Esto fue confirmado por el presidente del Sindicato de Directores (Sinadi), Miguel Marecos, tras la visita a la escuela Reino de Suecia, institución en la que no se entregaron obras y en las que afirma, se utilizaron materiales de mala calidad, puesto que ya hay fisuras en la estructura de las mismas.
El retorno a las clases presenciales está a la vuelta de la esquina, sin embargo, en el municipio de Villa Elisa, la pandemia no fue aprovechada para destinar los fondos del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) para poner en óptimas condiciones las diferentes instituciones educativas.
Miguel Marecos, presidente del Sindicato de Directores, informó que solicitará a la Contraloría General de la República (CGR) y al Ministerio Público que investiguen al uso que se le dio a los fondos del Fonacide en dicha municipalidad debido a que en una visita de verificación en centros educativos, se encontraron con escuelas con obras inconclusas y con falta de entrega de las obras terminadas.
Tal es el caso de la escuela Reino de Suecia de Villa Elisa, en la que se construyó un pabellón con dos aulas, destinadas al nivel inicial y en la que a pesar de que la obra finalizó hace aproximadamente un año, la misma no fue habilitada.
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“Es una obra concluida desde hace un año con fondos del Fonacide, y hasta ahora no se le entrega a la institución, ahora ya empiezan a ver rajaduras, se hizo una obra con materiales de tercera calidad creo yo, entonces, se empieza a rajar la pared, el pozo ciego está un desastre, y ahí tienen que ir niños de educación inicial y de primer grado, es peligrosísimo”, señaló Marecos.
La obra fue iniciada durante la administración de Ricardo Estigarribia, quien fue reelecto como intendente. El administrador interino, José Larroza, tampoco dio explicaciones a la institución del motivo de esta falta de entrega. “Simplemente sin respuesta estoy, tanto de la administración anterior como del intendente interino”, expresó la directora de la institución, Josefina Romero.
Por más de que la construcción del aula ya culminó en diciembre del 2020, las nuevas salas de clases ya cuentan con fisuras en la parte del techo y de acuerdo a las declaraciones de la directora de la institución, las vigas del techo están infestadas de termitas.
Con la construcción de estas dos salas de clases, se dañó una tercera aula, la del primer grado, que ya estaba en la institución antes de esa obra y ocasionaron grietas en las paredes, además de haber tapado las ventanas con las paredes de las nuevas aulas. “Ahora la sala está a oscuras”, manifestó la directora.
También se construyó un pozo ciego, pero no se tuvo mejor que idea que hacerlo en el área de juegos de los niños del nivel inicial. Esto sin mencionar que dicho pozo causa filtraciones y causa inundaciones cada vez que llueve.
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“Si se hunde ese pozo, porque está falseando la tierra, imaginate que se vaya una criatura a jugar en esa parte, porque es el parque de jardín y preescolar, el lugar en el que ellos juegan está el pozo ciego, y eso se está por derrumbar y si se cae un niño, yo voy a ser la responsable”, expresó directora en una comunicación con esta redacción.
La directora mencionó que no tuvo ninguna participación en esta licitación, desconoce el monto destinado, la empresa constructora asignada, así como también el motivo por el que la obra no fue entregada.
“La directora ya envió 50 notas por ahí a la municipalidad para que ella pueda ver qué hacer, porque no se entrega la obra ya tiene termitas, está rasgada la pared, pero no se entrega a la institución”, mencionó el titular del Sinadi.
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Aproximadamente 100 niños del nivel inicial y del primer grado se arriesgan a dar clases bajo el tinglado por esta situación, motivo por el que la Contraloría y la Fiscalía deberán investigar cuál fue el uso que se le dio a estos fondos, ya que los más perjudicados de esta situación son los niños y docentes que deben asistir a las escuelas y quienes se exponen a todo tipo de peligros.