Miembros de la comisión vecinal de los barrios Santo Domingo y Manorá de Asunción se manifestarán hoy frente al Spa Balmes, que sigue operando pese a contar con una orden de suspensión de actividades por parte de la Municipalidad de Asunción, desde el pasado 7 de mayo.

El local debió quedar cerrado meses atrás por falta administrativa debido a que no cuenta con habilitación. Sin embargo, sus propietarios cortaron las cintas de cierre y el cartel de suspendido y siguieron operando como si nada, denunciaron los vecinos.

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“Hoy a partir de las 19:00 como comisión vecinal de los barrios Santo Domingo y Manorá nos autoconvocamos a un encuentro de vecinos y propietarios preocupados por la falta de acción de la Municipalidad de Asunción con respecto a la desavenencia a sus ordenanzas y leyes”, señaló una de las referentes de esta comisión vecinal.

Aseguran también que esta zona de Asunción es denominada residencial y que la misma no tiene la infraestructura necesaria para abrir locales comerciales; uno de los principales problemas es que las calles son muy angostas y con la presencia de este spa, sus clientes cierran calles y estacionan sobre veredas poniendo en peligro a los habitantes del barrio, que pagan uno de los impuestos más caros en la ciudad para tener un barrio tranquilo.

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“El nombre del spa es Balmes, tiene varias irregularidades como por ejemplo operar en un barrio residencial, aquí está prohibido abrir comercios. Sin embargo, ellos abrieron sin ninguna habilitación”, dijo una de las vecinas en comunicación con La Nación, que omitió dar su nombre debido a que supuestamente los propietarios de este centro spa son muy violentos y temen a represalias.

Los vecinos se concentrarán en la calle Nuestra Señora del Carmen esquina Vicepresidente Argaña, frente mismo al spa con orden de clausura firmada por una jueza, un actuario y un oficial de justicia el pasado 6 de agosto, pero el establecimiento opera con total normalidad.

“La situación es completamente irregular y alarmante porque demuestra la falta de poder de la municipalidad y garantías para los contribuyentes del barrio capitalino. ¿Para qué sirven las disposiciones municipales si no se hacen cumplir?”, lamentó la referente de la comisión.

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