planillas son las mismas, lo cual resulta imposible, por ejemplo no se registra hora para salida de almuerzo según la planilla”, indicó la querella.
El magistrado Lezcano señaló que “conforme al análisis de la cuestión planteada, esta judicatura constata que no existen méritos que solventen con convicción el otorgamiento de la redención a favor de los condenados, por lo que se resuelve no hacer lugar al incidente de redención con costas a la perdidosa”, refiere el argumento del juez de ejecución.
Condena
La Justicia condenó a 30 años de cárcel más10 años de medidas de seguridad totalizando 40 años de pena de privativa de libertad a Vicente Ramírez y su esposa Elizabeth Duarte Villalba, acusados por el cuádruple homicidio registrado en la estancia Taguató de Mariscal Estigarribia, departamento de Boquerón.
Asimismo, el colegiado condenó a 12 años y 6 meses de cárcel a Cesáreo González, tras ser encontrado culpable por el delito de abigeato y producción de documentos no auténticos. Mientras que los hermanos José Rosa y Carlos Leonor Vera Medina fueron condenados a 6 años de pena privativa por los hechos punibles de abigeato y robo agravado. Por su parte, el abogado Ricardo Ramírez fue condenado a 5 años de cárcel por abigeato.
En el crimen fallecieron Alcibiades Ayala Coronel, su esposa Francisca Nidia Núñez y sus dos nietos pequeños. El homicidio ocurrió en julio del 2019 en la citada localidad chaqueña. El agente fiscal, Andrés Arriola, acusó a los procesados por homicidio doloso, abigeato, robo agravado, hurto especialmente grave, asociación criminal, producción de documentos no auténticos y reducción.
El protocolo de paz fue firmado en la Casa Rosada de Buenos Aires y llevó la rúbrica de los cancilleres de Paraguay y de Bolivia, Luis Alberto Riart y Tomás Elío
El Chaco, el territorio que une y separa a dos países
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Jimmi Peralta
Fotos: Gentileza/Archivo
El 12 de junio de 1935 fue firmado en Buenos Aires el protocolo de paz que dio por terminadas las acciones bélicas que enfrentaron a Paraguay y Bolivia desde 1932. Los historiadores Erasmo González y Herib Caballero Campos cuentan los pormenores de las arduas negociaciones y el contexto en el que se desarrolló el conflicto entre ambos países por la posesión del Chaco Boreal.
Luis Alberto Riart y Tomás Elío, cancilleres de Paraguay y de Bolivia, respectivamente, fueron los encargados de refrendar el documento para poner fin a las hostilidades entre ambas naciones mediterráneas, que se disputaron una salida fluvial al mar y sufrieron la falta del vital líquido durante varios tramos de la contienda, lo que infligió múltiples sufrimientos además de los propios de toda guerra.
A 90 años del histórico acuerdo, se celebra la hermandad entre pueblos que, si bien tienen amplias fronteras en común, en gran parte siguen separados por el gran territorio chaqueño.
ANTECEDENTES
La guerra del Pacífico (1879-1884) cercenó territorialmente a Bolivia y lo despojó de 120.000 km2 de superficie y 400 km de litoral marítimo. Este fue un momento clave que provocó que el Chaco paraguayo entrara en los planes estratégicos del país del altiplano.
En Bolivia, con la pérdida de su costa sobre el océano Pacífico en la guerra que tuvo contra Chile, desplazaron hombres para irrumpir en el Chaco fundando fortines, al tiempo que los tratados se realizaban, pero no se solucionaron las diferencias territoriales.
“Las incursiones generaron tensiones al punto de que en febrero de 1927 es muerto en el fortín Sorpresa el teniente paraguayo Adolfo Rojas Silva. A partir de ese episodio el conflicto contra Bolivia se desarrolló en un ambiente en el que amplios sectores de la ciudadanía paraguaya reclamaban mayor presencia del Estado paraguayo en el Chaco. Desde el llamado a la movilización en diciembre de 1928 luego del ataque de tropas paraguayas al fortín Vanguardia, donde los bolivianos fueron desalojados, la crisis diplomática afloró con la expulsión de sus respectivos representantes diplomáticos que cumplían funciones en ambos países”, explica Erasmo González, doctor en historia.
El 23 de octubre de 1931, registrado como un ícono del reclamo ciudadano por la protección del Chaco, quedó en la memoria por la masacre de manifestantes estudiantiles en los jardines del Palacio de Gobierno, que estaba ocupado entonces por el presidente José P. Guggiari.
SIGILO
“Lo sucesivos gobiernos paraguayos venían realizando una prudente campaña de reforzar y dotar de mayor armamento al Ejército, que se inició con las reformas realizadas por el presidente Eligio Ayala. Durante su gobierno se mandaron comprar armas e incluso las dos cañoneras adquiridas de Italia: El Paraguay y el Humaitá”, indica González.
“En los últimos años han sido varias las investigaciones históricas académicas que han permitido comprender el esfuerzo del Estado paraguayo para armar al país. Efectivamente, sin un préstamo internacional se pudo comprar armamento moderno y capacitar a los jefes y oficiales para enfrentar el conflicto a partir de los planes consensuados entre el Gobierno y los jefes del Ejército en agosto de 1924”, explica, por su parte, el historiador Herib Caballero Campos.
A pesar de estos esfuerzos, en comparación con el despliegue boliviano Paraguay se encontró con una preparación un tanto menor en efectivos y en armamento para el inicio de las hostilidades.
EL AGUA Y EL GUARANÍ
“La contienda se inició con la toma boliviana en Pitiantuta, casi al mismo tiempo en que el doctor Eusebio Ayala asumía la Presidencia. Era una etapa difícil e incierta, pero el presidente tuvo el tino de apostar por José Félix Estigarribia para el mando del Ejército. La estrategia del comando paraguayo de llevar la guerra al interior de la región chaqueña fue fundamental. Los bolivianos incursionaron en un territorio adverso por las condiciones naturales del territorio, alejados de donde existía agua; además, considerablemente lejos de su puesto logístico”, refiere González.
“La utilización del idioma guaraní por orden general del comandante Estigarribia fue estratégica para comunicarse y despistar a los enemigos con códigos que los jefes oficiales y los soldados paraguayos podían entender. Además, servía para identificarse entre paraguayos si se encontraban en un lugar determinado, evitando confusiones que podían llevar al enfrentamiento entre los mismos”, agregó.
UNIDAD Y ESTABILIDAD
La primera mitad del siglo XX en Paraguay se caracterizó por un sinfín de tragedias internas a consecuencia de la inestabilidad política con revoluciones, golpes de Estado, exilios, atropellos, proscripciones y muerte. La hegemonía liberal había arrancado en 1904, pero tanto los conflictos dentro del propio partido de gobierno como las confrontaciones con la oposición impedían el desarrollo de un proyecto nacional.
“En el contexto de la guerra se había generado una tregua política. Según se estableció por leyes aprobadas por el Congreso, se reprimió a los sectores socialistas y comunistas que eran antiguerreristas, pues consideraban que la guerra del Chaco era una guerra imperialista. Asimismo, importantes jefes políticos de los dos partidos tradicionales se movilizaron o apoyaron al gobierno de Eusebio Ayala”, señala Caballero Campos.
“El territorio chaqueño no conoció diferencias políticas entre los combatientes paraguayos. Diferentes sectores de la sociedad acudieron al llamado: campesinos, obreros, estudiantes y con ellos artistas, poetas, intelectuales, choferes, deportistas, enfermeras y médicos. Con ese esfuerzo mancomunado se pudo sobrellevar la guerra con el acompañamiento de las mujeres, que realizaron diferentes actividades tanto en retaguardia como en el frente. Se destaca la labor de las madrinas de guerra como apoyo emocional para el soldado combatiente”, explica González.
A renglón seguido, destacó la unidad que se logró en el Paraguay durante la guerra a pesar de las diferencias que lo separaban anteriormente.
Erasmo González, historiador
“En general hubo un gran acompañamiento. Las personas hacían donaciones para las viudas y huérfanos de guerra; la Legión Civil Extranjera, conformada por miembros del comercio y la industria que eran de origen extranjero, colaboró con varias acciones para paliar las necesidades más urgentes. La Junta Nacional de Aprovisionamiento era una entidad gestionada por el Estado con fuerte colaboración de sectores privados, que proveían los alimentos básicos a las familias de los soldados combatientes que no tenían otros recursos para subsistir. La Cruz Roja Paraguaya, liderada por el Dr. Andrés Barbero, donó un avión ambulancia, así como también realizaron varias actividades para recaudar fondos, como el partido de fútbol en Buenos Aires en el que jugó Arsenio Erico, que finalmente fue fichado por el Independiente de Avellaneda”, citó Caballero Campos.
El esfuerzo de la guerra insumía ingentes recursos humanos y materiales, por lo que el armisticio fue celebrado en ambos bandos
VÍA DIPLOMÁTICA
En el contexto de una guerra con fuertes bajas para ambos bandos, la vía diplomática no estuvo clausurada. Esto a pesar de que Paraguay fue sancionado por la Sociedad de Naciones (antecedente de las Naciones Unidas) por haber sido declarado país agresor.
“El grupo mediador liderado por el gobierno argentino del general Juan B. Justo fue el impulsor de abrir una negociación con el apoyo de los demás gobiernos de la región, pero el último actor clave en sumarse y muy necesario fue el gobierno del Brasil, cuyo presidente Getulio Vargas visitó Buenos Aires en mayo de 1935, dando su acuerdo para que se impulse un alto al fuego en el infierno verde del Chaco”, comenta Caballero.
“De una posición defensiva en los primeros meses del conflicto, Paraguay pasó a la ofensiva en 1934 logrando recuperar territorios que los bolivianos fueron ocupando. Para 1935 ya había cruzado el río Parapití. Sin embargo, no debemos olvidar que todo esto significó sacrificios humanos de padecimientos por sed, pestes, heridas, traumas emocionales, muerte y angustia por la distancia de los seres queridos. Para 1935 los recursos se extremaron. Cada día de combate representaba un gran costo para el país, por lo que la gestión diplomática también fue ardua”, apunta González.
En este sentido, fue destacado el rol del canciller argentino Carlos Saavedra Lamas en el contexto de las negociaciones diplomáticas, quien fue reconocido con el Premio Nobel de la Paz en 1936 por su mediación en este conflicto y por haber inspirado un tratado antibélico que lleva su nombre.
RUMBO AL PROTOCOLO DE PAZ
“Las negociaciones comenzaron en mayo de 1935. Primeramente, el grupo mediador se reunía con cada canciller por separado. El Paraguay desde un principio estaba conteste en general con los términos del documento propuesto por los mediadores, pero Bolivia pretendía esperar el resultado de su contraofensiva, que fue detenida exitosamente por el Ejército paraguayo en la batalla de Ingavi, el 8 de junio de 1935. En ese sentido, ya el 11 se anunciaba en los medios de prensa asuncenos que se había acordado entre los países un alto al fuego, pero se estaban aún ultimando los detalles del documento final”, explica Caballero Campos.
De su parte, González subraya que el protocolo se firmó en un momento en el que ya no se podía continuar con la guerra por la dificultad para obtener recursos y el agotamiento de los combatientes. Por ello, de alguna forma la firma del protocolo de paz del 12 de junio era el camino obligatorio.
“Ya en los últimos meses de la guerra, el cansancio, la hostilidad de la naturaleza en el alto Chaco, el revés en las estribaciones andinas hicieron que la mayoría de la tropa paraguaya ya se encuentre agotada y agobiada, según se puede deducir de varios testimonios. Además, las arcas del Estado paraguayo ya estaban exhaustas luego de casi tres años de guerra. Por ello, el alto al fuego al mediodía del 14 de junio de 1935 (día en que se festeja la Paz del Chaco en Bolivia) fue celebrado por todos los combatientes, pues era algo que se anhelaba en ambos ejércitos ”, agrega Caballero Campos.
Herib Caballero Campos, historiador
En agosto de 1935 se realizó el desfile de la victoria en Asunción, pero el país estaba con una economía extenuada, con la producción mayormente a cargo de ancianos, niños y mujeres. Todo esto fue terreno fértil para que afloren de nuevo las desavenencias, los golpes de Estado, revoluciones, persecuciones e inestabilidad política.
ACUERDO FINAL
El Tratado de Paz, Amistad y Límites definitivo se rubricó el 21 de julio de 1938. El documento final fue firmado por Cecilio Báez y José Félix Estigarribia por Paraguay, y Eduardo Díez de Medina y Enrique Finot por Bolivia. El acuerdo fue refrendado por un referéndum, que se realizó el 15 de agosto de ese año y tuvo una aprobación del 91 %.
En octubre de 1938, en cumplimiento de una de las cláusulas del tratado, se abrió una Comisión Mixta Demarcadora de Límites para señalizar la frontera en el terreno, que dio por concluidas sus tareas en 2007.
Por ello, recién en abril de 2009, con firma de Evo Morales por Bolivia y de Fernando Lugo por Paraguay, se oficializó el acta de cumplimiento y ejecución del mencionado tratado.
BARRERA
A poco de cumplirse el centenario de esta epopeya, la más grande del siglo pasado en el continente, que dejó cerca de 100.000 bajas, el vínculo entre ambos países sigue en parte separado por aquel territorio hostil.
“Evidentemente el Chaco hasta hoy en día es una barrera para que se dé ese relacionamiento más cercano entre bolivianos y paraguayos. Hoy la ruta Bioceánica es una oportunidad para mejorar esa integración, pero el Chaco aún hoy es un territorio despoblado, con muchas carencias y una necesidad de recibir políticas públicas que aseguren la educación, la salud y la movilidad a las poblaciones chaqueñas, tanto originarias como a las demás que habitan dicho territorio”, concluyó Caballero Campos.