La pequeña tiene 3 kilos y mama bien. Están esperando los resultados de un análisis de laboratorio para determinar cuándo sale de alta. Foto: Gentileza.
Niña nacida en patrullera y su madre están bien de salud, según el abuelo
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Don Flaminio Aguilera es el papá de Olga, la joven de 19 años que dio a luz el domingo de madrugada en un móvil de la Policía Nacional, de la Comisaría 25 Central de Ytororó,camino al Hospital Distrital de Ñemby. Tanto la pequeña Rosa Inés como su madre Olga se encuentran bien de salud. La recién nacida tiene 3 kilos, según se informó. “Todo tranquilo, las dos están bien, según las licenciadas”, refirió el entrevistado en conversación con La Nación-Nación Media.
“Gracias a Dios está bien. Estoy esperando en el laboratorio el resultado de su análisis para saber si ya le dan de alta. Lo único es que tiene un tema de la sangre, ‘huguy mbarete’, tiene un poco más de sangre de la que necesita. Pero eso no es problema, según el médico, con medicamentos van a solucionar”, expresó el abuelo de Rosa Inés.
Si bien la familia es trabajadora, es bastante humilde y numerosa, por lo que apelan a la ciudadanía de buen corazón para colaborar con ellos. El número es (0972) 633-934, de don Flaminio, y está habilitado para la gente que quiera ayudar con algunos insumos para la criatura y la mamá.
En cuanto a lo que la ciudadanía pueda colaborar, expresó que todo es bienvenido, pañal, leche, ropas. “Lo que la gente de buen corazón pueda donar nos va a ayudar mucho. Actualmente estamos en Ypané, barrio Vy’a Renda“, resaltó.
Los agentes de la comisaría 25 Central Ytororó visitaron en el hospital a la pequeña y a su madre, donde le llevaron regalos. Foto: Gentileza.
Don Flaminio dijo que vino hace poco de San Pedro de Ycuamandyyú y que si bien él se dedica a la construcción y parte de herrería, actualmente le vendría bastante bien conseguir trabajos particulares, ya que él no trabaja con ninguna empresa.
“Estoy en la construcción, hago rejas, ese es mi trabajo actualmente. Trabajo de manera particular, tengo mis herramientas y puedo ir a la casa de la gente que necesite, de acuerdo a la conversación que tengamos”, aseguró.
Infanticidio en Amambay: investigan a indígena de 15 años que habría asesinado a su bebé
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Este martes, desde la Policía Nacional informaron que iniciaron las investigaciones tras el hallazgo del cadáver de un bebé de ocho meses en un pastizal en zona de una comunidad indígena de Capitán Bado, departamento de Amambay. Todo apunta a que la madre de la pequeña, una adolescente de 15 años, fue quien acabó con su vida y luego arrojó el cuerpo.
Según el comisario Francisco López, el hallazgo se produjo durante la noche de ayer lunes, por pobladores de la comunidad indígena, quienes dieron aviso a las autoridades. Teniendo en cuenta a que se encuentran a unos 160 kilómetros de la ciudad, la Policía llegó al sitio esta madrugada y se encontraron con el cuerpo de la bebé de ocho meses, que presentaba una herida a la altura del mentón.
Tras realizar una serie de preguntas a los pobladores, pudieron constatar que la beba era de una adolescente indígena de 15 años, que fue detenida y puesta a disposición del Ministerio Público. “No pudimos hablar con la madre sobre el hecho, porque parecía que no entendía lo que estaba pasando”, detalló el comisario, en entrevista con la 1.000 AM.
Resaltó que aparentemente la bebé estaba llorando mucho y eso disgustó a la madre, que decidió tomarla del cuello con mucha fuerza provocando su muerte. La médica forense Eliana Oliveira, confirmó que la menor llevaba 18 horas de fallecida. “Le apretó el cuello y murió por asfixia”, detalló López.
La bebé sería la segunda hija de la adolescente, esta última permanece en la sede policial de Pedro Juan Caballero. Hasta el momento la madre no fue imputada y la fiscal que lleva el caso trabajará con un organismo de protección de la infancia, teniendo en cuenta que se trata de una niña madre.
Detienen al dueño del arma que fue manipulada por una niña y que falleció en Paraguarí
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Este sábado, la Policía Nacional detuvo al propietario del arma de fuego que se disparó accidentalmente mientras era manipulada por una niña de 10 años, en el departamento de Paraguarí. La menor falleció anoche mientras estaba internada en el Hospital Nacional de Itauguá.
El hecho se reportó durante la jornada de ayer viernes, en la compañía Mbatoví, del citado departamento. La fiscal Milena Basualdo explicó que la niña que estaba en la casa de sus tíos realizando sus tareas en compañía de sus primos y, aparentemente, necesitaba un lápiz para seguir desarrollando sus actividades, por lo que fue hasta el escritorio donde estaba guardada el arma de fuego.
Cuando se encontró con el arma, la menor decidió tomarla en manos y se salió el disparo. Sus tíos escucharon el disparo y rápidamente llamaron a los bomberos, que la auxiliaron hasta el Hospital Regional de Paraguarí, donde recibió las primeras atenciones, pero debido a la gravedad del caso fue trasladada hasta el Hospital Nacional donde, estuvo internada por varias horas y finalmente se constató su deceso.
La fiscal ordenó la detención de Iván Guillermo Paredes Davalos, de 64 años, militar jubilado, que sería el propietario del arma de fuego del cual salió el disparo que terminó matando a la niña de solo 10 años. El hombre sería tío de la víctima y permanece recluido en la comisaría primera de Paraguarí.
Basualdo explicó que el militar se expone a una imputación por el supuesto hecho de violación del deber del cuidado. La misma ordenó que el cuerpo de la pequeña sea sometido a una autopsia y luego será entregado a sus familiares.
Accidente milagroso: nena china cayó desde el piso 25 y vive para contarlo
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Medios de todo el mundo se hicieron eco de la noticia del accidente milagroso ocurrido en un bloque de viviendas de Tangshan, China, donde una pequeña de apenas 9 años cayó desde su apartamento del piso 25 y logró sobrevivir. Cuando los testigos esperaban lo peor, los paramédicos sorprendieron a todos al informar que la menor solo había sufrido fracturas óseas.
Según publicó el South China Morning Post, el hecho aconteció en el mes de marzo, “cuando la niña, que se encontraba sola en su habitación, decidió abrir la ventana porque tenía calor, pero la estructura de la ventana estaba suelta y esto provocó que cayera 18 pisos, hasta una plataforma que se encontraba en el séptimo piso".
El reporte indica que un vecino del séptimo piso oyó un fuerte ruido y al acudir para ver qué sucedía vio a la niña tendida en la plataforma, entonces inmediatamente alertó a la administración del edificio.
“A pesar de la caída, la niña permaneció consciente e incluso logró caminar unos pasos antes de caer al suelo con dolor", relató.
En tanto ocurría el accidente, la madre se encontraba en el trabajo, donde recibió una llamada de su esposo, quien dijo que su hija había desaparecido. Comenzaron a llamar a familiares y amigos para indagar si la habían visto cuando de pronto el administrador del edificio los llamó para avisarles de lo sucedido.
Insólito
El relato de un amigo de la madre, que colaboró en la búsqueda, causó gran impacto cuando contó que “cuando la encontramos […] tenía mucha sangre alrededor de la boca y las orejas. Tenía los ojos hinchados por coágulos de sangre, pero estaba consciente“.
En esas condiciones, las primeras palabras de la nena fueron: "Mamá, sálvame“, narró.
La familia trasladó de urgencia a la accidentada al Hospital Infantil de Pekín, donde le diagnosticaron fracturas en los brazos, el arco superciliar y la vértebra torácica, pero no había rastros de lesiones cerebrales por lo que fue operada y recibió el alta 10 días después.
Las autoridades aún reciben ciertas informaciones sobre el caso, pero no sugieren indicios de lo que pudo haber ocurrido con la niña de Emboscada. Foto: Archivo
Pasaron cinco años del día que conmocionó al Paraguay, cuando las autoridades confirmaron la desaparición de Yuyu o la niña de Emboscada, en el departamento de Cordillera.
Hasta la fecha, la Policía Nacional y el Ministerio Público siguen con la investigación, pero sin rastros de lo que ocurrió con la niña, que desafortunadamente sigue con paradero desconocido. La ciudadanía hasta la fecha se pregunta ¿dónde está Yuyu?
El 15 de abril del 2020 se confirmaba la desaparición de la niña de siete años en la localidad Isla Alta de la ciudad de Emboscada. La pequeña logró que la ciudadanía le tome cariño y exija que aparezca rápidamente. Sin embargo, su madre Lilian Zapata y su padrastro Reiner Oberuber tomaron distancia y se llamaron a silencio desde el primer día.
Según datos recabados durante la investigación, la niña de Emboscada fue vista por última vez jugando con los animales en la propiedad donde vivía bajo el resguardo de su madre y padrastro. Desde aquel momento no se supo nada de ella. Pese a las intensas búsquedas realizadas por las autoridades, Yuyu pasó a ser víctima de un hecho punible aún no resuelto.
Una vez que la Policía y Fiscalía tomó intervención en el caso comenzaron a realizar un rastrillaje en la zona y pudieron deducir que la menor no salió de la propiedad. También se utilizaron drones, perros buscadores, pero todo fue sin resultado positivo. Yuyu no aparecía y la posibilidad de dar con ella iba disminuyendo con el paso de las horas.
Las primeras evidencias encontradas fueron pedazos de tela, luego hallaron manchas de sangre. Esta última pista hizo que aumentarán las sospechas de que algo malo le pasó a la niña, sin embargo, hasta el momento no se pudo probar nada.
La casa de Emboscada donde fue vista por última vez Yuyu. Foto: Archivo
Su madre se negó a pruebas de ADN
La persona que la tenía en custodia y que debía protegerla, su madre Lilian, se llamó a silencio y se negó a pruebas de ADN tras encontrarse rastros de sangre en la zona. Los investigadores le solicitaron una muestra y su negativa llamó la atención, no solamente de las autoridades, sino de toda la ciudadanía.
“Las investigaciones por parte de la Policía fueron cubiertas ampliamente, en lo que respecta a las labores periciales, criminológicas y a las búsquedas. Una de las “pruebas madre” que solicitamos en su momento no fue realizada, el análisis genético de las muestras que se levantaron del lugar de la desaparición”, afirmó el subcomisario David Delgado, del departamento de Homicidios, en entrevista con La Nación/Nación Media.
Resaltó que ese pedido fue a la señora Zapata, quien debía ceder el material biológico, pero que no lo hizo y truncó parte de la investigación. “Si se realizaba el análisis genético la historia iba a ser diferente, pero ya escapa a nuestra funciones esa situación”, expresó.
El caso de Yuyu conmocionó al país. Foto: Archivo
Las investigaciones
Pasaron cinco años y las investigaciones siguen, pese a que los años han hecho que este caso sea más difícil de dilucidar. Hasta la fecha continuan las interrogantes y las autoridades aún reciben ciertas informaciones sobre el caso, pero estas no sugieren indicios de lo que pudo haber ocurrido con la niña de Emboscada.
“Fueron tareas investigativas de meses en horarios continuos. Lo último fue la denuncia realizada por la madre sobre un video que fue viralizado, se realizó el análisis del mismo y carece de elementos técnicos para lograr una trazabilidad e identificación científica. Hasta ahora hay informaciones nuevas y si tienen sustentos o coherencias se verifican”, detalló Delgado.
Indicó que desde el departamento de Homicidios se tomó intervención en el caso una semana después de la desaparición y precisó que se hicieron sugerencias investigativas, como reconstrucción del hecho, entrevistas, análisis del lugar, levantamientos de evidencias, pero sin resultado.
Datos clave
Lilian Zapata cumple su sentencia de seis años de prisión por abandono y violación del deber del cuidado y otros dos años con la suspensión de la ejecución de la pena por desacato a una orden judicial.
Contra Reiner Oberuber se abrió un proceso por supuesta pornografía infantil y finalmente quedó absuelto de culpa y pena.
El abogado Max Narváez confirmó que para julio de este año la madre de Yuyu debería recibir libertad condicional.
Las autoridades realizaron búsqueda por cuadrantes. Foto: Archivo