El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, señaló que se realizarán ajustes en las medidas sanitarias debido al aumento incesante de casos de COVID-19 y la complicada situación a nivel país que se vive desde finales del 2020.
Adelantó que en enero no será muy distinto, por lo que se prevé realizar mayores controles para mitigar contagios masivos entre la población. Afirmó que se tratará de un nuevo decreto que estará en vigencia desde el próximo lunes.
Sin embargo, manifestó que no habrá un retroceso en las medidas, pero reconoció que al estar exigidos en Salud Pública deben ajustar las medidas sanitarias contra el coronavirus. El anuncio lo realizó luego de una reunión con el presidente de la República, Mario Abdo, en el Palacio de Gobierno.
“Esta tarde vamos a tener una reunión con el equipo, ya les adelanto que no habrá mayores cambios importantes. No pretendemos un retroceso importante. Las medidas que tenemos ahora son las mínimas posibles”, afirmó.
Igualmente, el ministro de Salud anunció mayor control fiscal y policial de las medidas sanitarias. Asimismo pidió colaboración a los municipios y en consecuencia a sus intendentes. Según Mazzoleni, fueron imputados varios propietarios de balnearios por las aglomeraciones de fin de año.
“Son trabajos que se van a realizar a modo de coordinar tareas para las medidas de control. Salud recomienda la restricción de horarios y el cumplimiento del protocolo sanitario”, declaró.
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El titular de Salud Pública manifestó que 7 de cada 10 personas que fallecen por COVID-19 son mayores de 60 años. Sin embargo, observan un pequeño descenso en el promedio de edad de las víctimas fatales. Afirmó que la mayoría de las personas infectadas tiene entre 20 a 60 años
“No podemos dar ningún maquillaje a una situación que es absolutamente real. Estamos sumamente exigidos, si bien el sistema tiene todavía camas a nivel país. Las zonas más afectadas son Asunción, Central y Alto Paraná”, expresó Mazzoleni.
Señaló que existe una alta ocupación de camas de terapia intensiva a nivel país a raíz del virus, accidentes y enfermedades polivalentes.
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“La proporción es 60% de todo lo demás y 40% de COVID-19. Estamos complicados porque el sector de blanco está haciendo lo suyo. Es un gran sacrificio. Esperamos que nos apoyen para minimizar el efecto”, declaró.