Desde el Hospital de Clínicas de la FCM-UNA indicaron que durante el último fin de semana registraron 20 óbitos en el área de Contingencia Respiratoria, de los cuales 16 fueron por COVID-19 confirmado y cuatro estaban en estudio.

Al respecto, la Dra. Fátima Ovando, jefa del Departamento de Control de Infecciones Intrahospitalarias, explicó que se está viendo el ingreso de nuevas cepas, sobre todo que tienen impacto en la contagiosidad, entonces cuanto más contagio se reporta, aumenta el número de pacientes graves que llegan incluso a la muerte.

Señaló que es importante que las personas entiendan que las medidas sanitarias no se pueden dejar de cumplir, por más que ciertas personas ya fueron inmunizadas, no se pueden relajar atendiendo que se está en el momento más crítico probablemente de la epidemia.

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Durante el último fin de semana registraron 20 óbitos en el área de Contingencia Respiratoria, de los cuales 16 fueron por COVID-19 confirmado y cuatro estaban en estudio. Foto: Pánfilo Leguizamón.

Si bien manifestó que en el mes de julio se podría tener otra crecida de pacientes, que realmente en esta etapa se está dando una meseta muy alta, porque los números así lo indican. Explicó que todos los días se está reportando entre 2.000 y 3.000 contagiados por día, y son solo cifras conocidas porque existen casos de personas con síntomas leves, que ya ni siquiera se realizan el hisopado.

“Esto es muy preocupante porque se ve relajación en el cumplimiento de las medidas sanitarias. Se entiende que la gente está cansada, hay personas que perdieron el miedo por múltiples razones. Por ejemplo la gente ya inmunizada debe saber que por más que recibieron las dosis de la vacuna que sea, ya que ninguna de estas vacunas da una inmunidad del 100%. Eso quiere decir que la persona igual se puede contagiar, igual puede tener síntomas de una forma moderada a severa debido a que algunas de estas cepas no están cubiertas por las vacunas”, sostuvo.

La profesional reiteró la importancia de seguir con las medidas sanitarias de modo de prevenir el contagio masivo del COVID-19.

Sobrecarga laboral de personal de salud

Igualmente, Ovando señaló que los médicos y personal de enfermería que se encuentran en las áreas de Contingencia Respiratoria están al límite de sus fuerzas y que es imposible pedirles más; así también, la infraestructura del hospital está extralimitada, no se está pudiendo dar una respuesta completa a toda la demanda.

La profesional agregó que se han registrado renuncias del personal de salud del área de contingencia y que se dieron por varios factores, entre ellos lo difícil que se torna trabajar en un ambiente con gran demanda de pacientes graves, problemas de insumos médicos e infraestructura, lo que hace que el personal se vea desbordado y sin poder dar respuesta ante esas dificultades. “Es mucha la presión que tienen a diario y eso se ve afectado en su estado anímico”, aseguró.

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La jefa del Departamento de Control de Infecciones Intrahospitalarias recordó que la cuestión no es que se habiliten más camas o más pabellones de contingencia, ya que eso no va a solucionar el problema. “Tampoco importa que se cuente con seguros médicos privados o que se tengan medios para pagar oxígeno; lo que se necesita son médicos y personal de enfermería capacitados en el área y eso prácticamente ya no hay. La gente tiene más bien que pensar en la prevención tomando las medidas sanitarias y evitar contagiarse, no llegar al hospital, pero lastimosamente eso no está ocurriendo, no se dimensiona el problema y es preocupante”, apuntó.

Contención psicológica

Finalmente, la profesional comentó que van a estar trabajando con el Departamento de Salud Mental del hospital para que el personal de contingencia reciba atención psicológica in situ ante el estrés que viven a diario.

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