La inseguridad es una de las otras pandemias por las que pasa el país. Todos los días se reportan más casos de robos y asaltos. Esta vez los delincuentes ingresaron por cuarta vez en una escuela, de donde se llevaron lo último que tenía de valor, libros y cuadernos.

Se trata de la escuela Fray Bartolomé de las Casas del barrio Puerto Botánico, que fue robada por cuarta vez en una sola semana. La misma fue visitada por los malvivientes los días lunes, martes, miércoles, entre la noche del jueves y madrugada de hoy viernes.

“Quitaron la puerta y se llevaron los cuadernos de los niños. La vez pasada se llevaron 70 a 80 libros que eran para los estudiantes”, explicó en Universo 970 Jorge Benítez, presidente de la cooperadora escolar.

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Destacó que ante esta situación solo son los niños los que más sufren porque se van quedando sin materiales, además ya se robaron ventiladores, focos y todos los objetos de valor que luego son repuestos gracias a los padres. “Están llevando de todo. La escuela está sufriendo mucho y tenemos mucha impotencia”, señaló.

Dijo que se sabe quiénes son los que hacen esto, pero que la gente del barrio está temerosa de realizar las denuncias o acusaciones por miedo a represalias por parte de los familiares o por los mismos delincuentes que salen muy rápido libres. “Todos sabemos cómo son las personas que consumen drogas y nuestro barrio es una zona roja. Hay gente buena también acá y ya estamos cansados”.

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Manifestó que hace poco los padres se reunieron y con la poca plata que tenía lograron renovar la cara de la escuela con pintura nueva, pero que con los robos constantes deben gastar más dinero para reponer las puertas, focos, entre otros.

“La policía ayuda siempre, no nos quejamos de ellos, pero son los jueces los que dictan prisión domiciliaria para estas personas y claro está que no respetan. Te puedo asegurar si la policía va ahora en la casa de los que tienen prisión domiciliaria no los van a encontrar”, sentenció.

Cabe destacar que como medida de precaución docentes y padres decidieron desinstalar los aires acondicionadores para evitar que en la próxima visita se lleven estos. La institución cuenta con circuito cerrado y todas las veces fueron las mismas personas las que ingresaron.

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