Una importante cantidad de peregrinantes ya se puede visualizar a estas horas de la noche en las principales entradas a la ciudad de Caacupé. La fila de personas que van llegando a saludar a la Virgen por su aniversario se observa desde la ciudad de Ypacaraí, pero al alcanzar el Kurusu Peregrino los números aumentan considerablemente.
Personas de todas las edades se acercan a cumplir su promesa; en conversación con el equipo de La Nación muchos coincidieron en que aprovechan este año porque el 2020 debido a las restricciones sanitarias impuestas a causa del coronavirus se suspendieron todas las actividades en homenaje a la Virgen, por lo que se vieron obligados a quedarse en sus casas y desde ahí dar las gracias a la madre santa.
Lo que llama la atención es que a pesar de las constantes recomendaciones del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS) y las autoridades sanitarias, muchos padres de familia decidieron llegar acompañados de sus hijos, aunque eso implique exponer a los niños al contagio del COVID-19, esto considerando que a pesar de que en Paraguay hubo una reducción considerable de contagiados y de fallecidos, el virus sigue propagándose en la sociedad.
Puestos de salud y reposición de agua
En el trayecto entre Ypacaraí y Caacupé se pueden ver varios puestos de salud donde los peregrinantes pueden acercarse ante cualquier molestia que pudiera presentarse. Profesionales médicos están más que listos para recibirlos y brindarles la atención necesaria para que puedan seguir su camino hasta la basílica. También cuentan con variados medicamentos por si lo requieran.
Para la peregrinación, más aún si implica caminar un largo trayecto, la hidratación es fundamental, por lo que se previeron lugares que cuentan con una importante cantidad de bebederos donde las personas pueden llegar y surtirse del líquido vital sin ningún costo. Algunos de estos puestos pertenecen a empresas privadas, sin embargo también están instalados los tanques de Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) para todos aquellos que necesitan proveerse de agua. Estos están instalados en puntos estratégicos y tampoco tienen costo.
Protocolos sanitarios en la basílica
Aunque en todo momento tanto agentes policiales como voluntarios recorren las inmediaciones de la basílica solicitando a los peregrinantes que cumplan con el protocolo sanitario, se puede observar que muchas personas una vez en el lugar se olvidan de esos requisitos fundamentales para protegerse del contagio del coronavirus. Peregrinos sin tapabocas y un gran número de fieles aglomerados alrededor de la basílica es la realidad a estas horas de la noche.