Nos aproximamos a cumplir el primer año del ingreso del COVID-19 al país. A medida que pasan los días, Paraguay se encuentra en su peor momento y al borde del colapso total en cuanto a la situación sanitaria. Cada vez son más las denuncias por falta de medicamentos para internados y la ocupación de camas en las terapias es del 100% en casi todos los hospitales.

Así también, son varias las localidades que decidieron declararse en emergencia sanitarias por la gran cantidad de casos y en Alto Paraná pasan por la segunda ola con muchos casos de reinfectados. Una de las últimas novedades es la renuncia del director del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram), doctor Felipe González, quien tomó esta decisión ante la falta de medicamentos.

“Si miramos para atrás por semana y por días, es el momento en que más internados tenemos. Entonces podemos decir que es el peor momento en que vivimos y solamente necesitamos tiempo. Puede ser peor”, aseguró en entrevista con C9N el director de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera.

Afirmó que en lo que va de la pandemia esta es la situación más crítica a nivel país. “Puede empeorar. Este es el pico más alto de los muchos otros que hemos tenido. Hubo una meseta a nivel nacional, pero dentro de esta hay varios casos por regiones”, expresó.

Alegó que el departamento de Alto Paraná está pasando por la segunda ola de casos de COVID-19, específicamente Ciudad del Este. “La más contundente es la segunda ola en Ciudad del Este, en su momento pico a nivel nacional”, recordó.

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Indicó que Central y capital se mantienen en números de casos positivos y fallecidos por complicaciones del nuevo coronavirus desde el mes de diciembre. “Pero lo que nos preocupa son los departamentos como Alto Paraná, que estaba prácticamente tranquilo, pero que desde hace un mes viene aumentando de una manera muy importante, más ahora que no tenemos las fronteras totalmente cerradas”.

Reconoció que el cierre de las fronteras no fue perfecto, pero hizo que los contagios sean más lentos. “Hoy una ola endémica en Brasil en menos de 15 días llega acá y eso que están vacunando. Esta es la dinámica de la pandemia, el precio de una actividad económica abierta y en movimiento”, refirió Sequera.

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En otro momento, el profesional afirmó que se tiene casi un 100% de las camas ocupadas y varios hospitales colapsados. “El sistema de salud está al límite, al 100%”, sostuvo y afirmó que el ministro de Salud tiene previsto suspender todas las cirugías programadas para liberar las camas.

“De alguna manera eso libera muchas camas, generalmente cuando uno se opera siempre se guarda una cama de terapia por si necesitas de posquirúrgico. Esas camas se van a usar ahora para COVID”, sentenció y aclaró que van a reacondicionar varias áreas, como las polivalentes que tendrían que ser para casos respiratorios, pero que se cedieron en su momento ante la falta de pacientes con COVID. “Ahora se van a recuperar esas áreas”, indicó.

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Destacó que hoy la gente sabe cuál es el medio de contagio y ya no está con la intención de salir a las calles vestida como astronauta. “Sabemos que es difícil de contagiarse tocando una superficie y que es importante lavarse las manos siempre. Sabemos los medicamentos que sirven y cuáles no. Gran parte de los medicamentos que creíamos que servían ya no se usan más. Hoy ya sabemos cómo se maneja y mortalidad es menor”.

Manifestó su deseo de que los números de contagios –que son más de 1.000 por días– y de fallecidos –que son entre 15 a 20 diarios– se mantengan durante este pico por el que está pasando el país. Pidió que teniendo en cuenta la cantidad de contagios se vayan haciendo los controles por zonas y no en todo el territorio.

Instó a la ciudadanía a tomar las medidas sanitarias y que la llegada de las vacunas va a ayudar, pero de igual forma se deben mantener las medidas en el hogar, al salir a recrearse, en las escuelas y el trabajo, y a no relajarse.